Aunque el tiempo mismo se ha encargado de ir evolucionando las ideas al momento de salir de ‘reventón’ con amigos, novias y novios aún se mantienen ciertos lugares para seguir catalogando los fines de semana como los mejores días.

Desde el jueves hasta el sábado en la madrugada, e incluso domingos para aquellos lunes festivos, a partir de las 6 de la tarde Valledupar toma otra cara y se convierte en una ciudad de luces, con ambiente y olor a fiesta para pasar buenos ratos.
A eso de las 9 de la noche la capital cesarense da a conocer su otra faceta, se convierte en un sitio donde al son de su cultura vallenata y las melodías de grandes artistas de este sector ambientan las reuniones que para esos días se organizan. La carrera novena, la calle doce y la avenida Simón Bolívar al igual que la Fuente son los lugares más frecuentados por los rumberos.

Lo que se puede encontrar…

La carrera novena ofrece a los apasionados por las rumbas diferentes lugares donde llegar; los restaurantes bares son los más apetecidos, por la facilidad de encontrar un lugar donde ir a cenar y después, disfrutar de lo que resta del día.
La calle doce y la avenida Simón Bolívar agrupan un sector amplio de estancos, sitios populares para aquellos que desean algo más informal. Así mismo existen algunos que han ubicado mesas de billares y otros ocios para ofrecer un servicio extra a los consumidores.

Lo que se ha mantenido…

Durante más de 25 años Valledupar ha sido testigo de la acogida y permanencia que ha tenido una de las discotecas más reconocidas por los valduparenses; Kankurua.

¿Su secreto? El lugar queda al interior de un reconocido hotel 5 estrellas del municipio. Es decir, Kankurúa hace parte de los servicios que ofrece el centro hotelero. De ahí se supone que ha logrado mantener preferencia en la ciudad; Porque a pesar de ser un valor agregado que ofrece el hotel a sus huéspedes se expande el producto al personal externo, de jueves a sábado desde las 6 de la tarde hasta las 4 de la mañana.

Por excelencia el vallenato es parrandero y pesar de que la ciudad no es un terreno muy amplio en este campo de discotecas, han sido ingeniadas zonas estratégicas para que propios y visitantes disfruten de las rumba del ‘valle’.