La contienda electoral llega a su momento determinante, este domingo estamos convocados para ejercer el derecho al voto, por ahora nada está escrito y cualquier cosa puede ocurrir, pero son muchas las incógnitas que surgen horas previas de esta elección presidencial.

No se puede ignorar la fuerza del candidato Iván Duque y su posición en las encuestas no se debe a otra cosa que al apoyo vehemente de su mentor Álvaro Uribe Vélez, la figura que coloca los votos en ese partido capaz de hacer elegir a un gran número de senadores y con el poder de crear un candidato de la noche a la mañana con altas probabilidades de ser presidente de Colombia, ocurrió en el 2014 con Oscar Ivan Zuluaga logrando cantar victoria inicialmente pero derrotado en la segunda vuelta por el presidente Juan Manuel Santos.

El gran fenómeno en esta oportunidad es incuestionablemente Gustavo Petro el candidato de la Colombia Humana, a pesar de ser exguerrillero del M-19, señalado de mal administrador por su paso en la alcaldía de Bogotá, poseer una personalidad extremadamente difícil, ha tenido un crecimiento progresivo en todas las mediciones, contra todo pronóstico superó los techos numéricos que le calculaban y cuenta con serias probabilidades de acompañar al candidato Duque a la segunda vuelta lo que provocará un codicioso y hasta sorprendente juego de alianzas en cada campaña.

La gran incógnita es el señor Germán Vargas Lleras, sus opciones están estrechamente ligadas al apoyo de los líderes regionales y la capacidad que tienen para movilizar los votos que le permitan al exvicepresidente salir bien librado el domingo, su experiencia es su más fuerte carta de presentación, su carácter el punto con el que pretendieron debilitarlo, pero en sus últimas apariciones ha logrado enviar un mensaje de tranquilidad institucional ofreciendo confianza a diferencia de Iván Duque y Gustavo Petro quienes proponen unos traumatismos constitucionales que promete estremecer la estructura del Estado colombiano y el principio de equilibrio de poderes.

Sergio Fajardo aún guarda esperanzas en conquistar una gran franja de opinión llevando el mensaje que es el único que puede derrotar a Iván Duque en segunda vuelta, a mi modo de ver estrategia equivocada ó inocente por decir lo menos, si las cuentas de Fajardo no le dan para vencer en primera vuelta mucho menos tendrá chance de triunfar en segunda vuelta.

Humberto De la Calle, sepultado desde que lanzó su candidatura, la consulta con Juan Fernando Cristo fue un golpe mortal para su aspiración por los resultados tan pobres obtenidos y hasta el momento se queda con la etiqueta de ser un gran candidato pero sin nada que hacer en esta campaña, lástima porque en verdad si es un gran candidato.