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Columnista - 17 octubre, 2015

La innovación tecnológica y sus efectos en la nueva perspectivas de gobierno

Hoy los gobiernos se enfrentan al reto de liberar y canalizar las fuerzas transformadoras de la innovación tecnológica, con su potencial de autoempoderamiento para personas y empresas. Estamos rodeados de innovaciones tecnológicas, que afectan a cada vez más personas, sectores y actividades en todo el mundo. Un número creciente de plataformas facilitan a hogares y […]

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Hoy los gobiernos se enfrentan al reto de liberar y canalizar las fuerzas transformadoras de la innovación tecnológica, con su potencial de autoempoderamiento para personas y empresas.

Estamos rodeados de innovaciones tecnológicas, que afectan a cada vez más personas, sectores y actividades en todo el mundo. Un número creciente de plataformas facilitan a hogares y corporaciones acceder a una gama cada vez más amplia de actividades y participar en ellas; miremos toda la crisis que se vive en Bogotá con Uber o en Cartagena con la plataforma AIRBN.

Lo anterior se plantea por cuanto los candidatos a la Gobernación del Cesar y a la Alcaldía de Valledupar, han tocado tangencialmente este tema, con propuestas dirigidas al aprovechamiento e incentivo de nuevas oportunidades tecnológicas para generar empleo.

En este sentido, es necesario presentar la quinta brecha que enfrenta un gobierno, que corresponde al proceso de disrupción y sus efectos. La disrupción debe entenderse como un proceso que nos saca de la zona de confort y nos obliga a confrontar viejas negaciones y sesgos inconscientes para adoptar una mentalidad nueva. Pero los que esperen algo fácil de hacer sí los gobiernos no organizan una respuesta a tiempo se perderán las inmensas ventajas que la tecnología tiene para ofrecer, incluso para implementar políticas favorables a la renovación y adaptación económica.

Sin embargo, ello conlleva a que los gobiernos además de considerar esta tendencia como una oportunidad, deben abrirse mucho más a la disrupción. Así mismo, es necesario que se tomen medidas para empoderar a las fuerzas del cambio, asegurar la internalización de las enormes externalidades positivas y minimizar los efectos negativos. De lo contrario, las fuerzas de la transformación los dejarán a ellos y a sus ciudadanos atrás.

Por Roberto Carlos Núñez Vega

Columnista
17 octubre, 2015

La innovación tecnológica y sus efectos en la nueva perspectivas de gobierno

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Roberto Carlos Núñez Vega

Hoy los gobiernos se enfrentan al reto de liberar y canalizar las fuerzas transformadoras de la innovación tecnológica, con su potencial de autoempoderamiento para personas y empresas. Estamos rodeados de innovaciones tecnológicas, que afectan a cada vez más personas, sectores y actividades en todo el mundo. Un número creciente de plataformas facilitan a hogares y […]


Hoy los gobiernos se enfrentan al reto de liberar y canalizar las fuerzas transformadoras de la innovación tecnológica, con su potencial de autoempoderamiento para personas y empresas.

Estamos rodeados de innovaciones tecnológicas, que afectan a cada vez más personas, sectores y actividades en todo el mundo. Un número creciente de plataformas facilitan a hogares y corporaciones acceder a una gama cada vez más amplia de actividades y participar en ellas; miremos toda la crisis que se vive en Bogotá con Uber o en Cartagena con la plataforma AIRBN.

Lo anterior se plantea por cuanto los candidatos a la Gobernación del Cesar y a la Alcaldía de Valledupar, han tocado tangencialmente este tema, con propuestas dirigidas al aprovechamiento e incentivo de nuevas oportunidades tecnológicas para generar empleo.

En este sentido, es necesario presentar la quinta brecha que enfrenta un gobierno, que corresponde al proceso de disrupción y sus efectos. La disrupción debe entenderse como un proceso que nos saca de la zona de confort y nos obliga a confrontar viejas negaciones y sesgos inconscientes para adoptar una mentalidad nueva. Pero los que esperen algo fácil de hacer sí los gobiernos no organizan una respuesta a tiempo se perderán las inmensas ventajas que la tecnología tiene para ofrecer, incluso para implementar políticas favorables a la renovación y adaptación económica.

Sin embargo, ello conlleva a que los gobiernos además de considerar esta tendencia como una oportunidad, deben abrirse mucho más a la disrupción. Así mismo, es necesario que se tomen medidas para empoderar a las fuerzas del cambio, asegurar la internalización de las enormes externalidades positivas y minimizar los efectos negativos. De lo contrario, las fuerzas de la transformación los dejarán a ellos y a sus ciudadanos atrás.

Por Roberto Carlos Núñez Vega