Nicolás Elías Mendoza Daza, ’Colacho’ Mendoza nació en Sabanas de Manuela, San Juan del Cesar, La Guajira, 15 de abril de 1936 y falleció en Valledupar el 27 septiembre de 2003. Fue un hombre de pocas palabras, murió sin saber su valía, no le importó lo material, en cambio el abrazo de un amigo lo […]
Nicolás Elías Mendoza Daza, ’Colacho’ Mendoza nació en Sabanas de Manuela, San Juan del Cesar, La Guajira, 15 de abril de 1936 y falleció en Valledupar el 27 septiembre de 2003.
Fue un hombre de pocas palabras, murió sin saber su valía, no le importó lo material, en cambio el abrazo de un amigo lo doblegaba. La fama pasó por él, hay muchas anécdotas que muestran a un ‘Colacho’ desprevenido, inocente y montuno.
Dos días después de su muerte, su esposa Fanny Zuleta me contó varias anécdotas. Una vez el famoso cantante argentino Diego Torres llamó a ‘Colacho’ a su casa. Fanny le dijo que estaba viajando, que lo llamara en la noche. Las llamadas de Diego Torres se hicieron repetitivas, durante varios días.
Le comentó a ‘Colacho’, pero él les restó atención. Ella también le dio poca importancia al tema, al fin y al cabo, tampoco sabía quién era Diego Torres. Fanny indagó por qué buscaba tanto a su marido. Le preguntó a su sobrina política Marlene Rincones López, quien le dijo que era un cantante famosísimo y autor de varias canciones que a ella le gustaban tanto, se quiso volver loca.
‘Colacho’ tenía cuatro días de estar tocando en el Carnaval de Barranquilla. Regresó a Valledupar en la madrugada del miércoles de Ceniza y se acostó a dormir. A las dos de la tarde volvieron a llamar. Del otro lado de la línea escuchó la misma voz, pero más sensacional y dulce. Era Diego Torres y Fanny casi se cae.
Diego preguntó por ‘Colacho’, ella tartamudeó, dijo que sí, dijo que no, dijo un momento, en fin, no supo lo que dijo. Él le explicó someramente que necesitaba a ‘Colacho’ para que participara con su acordeón en su nuevo disco, tenía un proyecto musical muy importante internacionalmente y quería incluir el acordeón de él en dos o tres de sus canciones.
Fanny escuchó la propuesta como una fantasía y no lo podía creer. Con el mismísimo acento argentino le preguntó nuevamente por ‘Colacho’, ella –se estaba portando como una adolescente- titubeó, pero se lo dijo: “Un momento, ya lo llamo”, y entró al cuarto donde dormía plácidamente ‘Colacho’.
Lo llamó, lo meneo. ‘Colacho’ refunfuñó. “Cola, cola, despierta, te está llamando Diego Torres, hace días te está llamando”. ‘Colacho’ abrió los ojos, bostezando y lanzó su clásica frase “qué vaina, déjame descansar”.
Fanny lo volvió a menear. ‘Colacho’ se levantó, fue al baño y se cepilló los dientes. Ella corrió hacia el teléfono: “Ya viene, Diego, tranquilo, es que estaba durmiendo porque llegó en la madrugada de los carnavales”. Diego asintió con un sí.
Pasaron 30 segundos. Fanny no sabía qué hacer, si ir al cuarto o decirle a Diego Torres que esperara. Decidió hacer lo primero, corrió nuevamente al cuarto y vio a ‘Colacho’ dormido. Lo volvió a menear y le dijo con rabia: “‘Veee’, Cola, Diego Torres te está esperando”.
‘Colacho’ la miró semidormido y le hizo la pregunta que ella quería: “¿Bueno, y qué es lo quiere ese Diego Torres?”. A Fanny le brillaron los ojos de alegría y se lo dijo de una: “Quiere grabar contigo, hace días te está llamando para que vayas a Argentina a grabar con él”.
Pero la respuesta de ‘Colacho’ derrumbó todo y Fanny supo después por qué no encontró a Diego en la línea, seguramente porque escuchó la frase fuerte, contundente, de Colacho: “Bueno, Fanny, yo no grabo con gente que no conozco, yo no voy a grabar con ese tipo, yo con gente desconocida no grabo, déjame tranquilo”, y se volvió a dormir. Fanny, abatida, fue al teléfono, pero ya Diego no estaba en la línea. Hasta la próxima semana.
@tiochiro
Nicolás Elías Mendoza Daza, ’Colacho’ Mendoza nació en Sabanas de Manuela, San Juan del Cesar, La Guajira, 15 de abril de 1936 y falleció en Valledupar el 27 septiembre de 2003. Fue un hombre de pocas palabras, murió sin saber su valía, no le importó lo material, en cambio el abrazo de un amigo lo […]
Nicolás Elías Mendoza Daza, ’Colacho’ Mendoza nació en Sabanas de Manuela, San Juan del Cesar, La Guajira, 15 de abril de 1936 y falleció en Valledupar el 27 septiembre de 2003.
Fue un hombre de pocas palabras, murió sin saber su valía, no le importó lo material, en cambio el abrazo de un amigo lo doblegaba. La fama pasó por él, hay muchas anécdotas que muestran a un ‘Colacho’ desprevenido, inocente y montuno.
Dos días después de su muerte, su esposa Fanny Zuleta me contó varias anécdotas. Una vez el famoso cantante argentino Diego Torres llamó a ‘Colacho’ a su casa. Fanny le dijo que estaba viajando, que lo llamara en la noche. Las llamadas de Diego Torres se hicieron repetitivas, durante varios días.
Le comentó a ‘Colacho’, pero él les restó atención. Ella también le dio poca importancia al tema, al fin y al cabo, tampoco sabía quién era Diego Torres. Fanny indagó por qué buscaba tanto a su marido. Le preguntó a su sobrina política Marlene Rincones López, quien le dijo que era un cantante famosísimo y autor de varias canciones que a ella le gustaban tanto, se quiso volver loca.
‘Colacho’ tenía cuatro días de estar tocando en el Carnaval de Barranquilla. Regresó a Valledupar en la madrugada del miércoles de Ceniza y se acostó a dormir. A las dos de la tarde volvieron a llamar. Del otro lado de la línea escuchó la misma voz, pero más sensacional y dulce. Era Diego Torres y Fanny casi se cae.
Diego preguntó por ‘Colacho’, ella tartamudeó, dijo que sí, dijo que no, dijo un momento, en fin, no supo lo que dijo. Él le explicó someramente que necesitaba a ‘Colacho’ para que participara con su acordeón en su nuevo disco, tenía un proyecto musical muy importante internacionalmente y quería incluir el acordeón de él en dos o tres de sus canciones.
Fanny escuchó la propuesta como una fantasía y no lo podía creer. Con el mismísimo acento argentino le preguntó nuevamente por ‘Colacho’, ella –se estaba portando como una adolescente- titubeó, pero se lo dijo: “Un momento, ya lo llamo”, y entró al cuarto donde dormía plácidamente ‘Colacho’.
Lo llamó, lo meneo. ‘Colacho’ refunfuñó. “Cola, cola, despierta, te está llamando Diego Torres, hace días te está llamando”. ‘Colacho’ abrió los ojos, bostezando y lanzó su clásica frase “qué vaina, déjame descansar”.
Fanny lo volvió a menear. ‘Colacho’ se levantó, fue al baño y se cepilló los dientes. Ella corrió hacia el teléfono: “Ya viene, Diego, tranquilo, es que estaba durmiendo porque llegó en la madrugada de los carnavales”. Diego asintió con un sí.
Pasaron 30 segundos. Fanny no sabía qué hacer, si ir al cuarto o decirle a Diego Torres que esperara. Decidió hacer lo primero, corrió nuevamente al cuarto y vio a ‘Colacho’ dormido. Lo volvió a menear y le dijo con rabia: “‘Veee’, Cola, Diego Torres te está esperando”.
‘Colacho’ la miró semidormido y le hizo la pregunta que ella quería: “¿Bueno, y qué es lo quiere ese Diego Torres?”. A Fanny le brillaron los ojos de alegría y se lo dijo de una: “Quiere grabar contigo, hace días te está llamando para que vayas a Argentina a grabar con él”.
Pero la respuesta de ‘Colacho’ derrumbó todo y Fanny supo después por qué no encontró a Diego en la línea, seguramente porque escuchó la frase fuerte, contundente, de Colacho: “Bueno, Fanny, yo no grabo con gente que no conozco, yo no voy a grabar con ese tipo, yo con gente desconocida no grabo, déjame tranquilo”, y se volvió a dormir. Fanny, abatida, fue al teléfono, pero ya Diego no estaba en la línea. Hasta la próxima semana.
@tiochiro