La anunciada protesta de este lunes 22 de abril, del gremio de transportadores del centro del Cesar, en contra de las fotomultas instaladas en la vía nacional, a la altura del municipio de Codazzi, es repetida en todas las carreteras de la Costa en la que las autoridades municipales se han puesto de acuerdo con algunos piratas para sorprender a los viajeros en el camino.

De golpe, inusitadamente, toca bajar la velocidad de 90 kilómetros por hora, a una velocidad absurdamente baja y peligrosa , frente a asaltantes a la vera de la ruta, expuestos a una multa diseñada de tal forma que en el proceso de reclamo, con toda la razón legal, se gasta una suma superior y un tiempo engorroso por el afectado que haciendo cálculos es mejor pagar la injusta sanción. Parece una figura diabólica.

Este 17 de abril el certamen de celebración de la muerte del escritor Nobel Gabriel García Márquez en Aracataca se vio seriamente afectado, justo por una protesta en ese sentido. Los que alcanzaron a llegar a su ciudad nativa no sabían cómo salir y los que habían preparado su viaje se les impidió llegar. Hubo funcionarios nacionales, y también del departamento y municipios cercanos que no llegaron; profesores y escritores molestos, e incluso visitantes internacionales sorprendidos por esa situación. En esa región de la zona bananera es ya vieja usanza en todos los gobiernos con los conductores, en especial los que del interior del país se mueven masivamente hacia Santa Marta, destino turístico por excelencia. Estos paisas, vallunos o rolos se ven asaltados y son justamente los que menos incentivo tienen para dedicar tiempo y apoderado y prefieren pagar. Eso lo sabe la respectiva secretaría de hacienda.

Esperamos que esta vez la autoridad nacional, preocupada razonablemente por los indicadores de inseguridad nacional, no se haya sumado al coro de los justicieros del camino.

Ahora en el Cesar más de 600 transportadores cerrarán la vía nacional a la altura de los municipios de Curumaní, Becerril, El Paso, La Jagua de Ibirico y Codazzi.

“El gremio de transportadores se ve afectado porque cuando queremos actualizar nuestra licencia es imposible por la cantidad de multas y comparendos. Muchos son ilegales y no tienen notificaciones”, señaló Kaleet Antelis, uno de los promotores de la marcha.

En redes sociales han denunciado presuntas estafas en las fotomultas, acompañadas de videos.

En vías del Cesar hay cámaras de fotodetección en cinco municipios. El Instituto Departamental de Tránsito instaló dos puntos de control en San Alberto. La fotodetección funciona 24 horas al día. En ese tramo San Alberto-La Mata el límite es 100 kilómetros por hora. No pocas veces son registro de velocidad y no de fotodetección (multa) pero generan confusión.

El otro punto del Instituto está en la entrada de Pailitas. Su objetivo es reducir la velocidad antes de ingresar a la zona urbana. En el corregimiento de La Mata, jurisdicción de La Gloria, la fotodetección está ubicada a la altura de la Y que lleva a Ayacucho.

Otros puntos están en Aguachica, pero pertenecen a la sectorial de Tránsito Municipal. Ambas cámaras están ubicadas en las entradas del municipio por el kilómetro 45 de la Ruta del Sol 2. Y Codazzi tiene dos puntos autorizados en la variante principal, por lo que muchas personas prefieren tomar las calles del pueblo.