Se necesitarán varios días – y quizás semanas- para digerir, estudiar y analizar las múltiples conclusiones que arrojó la primera Gran Encuesta del Programa Valledupar Cómo Vamos. Esta encuesta es como una especie de fotografía de la percepción de la ciudadanía vallenata sobre sus múltiples problemas, distintos aspectos de su ciudad, sus autoridades y sobre ellos mismos.
En efecto, son muchos los aspectos que toca la encuesta sobre temas como el acceso a los servicios públicos y la satisfacción sobre los mismos; servicios sociales como salud y educación, posesión y calidad de la vivienda, movilidad, espacio público, oferta de servicios culturales y recreativos, entre otros.
Y si bien la encuesta muestra aspectos positivos, como el orgullo de vivir en la Capital del Cesar, considerarla un “gran vividero”, etc, la ciudadanía de Valledupar muestra un sentido crítico sobre temas en los cuales es evidente que falta mucho por trabajar y buscar soluciones. Comenzando por los relacionados con los de convivencia y participación ciudadana, entre otros.
Pero, en orden de importancia; sin duda el primero es el tema de la inseguridad; los habitantes de Valledupar se sienten inseguros en su gran mayoría y esta debe ser una señal para el Gobierno Nacional, la Policía y las autoridades municipales, sobre la necesidad de combatir el atraco y el raponazo callejero; el robo y atraco a residencias, principalmente.  Y en este tema la opción es clara: aumentar el pie de fuerza y la presencia de la policía en las calles y en los barrios.
En segundo lugar, está el tema de la movilidad; los habitantes de Valledupar sienten que cada vez requieren más tiempo para transportarse de su sitio de residencia a su trabajo, acuden al mototaxismo, porque les toca ya que no tienen una opción barata y buena de transporte público y critican el estado de las vías de la ciudad.
En esta área también es evidente que se requieren soluciones efectivas y más inversión en infraestructura, más control al mototaxismo y opciones en materia de transporte público colectivo.
Igualmente es urgente la búsqueda de programas efectivos en la lucha contra  el desempleo y la pobreza; a pesar de que estos dependen mucho de políticas del gobierno nacional, los entes territoriales también tienen algunos instrumentos a su alcance, para buscar alternativas de solución a los mismos. En este sentido, son válidos los anuncios del Alcalde sobre programas de emprendimiento y el fomento del microcrédito y las microempresas.
Volviendo a los aspectos positivos, en general la ciudadanía se manifiesta satisfecha, mayoritariamente, con los actuales servicios públicos; no obstante, hay señales dignas de tener en cuenta sobre los servicios de energía, y el de acueducto y alcantarillado, en los cuales las limitaciones que tiene la ciudad son estructurales y requieren solución a mediano y largo plazo.
En materia de vivienda, si bien un 65 por ciento de los encuestados dice ser propietario, lo cual es un buen indicador económico y social;  hay un deseo por mejorar la calidad de la vivienda, tanto para compra como para tomar en arriendo. En la ciudad falta una mayor oferta de vivienda.
Igualmente se quejan los vallenatos de la falta de acceso efectivo a los servicios de salud, de la falta de control sobre el espacio público, del tema de los lotes enmontados y la falta de zonas verdes, parques y demás; como también de tener pocas opciones de recreación y una limitada oferta cultural.
Comentábamos en estas mismas páginas que este será un documento vital, una especie de hoja de ruta, para la administración municipal, para el concejo, los partidos y líderes políticos, los gremios, los empresarios, el sector educativo, los medios de comunicación, entre otros sectores. Invitamos a todos los sectores interesados y a la ciudadanía en general a consultar esta encuesta, a apropiársela, consultándola en internet, en www.valleduparcomovamos.org. Sin duda será un documento esencial en el largo proceso de construir una mejor ciudad, más vivible, igualitaria e incluyente.