Fue el título que se me ocurrió para llamar la atención de quienes deseen saber, por qué el abuso en la ingesta de las bebidas azucaradas, es considerado hoy por hoy, un problema de salud pública. En primer lugar, tenemos que dicho consumo es una de las causas de obesidad, produce en algunas personas cáncer […]
Fue el título que se me ocurrió para llamar la atención de quienes deseen saber, por qué el abuso en la ingesta de las bebidas azucaradas, es considerado hoy por hoy, un problema de salud pública. En primer lugar, tenemos que dicho consumo es una de las causas de obesidad, produce en algunas personas cáncer de páncreas, hígado graso, hambre descontrolada, hipertensión arterial y afecciones cardiovasculares, entre otras enfermedades mortales.
Cuando hablamos de bebidas azucaradas, nos referimos a cualquier bebida no alcohólica, apta para el consumo humano dulce al paladar, gasificada o no, a la cual se le han añadido endulzantes calóricos o contiene azúcares libres, incluye polvos y concentrados que al mezclar con agua o cualquier líquido, dé como resultado una bebida azucarada.
Se viene debatiendo en el Congreso un proyecto de Ley que, tiene por objeto contribuir a la garantía del derecho a la salud de los habitantes del territorio nacional y promover el consumo informado sobre alimentos y bebidas que contengan endulzantes calóricos (tales como la sacarosa, la fructosa, la glucosa etc.), o azúcares libres que son los carbohidratos tipo monosacáridos y disacáridos naturalmente presentes en los alimentos o añadidos a estos por el fabricante, el cocinero o el consumidor, más azúcares presentes en la miel, los jarabes, los jugos de frutas y los concentrados de jugos de frutas.
El tema en cuestión, es de suma importancia, pues crece exponencialmente la población obesa en el mundo, y lo menos que podríamos pedir es que se nos informara en la etiqueta los componentes del producto que vamos a consumir, a fin de elegir aquellos que más convengan a nuestra dieta alimenticia.
Conocemos muchas personas que no se pueden resistir a la tentación de un postre, de una gaseosa o de un helado, sin sospechar siquiera las consecuencias que los consumos excesivos de estos alimentos pueden causar en el organismo. Actualmente, la población de insulino-dependientes en Colombia se estima en 4.5 millones, y en el mundo la cifra es de 382 millones por ello esta enfermedad es considerada la epidemia del siglo XXI.
Notas de cierre: *Comienza la administración de Mello Castro González y surge la pregunta del millón: ¿Por fin podremos los vallenatos y los turistas ver concluida la obra El Mirador del Ecce Homo, que inició la alcaldía de Ciro Pupo Castro, y que quedó a medio hacer? ** La recién nombrada gerente nacional del Fondo Nacional del Ahorro, María Cristina Londoño Juan, intempestivamente suspendió todos los créditos educativos, privando de esa oportunidad a muchos estudiantes de bajos recursos económicos. Así es como el presidente Iván Duque fomenta el acceso de los colombianos a la educación superior.
Fue el título que se me ocurrió para llamar la atención de quienes deseen saber, por qué el abuso en la ingesta de las bebidas azucaradas, es considerado hoy por hoy, un problema de salud pública. En primer lugar, tenemos que dicho consumo es una de las causas de obesidad, produce en algunas personas cáncer […]
Fue el título que se me ocurrió para llamar la atención de quienes deseen saber, por qué el abuso en la ingesta de las bebidas azucaradas, es considerado hoy por hoy, un problema de salud pública. En primer lugar, tenemos que dicho consumo es una de las causas de obesidad, produce en algunas personas cáncer de páncreas, hígado graso, hambre descontrolada, hipertensión arterial y afecciones cardiovasculares, entre otras enfermedades mortales.
Cuando hablamos de bebidas azucaradas, nos referimos a cualquier bebida no alcohólica, apta para el consumo humano dulce al paladar, gasificada o no, a la cual se le han añadido endulzantes calóricos o contiene azúcares libres, incluye polvos y concentrados que al mezclar con agua o cualquier líquido, dé como resultado una bebida azucarada.
Se viene debatiendo en el Congreso un proyecto de Ley que, tiene por objeto contribuir a la garantía del derecho a la salud de los habitantes del territorio nacional y promover el consumo informado sobre alimentos y bebidas que contengan endulzantes calóricos (tales como la sacarosa, la fructosa, la glucosa etc.), o azúcares libres que son los carbohidratos tipo monosacáridos y disacáridos naturalmente presentes en los alimentos o añadidos a estos por el fabricante, el cocinero o el consumidor, más azúcares presentes en la miel, los jarabes, los jugos de frutas y los concentrados de jugos de frutas.
El tema en cuestión, es de suma importancia, pues crece exponencialmente la población obesa en el mundo, y lo menos que podríamos pedir es que se nos informara en la etiqueta los componentes del producto que vamos a consumir, a fin de elegir aquellos que más convengan a nuestra dieta alimenticia.
Conocemos muchas personas que no se pueden resistir a la tentación de un postre, de una gaseosa o de un helado, sin sospechar siquiera las consecuencias que los consumos excesivos de estos alimentos pueden causar en el organismo. Actualmente, la población de insulino-dependientes en Colombia se estima en 4.5 millones, y en el mundo la cifra es de 382 millones por ello esta enfermedad es considerada la epidemia del siglo XXI.
Notas de cierre: *Comienza la administración de Mello Castro González y surge la pregunta del millón: ¿Por fin podremos los vallenatos y los turistas ver concluida la obra El Mirador del Ecce Homo, que inició la alcaldía de Ciro Pupo Castro, y que quedó a medio hacer? ** La recién nombrada gerente nacional del Fondo Nacional del Ahorro, María Cristina Londoño Juan, intempestivamente suspendió todos los créditos educativos, privando de esa oportunidad a muchos estudiantes de bajos recursos económicos. Así es como el presidente Iván Duque fomenta el acceso de los colombianos a la educación superior.