La curva de criminalidad juvenil viene en ascenso en la ciudad de Valledupar, sólo durante los primeros cinco meses, el Centro de Recepción y Observación al Menor Infractor (Cromi) ha recibido 318 jóvenes infractores, mientras que en el año 2011 se registraron 285 casos durante todo el año.

La coordinadora del Cromi, Patricia Quintero dijo que existe una estrecha relación entre el consumo de sustancias psicoactivas y la delincuencia juvenil y que el 98% de los menores que llegan a la institución son consumidores de droga. Estas conclusiones fueron arrojadas luego de un estudio realizado por el equipo interdisciplinario del Cromi.
Ante esta situación, las estrategias de atención y resocialización también se dirigen a las familias de los jóvenes infractores, teniendo cuenta que muchas veces los problemas con la droga son producto de problemas estructurales al interior de las familias. En tal sentido, el equipo de la institución viene realizando visitas domiciliarias para compartir con sus familias y para que tengan conocimiento del recurso humano con que se cuenta para estos casos está conformado por trabajadoras sociales, psicólogos, educadores y guías espirituales, entre otros.
La directora del Cromi aseguró que existen 30 casos de experiencias exitosas con esta nueva estrategia que vienen implementando. Así mismo, dijo que se está montando una escuela para padres y se les brinda toda la atención clínica y mental a los jóvenes. “La estrategia apunta ante todo a la salud mental de los menores y las familias para tratar de reconstruir el tejido social”, dijo la funcionaria.
También se apunta a la formación de familias empresariales para que aprendan alguna actividad productiva y ocupen el tiempo libre.