Por: Julio Oñate Martínez Un movimiento liderado por nuestro lúcido diputado, Hilario Añez Martínez, en torno a darle mayor estatus cultural al vallenato ha fructificado en la ordenanza número 0000026, que desde el 27 de abril de 2011 fue aprobada por la Honorable Asamblea del Departamento del Cesar, cuyo texto es el siguiente: “Por la […]
Por: Julio Oñate Martínez
Un movimiento liderado por nuestro lúcido diputado, Hilario Añez Martínez, en torno a darle mayor estatus cultural al vallenato ha fructificado en la ordenanza número 0000026, que desde el 27 de abril de 2011 fue aprobada por la Honorable Asamblea del Departamento del Cesar, cuyo texto es el siguiente: “Por la cual se crea la catedra vallenata y se autoriza al señor gobernador para implementarla a nivel de la enseñanza básica primaria y secundaria en las instituciones educativas del departamento del Cesar y se dictan otras disposiciones”.
En uso de sus facultades legales y constitucionales la Asamblea Departamental en concordancia con la Ley 115 de 1994 de nuestra constitución considera:
a) Que la Constitución Política de Colombia en su artículo 8° consagra que es obligación del Estado y de las personas proteger las riquezas culturales… de la Nación.
b) Que la Ley 115 de 1994 – Ley General de Educación – en lo pertinente a los fines de la Educación establece en sus artículo 5° numerales 6 y 7:
“El estudio y la comprensión critica de la cultura nacional y de la diversidad étnica y cultural del país, como fundamento de la unidad nacional y de su identidad”.
“El acceso al conocimiento, la ciencia, la técnica y demás bienes y valores de la cultura, el fomento de la investigación y el estímulo a la creación artística en sus diferentes manifestaciones”.
En este orden de ideas, la Cátedra Vallenata debe institucionalizarse a través de la Secretaría de Educación Departamental para ser entonces incluida en el pensum oficial y tratar de ir creando una conciencia teórica del vallenato en sus aspectos históricos, cultural, social, político, económico y literario con el fin de darle a la gente que tenga un conocimiento empírico, un conocimiento ordenado. Por otra parte, podría brindársele a las personas que vengan de otras latitudes un conocimiento organizado aprovechando para esto todos los estudios que sobre nuestro folclor se han realizado hasta el presente.
Con la proyección que lleva nuestra música hacía los confines del mundo, lo ideal sería que los nativos del Valle pudieran ilustrar de forma clara y precisa a los que viene de afuera respecto a la historia, los ritmos tradiciones y sus diferencias con lo contemporáneo como también la historia de las canciones y sus principales representantes dejando claro cuales son las fortalezas y riesgos de este género musical. En este sentido seria vital conectarse con la Universidad Popular del Cesar, donde hay un grupo de investigadores orientados por el escritor Jaime Maestre Aponte que desde hace ya algún tiempo trabajan muy seriamente sobre la cultura vallenata y que quizás serían ellos los encargados de dirigir y seleccionar las personas que podrían vincularse a la cátedra que como una asignatura se implementaría tanto en la primaria como en la secundaria.
El artículo segundo de la mencionada ordenanza de la Honorable Asamblea Departamental del Cesar claramente ordena:
Artículo segundo: Autorícese al Gobernador del Departamental Cesar por un término de noventa (90) días para crear un grupo interdisciplinario con dominio en los saberes de historia regional y de música vallenata, para diseñar el programa e institucionalizarlo en todos los centros educativos del departamento. Asimismo, para disponer de los recursos económicos que sean necesarios para este propósito, de conformidad con las disposiciones de orden legal pertinentes, en armonía con el respectivo componente del Plan de Desarrollo Departamental 2008 – 2011.
Este proceso ha llegado a feliz término y tan sólo falta que la Secretaria de Educación Departamental le de aplicabilidad a la cátedra vallenata que tantos beneficios nos traerá gracias a la noble gestión del diputado cesarense Hilario Añez Martínez.
Por: Julio Oñate Martínez Un movimiento liderado por nuestro lúcido diputado, Hilario Añez Martínez, en torno a darle mayor estatus cultural al vallenato ha fructificado en la ordenanza número 0000026, que desde el 27 de abril de 2011 fue aprobada por la Honorable Asamblea del Departamento del Cesar, cuyo texto es el siguiente: “Por la […]
Por: Julio Oñate Martínez
Un movimiento liderado por nuestro lúcido diputado, Hilario Añez Martínez, en torno a darle mayor estatus cultural al vallenato ha fructificado en la ordenanza número 0000026, que desde el 27 de abril de 2011 fue aprobada por la Honorable Asamblea del Departamento del Cesar, cuyo texto es el siguiente: “Por la cual se crea la catedra vallenata y se autoriza al señor gobernador para implementarla a nivel de la enseñanza básica primaria y secundaria en las instituciones educativas del departamento del Cesar y se dictan otras disposiciones”.
En uso de sus facultades legales y constitucionales la Asamblea Departamental en concordancia con la Ley 115 de 1994 de nuestra constitución considera:
a) Que la Constitución Política de Colombia en su artículo 8° consagra que es obligación del Estado y de las personas proteger las riquezas culturales… de la Nación.
b) Que la Ley 115 de 1994 – Ley General de Educación – en lo pertinente a los fines de la Educación establece en sus artículo 5° numerales 6 y 7:
“El estudio y la comprensión critica de la cultura nacional y de la diversidad étnica y cultural del país, como fundamento de la unidad nacional y de su identidad”.
“El acceso al conocimiento, la ciencia, la técnica y demás bienes y valores de la cultura, el fomento de la investigación y el estímulo a la creación artística en sus diferentes manifestaciones”.
En este orden de ideas, la Cátedra Vallenata debe institucionalizarse a través de la Secretaría de Educación Departamental para ser entonces incluida en el pensum oficial y tratar de ir creando una conciencia teórica del vallenato en sus aspectos históricos, cultural, social, político, económico y literario con el fin de darle a la gente que tenga un conocimiento empírico, un conocimiento ordenado. Por otra parte, podría brindársele a las personas que vengan de otras latitudes un conocimiento organizado aprovechando para esto todos los estudios que sobre nuestro folclor se han realizado hasta el presente.
Con la proyección que lleva nuestra música hacía los confines del mundo, lo ideal sería que los nativos del Valle pudieran ilustrar de forma clara y precisa a los que viene de afuera respecto a la historia, los ritmos tradiciones y sus diferencias con lo contemporáneo como también la historia de las canciones y sus principales representantes dejando claro cuales son las fortalezas y riesgos de este género musical. En este sentido seria vital conectarse con la Universidad Popular del Cesar, donde hay un grupo de investigadores orientados por el escritor Jaime Maestre Aponte que desde hace ya algún tiempo trabajan muy seriamente sobre la cultura vallenata y que quizás serían ellos los encargados de dirigir y seleccionar las personas que podrían vincularse a la cátedra que como una asignatura se implementaría tanto en la primaria como en la secundaria.
El artículo segundo de la mencionada ordenanza de la Honorable Asamblea Departamental del Cesar claramente ordena:
Artículo segundo: Autorícese al Gobernador del Departamental Cesar por un término de noventa (90) días para crear un grupo interdisciplinario con dominio en los saberes de historia regional y de música vallenata, para diseñar el programa e institucionalizarlo en todos los centros educativos del departamento. Asimismo, para disponer de los recursos económicos que sean necesarios para este propósito, de conformidad con las disposiciones de orden legal pertinentes, en armonía con el respectivo componente del Plan de Desarrollo Departamental 2008 – 2011.
Este proceso ha llegado a feliz término y tan sólo falta que la Secretaria de Educación Departamental le de aplicabilidad a la cátedra vallenata que tantos beneficios nos traerá gracias a la noble gestión del diputado cesarense Hilario Añez Martínez.