El Juzgado Séptimo Penal del Circuito de Valledupar emitió un fallo condenatorio contra Camilo Andrés Padilla Sarabia, de 23 años, tras ser encontrado responsable del homicidio de Carlos Daniel Vega Lobo, un estudiante de noveno semestre de derecho de la Universidad del Área Andina.

El crimen, ocurrido el 9 de noviembre del año 2022, conmocionó a la comunidad de Valledupar, especialmente a los residentes del barrio Primero de Mayo, donde residía la víctima fatal.

Según las investigaciones, Vega Lobo desapareció luego de aceptar realizar un servicio de transporte en su vehículo, un automóvil con placas GJP-281, desde Valledupar hasta San Diego, Cesar. El servicio lo habría realizado mediante la aplicación InDriver, donde el joven solía laborar.

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La Fiscalía detalló en medio de la audiencia que Padilla tenía la intención de solicitar dicho servicio para encontrarse con Carlos Daniel Vega y así robarle el vehículo y sus pertenencias.

Cabe recordar que se conoció durante la investigación que estas personas se trasladaron hasta el corregimiento de Media Luna, jurisdicción de San Diego. Padilla dejó el automóvil en un lugar específico y obligó a Vega Lobo a subir a una motocicleta que había solicitado prestada a un familiar. Posteriormente, lo llevó hasta un área boscosa cercana a la finca El Consuelo, donde lo asesinó de un disparo con arma de fuego en la espalda.

Posteriormente, el agresor golpeó brutalmente al fallecido con un objeto contundente, causándole graves lesiones en el cráneo, y procedió a despojarlo de sus pertenencias, incluyendo un iPhone 8, un celular Motorola, unos zapatos deportivos, un estuche de gafas y un morral.

Durante la audiencia, la juez destacó la gravedad del crimen y la premeditación que tuvo Padilla Sarabia para llevar a cabo el asesinato. Asimismo, se reveló que el acusado intentó sobornar a un testigo ofreciéndole dinero para ayudarlo a deshacerse del cuerpo de la víctima fatal.

A Padilla Sarabia se le imputaron los delitos de porte ilegal de armas de fuego, homicidio agravado y hurto calificado y agravado. Sin embargo, nunca aceptó su responsabilidad en los hechos.

Cabe mencionar que el cadáver fue encontrado el 11 de noviembre en horas de la tarde por parte de un jornalero que circulaba por la zona ubicada a unos 15 minutos de Media Luna.