• Las prioridades, en su orden, para el uso de los ríos según la Ley Ambiental son: Humano, ganadería y cultivo. En esta última actividad deben tener en cuenta la época de lluvias para irrigarlos y frenarse en verano, reglas que en la actualidad no se están cumpliendo en un cien por ciento.
• Más de mil concesionarios o captadores de agua de los ríos del Cesar, es la cifra estimada de los usuarios que tienen derecho para aprovechar los afluentes hídricos.

Un enérgico llamado de atención realizó el Ejército Nacional a la Corporación Autónoma del Cesar, Corpocesar, para que controle con mayor eficacia los cauces de los ríos, especialmente en época de verano.

“En la mayoría de afluentes hídricos se percibe disminución del caudal ante la desviación abrupta a diferentes cultivos, afectando la pesca, flora y fauna de diferentes poblaciones, lo que es más notorio en estos meses donde la lluvia es escasa. El llamado es para que la autoridad ambiental tome las medidas necesarias para evitar esta situación”, argumentó el coronel del Batallón de Ingenieros de la región, Diego Pastrana.

Entre los puntos cuestionados están los ríos Badillo, Ariguaní y Guatapurí, donde existen concesiones que de acuerdo a Pastrana no cumplen los requerimientos del Ministerio de Ambiente, por lo que hace un llamado a no permitir estas prácticas que pueden desencadenar consecuencias irreversibles al departamento.

“Estamos tomando cartas en el asunto”: Corpocesar

Al respecto, el director general de Corpocesar, KalebVillalobos Brochel,enfatizó que esta problemática se presentadesde hace más de 20 años, que es su primera temporada seca como jefe de la entidad ambiental y que ya ejercen acciones para contrarrestarla.

Modificar la resolución en la que sancionan a los agricultores para que estos se sientan realmente afectados en sus finanzas, realizar campañas de concientización y visitas técnicas a las acequias y canales utilizados por arroceros, palmicultores, entre otros productores agropecuarios para verificar la situación, son algunas de las medidas tomadas por el ente ambiental.

Según Villalobos Brochel,convocarán a los agricultores a cumplir con obras de captación, donde existan medidores que determinen con exactitud cuánta agua están tomando de los ríos.

DATO

La sanción económica de los agricultores que desvían de manera desproporcional el cauce del río es de 500 mil pesos por hectárea. Esta suma se pretende aumentar por Corpocesar a través de la modificación de la resolución que lo establece.