Un policía y dos civiles resultaron con varios días de incapacidad luego del enfrentamiento generado por la inmovilización de una motocicleta ante la restricción del sábado sin parrillero.
A las 3:15 de la tarde del sábado, en la calle 14 con carrera 12A de Valledupar, una patrulla de la Policía transitaba por el sector y se percató de la presencia de dos jóvenes que se desplazaban en una motocicleta, por lo que procedió a la inmovilización teniendo en cuenta la restricción impuesta por la Alcaldía que prohíbe la circulación de motos con parrillero los días sábados.
El conductor de la motocicleta era Yeider Camelo Rodríguez, de 28 años, habitante del sector, quien llevaba como pasajero a un primo. Los motorizados se rehusaron a la inmovilización argumentando que ya se encontraban frente a su casa. Fue entonces cuando se inició una discusión y forcejeo entre los ciudadanos con la autoridad, que desencadenó una trifurca.
“Mi sobrino se escondió en la casa y cerró la reja, entonces lo policías con armas en mano me intimidaron para que les abriera pero yo les dije que no tenía las llaves”, denunció Crispín Eduardo Rodríguez.
Los ánimos se caldearon tanto que varios vecinos del sector intervinieron para evitar el procedimiento policial y de igual forma llegaron refuerzos de la Fuerza Pública generándose una batalla campal, que dejó golpeados de parte y parte.
De las personas involucradas en el incidente, el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses practicó valoraciones a por lo menos a tres.
El primero fue subteniente de la Policía, Edwin Fernando Arévalo Torres, a quien los peritos le dieron 12 días de incapacidad debido a la paliza que le propinaron habitantes del barrio Obrero que intentaron evitar la inmovilización de la moto de uno de sus vecinos.
“El proceso policial se interrumpe en el momento que se notifica la inmovilización de la motocicleta e intentan guardarla en una residencia. En el momento que no se les permite ellos arremeten contra mí y uno me golpea por la retaguardia”, explicó el oficial.
De igual forma Yeider Camelo Rodríguez y William Sanguino Loaiza, recibieron ocho días de incapacidad. Ellos fueron capturados y denunciaron que hubo abuso de autoridad por parte de los policías que los golpearon.
“Yo iba pasando y me acerqué a ver qué pasaba, solo llegué a preguntar por qué se iban a llevar la moto y cuando tratamos de evitar que la agarraran uno de los policías me golpeó con el bolillo”, relató Sanguino Loaiza, ayer en la audiencia de legalización de captura que le solicitó la Fiscalía como presunto responsable del delito de violencia contra servidor público.
“Había muchos policías, se llevaron la moto y luego regresaron nuevamente a agredirnos. No entiendo por qué se devuelven a agredir a las personas si ya se habían llevado la moto”, agregó Camelo Rodríguez.
De victimario a víctimas
Yeider Camelo Rodríguez y William Sanguino Loaiza permanecieron detenidos desde la tarde del sábado hasta la mañana de ayer, en las instalaciones de la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía, pero finalmente fueron dejados en libertad luego de que un juez de control de garantías decretara la ilegalidad de la captura.
El togado estableció la ilegalidad de la aprehensión, por las lesiones que sufrieron los jóvenes sindicados del delito de violencia contra servidor público.
“Hubo irregularidad en la captura, porque al reducir a una persona y ponerle las esposas no se le ocasionan ocho días de incapacidad”, indicó el juez.
Por último reconoció la labor de las autoridades por garantizar la seguridad teniendo que la mayoría de los atracos son cometidos en motos, pero aclaró que en primer lugar su deber es garantizar los derechos humanos.
Un policía y dos civiles resultaron con varios días de incapacidad luego del enfrentamiento generado por la inmovilización de una motocicleta ante la restricción del sábado sin parrillero.
A las 3:15 de la tarde del sábado, en la calle 14 con carrera 12A de Valledupar, una patrulla de la Policía transitaba por el sector y se percató de la presencia de dos jóvenes que se desplazaban en una motocicleta, por lo que procedió a la inmovilización teniendo en cuenta la restricción impuesta por la Alcaldía que prohíbe la circulación de motos con parrillero los días sábados.
El conductor de la motocicleta era Yeider Camelo Rodríguez, de 28 años, habitante del sector, quien llevaba como pasajero a un primo. Los motorizados se rehusaron a la inmovilización argumentando que ya se encontraban frente a su casa. Fue entonces cuando se inició una discusión y forcejeo entre los ciudadanos con la autoridad, que desencadenó una trifurca.
“Mi sobrino se escondió en la casa y cerró la reja, entonces lo policías con armas en mano me intimidaron para que les abriera pero yo les dije que no tenía las llaves”, denunció Crispín Eduardo Rodríguez.
Los ánimos se caldearon tanto que varios vecinos del sector intervinieron para evitar el procedimiento policial y de igual forma llegaron refuerzos de la Fuerza Pública generándose una batalla campal, que dejó golpeados de parte y parte.
De las personas involucradas en el incidente, el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses practicó valoraciones a por lo menos a tres.
El primero fue subteniente de la Policía, Edwin Fernando Arévalo Torres, a quien los peritos le dieron 12 días de incapacidad debido a la paliza que le propinaron habitantes del barrio Obrero que intentaron evitar la inmovilización de la moto de uno de sus vecinos.
“El proceso policial se interrumpe en el momento que se notifica la inmovilización de la motocicleta e intentan guardarla en una residencia. En el momento que no se les permite ellos arremeten contra mí y uno me golpea por la retaguardia”, explicó el oficial.
De igual forma Yeider Camelo Rodríguez y William Sanguino Loaiza, recibieron ocho días de incapacidad. Ellos fueron capturados y denunciaron que hubo abuso de autoridad por parte de los policías que los golpearon.
“Yo iba pasando y me acerqué a ver qué pasaba, solo llegué a preguntar por qué se iban a llevar la moto y cuando tratamos de evitar que la agarraran uno de los policías me golpeó con el bolillo”, relató Sanguino Loaiza, ayer en la audiencia de legalización de captura que le solicitó la Fiscalía como presunto responsable del delito de violencia contra servidor público.
“Había muchos policías, se llevaron la moto y luego regresaron nuevamente a agredirnos. No entiendo por qué se devuelven a agredir a las personas si ya se habían llevado la moto”, agregó Camelo Rodríguez.
De victimario a víctimas
Yeider Camelo Rodríguez y William Sanguino Loaiza permanecieron detenidos desde la tarde del sábado hasta la mañana de ayer, en las instalaciones de la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía, pero finalmente fueron dejados en libertad luego de que un juez de control de garantías decretara la ilegalidad de la captura.
El togado estableció la ilegalidad de la aprehensión, por las lesiones que sufrieron los jóvenes sindicados del delito de violencia contra servidor público.
“Hubo irregularidad en la captura, porque al reducir a una persona y ponerle las esposas no se le ocasionan ocho días de incapacidad”, indicó el juez.
Por último reconoció la labor de las autoridades por garantizar la seguridad teniendo que la mayoría de los atracos son cometidos en motos, pero aclaró que en primer lugar su deber es garantizar los derechos humanos.