En el Cesar y mucho menos en Valledupar los partidos políticos no están en ninguna competencia democrática. Lo que pasa aquí, como seguramente pasa en el resto del país, es la competencia entre familias: La Casa Cielo y la Casa Araujo. Hay una tercera candidata, Imelda Daza Cotes, a la que muchos afirman que no […]
En el Cesar y mucho menos en Valledupar los partidos políticos no están en ninguna competencia democrática. Lo que pasa aquí, como seguramente pasa en el resto del país, es la competencia entre familias: La Casa Cielo y la Casa Araujo.
Hay una tercera candidata, Imelda Daza Cotes, a la que muchos afirman que no le temen porque no tiene cómo ($$$$) llegar al primer cargo departamental.
Se afirma que desde Bogotá los directorios nacionales ordenan a sus candidatos en el Cesar unirse hasta con el mismísimo diablo para conseguir el poder o no dejárselo arrebatar, así haya que concurrir a la trashumancia, al constreñimiento, a cualquier delito electoral.
En el escenario político del Cesar está vigente para la Gobernación, Franco Ovalle Angarita, hijo del expresidente de la Cámara y exgobernador fallecido Adalberto Ovalle Muñoz; exdiputado de quien se afirma que fue el mismísimo Vicepresidente German Vargas quien lo ungió como candidato a la Gobernación y quien le puso zancadilla a los candidatos que llevó la Casa Cielo.
Por eso es que Franco se atrevió a decir en Codazzi que era candidato de quien tenía la chequera, aunque ahora dice que el audio lo alteraron. Con él están casi todos los partidos políticos y se afirma que la “Casa Cielo” le tocó a regañadientes resignarse y acoger a Franco y ponerle a su disposición toda la maquinaria del gobierno departamental.
Mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan también dicen que a Arturo Calderón, quien es candidato por el Partido Liberal, lo avaló el Centro Democrático y lo impulsa la Casa Araujo que en el pasado tuvo prácticamente todo el poder político y burocrático en el Cesar.
Arturo fue Secretario “estrella” del gobierno de Hernando Molina Araujo y esta es la tercera vez que es candidato por un Partido diferente. Se afirma en Valledupar que a pesar de que su mentor político, su familiar Benjamín Calderón, no lo respalda, superó en votos la primera candidatura. Esta vez tampoco tiene el apoyo del “zar del chance” en el Departamento.
Lo que si se afirma en los cuatro puntos cardinales del Cesar es que tiene el apoyo total del alcalde Freddy Socarras Reales, por eso es respaldado por el patriarca político Álvaro Araujo Noguera, de quien se afirma que es el que quien quita y pone en la Alcaldía. Lo extraño para los vallenatos es que dejó de respaldar a su propio hijo Sergio Araujo a la Alcaldía para respaldar a su sobrino Jaime Mejía.
Así las cosas, Tío Chiro y Tío Nan aseguran que Arturo esta vez tampoco la tiene fácil y Franco, a pesar de esa maquinaria arrolladora, la tiene difícil.
Mientras tanto, está al acecho Imelda Daza Cotes, candidata a la Gobernación y aunque le reconocen sus capacidades intelectuales, morales y éticas, está a la espera que los cesarenses le digan “ya basta más de lo mismo, no más Arturo Franco Ovalle Calderón”.
Mientras ocurre el rifirrafe entre los candidatos Arturo y Franco, muchos dicen que puede pasar lo que pasó hace ocho años con Cristian Moreno y esta vez la gobernadora sea –por primera vez una mujer- Imelda Daza, quien es defensora de Derechos Humanos y fue avalada por el Partido Verde, recibió el apoyo del Polo Democrático y de lo que quedó de la Unión Patriótica. Hasta la próxima semana.
En el Cesar y mucho menos en Valledupar los partidos políticos no están en ninguna competencia democrática. Lo que pasa aquí, como seguramente pasa en el resto del país, es la competencia entre familias: La Casa Cielo y la Casa Araujo. Hay una tercera candidata, Imelda Daza Cotes, a la que muchos afirman que no […]
En el Cesar y mucho menos en Valledupar los partidos políticos no están en ninguna competencia democrática. Lo que pasa aquí, como seguramente pasa en el resto del país, es la competencia entre familias: La Casa Cielo y la Casa Araujo.
Hay una tercera candidata, Imelda Daza Cotes, a la que muchos afirman que no le temen porque no tiene cómo ($$$$) llegar al primer cargo departamental.
Se afirma que desde Bogotá los directorios nacionales ordenan a sus candidatos en el Cesar unirse hasta con el mismísimo diablo para conseguir el poder o no dejárselo arrebatar, así haya que concurrir a la trashumancia, al constreñimiento, a cualquier delito electoral.
En el escenario político del Cesar está vigente para la Gobernación, Franco Ovalle Angarita, hijo del expresidente de la Cámara y exgobernador fallecido Adalberto Ovalle Muñoz; exdiputado de quien se afirma que fue el mismísimo Vicepresidente German Vargas quien lo ungió como candidato a la Gobernación y quien le puso zancadilla a los candidatos que llevó la Casa Cielo.
Por eso es que Franco se atrevió a decir en Codazzi que era candidato de quien tenía la chequera, aunque ahora dice que el audio lo alteraron. Con él están casi todos los partidos políticos y se afirma que la “Casa Cielo” le tocó a regañadientes resignarse y acoger a Franco y ponerle a su disposición toda la maquinaria del gobierno departamental.
Mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan también dicen que a Arturo Calderón, quien es candidato por el Partido Liberal, lo avaló el Centro Democrático y lo impulsa la Casa Araujo que en el pasado tuvo prácticamente todo el poder político y burocrático en el Cesar.
Arturo fue Secretario “estrella” del gobierno de Hernando Molina Araujo y esta es la tercera vez que es candidato por un Partido diferente. Se afirma en Valledupar que a pesar de que su mentor político, su familiar Benjamín Calderón, no lo respalda, superó en votos la primera candidatura. Esta vez tampoco tiene el apoyo del “zar del chance” en el Departamento.
Lo que si se afirma en los cuatro puntos cardinales del Cesar es que tiene el apoyo total del alcalde Freddy Socarras Reales, por eso es respaldado por el patriarca político Álvaro Araujo Noguera, de quien se afirma que es el que quien quita y pone en la Alcaldía. Lo extraño para los vallenatos es que dejó de respaldar a su propio hijo Sergio Araujo a la Alcaldía para respaldar a su sobrino Jaime Mejía.
Así las cosas, Tío Chiro y Tío Nan aseguran que Arturo esta vez tampoco la tiene fácil y Franco, a pesar de esa maquinaria arrolladora, la tiene difícil.
Mientras tanto, está al acecho Imelda Daza Cotes, candidata a la Gobernación y aunque le reconocen sus capacidades intelectuales, morales y éticas, está a la espera que los cesarenses le digan “ya basta más de lo mismo, no más Arturo Franco Ovalle Calderón”.
Mientras ocurre el rifirrafe entre los candidatos Arturo y Franco, muchos dicen que puede pasar lo que pasó hace ocho años con Cristian Moreno y esta vez la gobernadora sea –por primera vez una mujer- Imelda Daza, quien es defensora de Derechos Humanos y fue avalada por el Partido Verde, recibió el apoyo del Polo Democrático y de lo que quedó de la Unión Patriótica. Hasta la próxima semana.