Como William Martínez López fue identificado el sujeto herido con dos disparos en el sector del Pescaíto, al oriente de Valledupar, y que permanece con delicado estado de salud en la unidad de cuidados intensivos de la clínica Médicos S.A.

La baleado de 46 años de edad se debate entre la vida y la muerte debido a la complejidad de las lesiones que sufrió en la cabeza, según manifestaron sus familiares que ayer estaban en las afueras del centro asistencial.
Un primo del herido, quien se abstuvo de revelar su identidad por temor, manifestó que William Martínez trabaja como vendedor ambulante, es oriundo de Plato, Magdalena, y reside en el barrio Santo Domingo, en el centro de Valledupar.

Dijo además que la mañana del domingo, William Martínez se encontraba en una esquina del barrio Pescaíto, donde lo abordaron dos hombres.

“Ellos le dijeron, que hubo vamos, él les respondió: Si me van a matar, mátenme acá”, contó el familiar del comerciante que salvó de morir desangrando de no ser por un taxista que lo recogió en la calle y trasladó a la clínica.

Agregó luego de conocer la noticia en los medios de comunicación acudió a la clínica para identificar a su primo, quien permanecía como NN.

Las autoridades investigan si el caso estaría relacionado con ajustes de cuentas.
“A las 12 de la noche (lunes) se presenta la denuncia en la clínica Médicos, sobre una persona que presenta dos impactos de armas de fuego. Este hombre es de aproximadamente 45 años y tiene estas heridas en su cabeza. Es trasladado en un vehículo tipo taxi a este centro asistencial, el señor taxista después de que informa a la Policía Nacional se le toma una declaración y el agrega que llega hasta él, en el sector del Pescaíto donde una mujer con un arma blanca en la mano, acompañada de otros sujetos, suben a esta persona herida y le indican que la lleven a un centro asistencial y luego desaparecen”, informó el coronel Mauricio Bonilla, comandante operativo de la Policía en el Cesar.

La Policía indicó que se desconocen las identidades de las personas que subieron al taxi a William Martínez y el tipo de relación que el baleado tenía con los desconocidos.

Redacción Judicial / EL PILÓN