Por: Silvia Betancourt Alliegro  @yastao

¿Cómo podría haber imaginado Alí Primera www.youtube.com/watch?v=pPSFHivmcog que un soldado del ejército venezolano que lo persiguió para matarlo, cantaría a capela sus canciones?

Hugo Rafael Chávez Frías asombra al mundo por varias razones de peso, quizá él mismo –cuando muta en verbo irrefrenable- se sorprende de sus expresiones hiladas sobre la marcha de los discursos, desde su memoria que acumuló miles de canciones que son parte del acervo suramericano y que ha usado en el momento perfecto.

Los intereses comerciales de los Estados Unidos de América fueron eliminados del territorio venezolano ¡sin derramamiento de sangre! por este  hombre que se empecinó en ser el interventor de los programas soñados por el Libertador; e irrumpió en otros países exportando, canjeando, obsequiando lo que le sobra a Venezuela: petróleo -extraordinario señuelo que seduce al mundo mecanizado- que se mueve por el combustible, ganando socios para la defensa de su ideario.

Su destino metafísico de Ser extraordinario, como su Bolívar, ha sido sometido a estudio por intelectuales de todas las vertientes; algunos para proyectarlo como preclara figura  de la Historia Universal, otros, para clasificarlo como orate. La Historia es como un texto religioso, donde las puntuaciones determinan el significado de versículos o capítulos enteros, pero la importancia de unas u otras, es indeterminable y profundamente escondida.

En determinado momento de espacio ­–tiempo –que es desde donde escribimos- El Conocido, que es tal o cual hombre, realizará libremente un acto necesario; armonía incomprensible entre el libre albedrío y la revelación; las inteligencias más luminosas no han podido ir más allá de este límite.

Cuando el soldado Hugo Chávez aseguró (en muchas ocasiones) que era la reencarnación de Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar y Palacios, los ‘comunes’ rieron por todos los medios a su disposición, ridiculizándole; más, hay algo en lo que ahora debemos entrar a estudiar a profundidad: El Hombre Integral, que, según el Verbo Creador; es más una semejanza que una imagen, renovable en mil millones de almas de cada generación, fuerza es, pues, que sea siempre tal, haga lo que haga y preparar así, poco a poco, en el crepúsculo de la Historia un acontecimiento inimaginable.

Ejemplos los hay, sin duda, buenos y malos: Caín y Judas en la Historia bíblica. Mas, unos y otros hacen exactamente lo que está previsto y no pueden hacer otra cosa: Hitler. No nacen ni subsisten sino para imponer el Texto Misterioso, multiplicando al infinito las figuras y los caracteres simbólicos.

Hugo Rafael Chávez Frías es el más visible actualmente, es la más elevada figura simbólica suramericana, que solo la muerte podrá someter, como a todos los antecesores. Lástima que tanto ardor será subordinado porque Las Jerarquías jamás serán vencidas, son parte del Orden Universal ¡Así la masa se una!