El Hospital local de Tamalameque atraviesa la peor crisis de su historia. De acuerdo a los informes financieros de la entidad, la ESE posee un déficit financiero aproximado de 6 mil millones de pesos, en los términos de esta alta cartera morosa la sostenibilidad es prácticamente imposible, por cuanto las deudas y funcionamiento implican más […]
El Hospital local de Tamalameque atraviesa la peor crisis de su historia. De acuerdo a los informes financieros de la entidad, la ESE posee un déficit financiero aproximado de 6 mil millones de pesos, en los términos de esta alta cartera morosa la sostenibilidad es prácticamente imposible, por cuanto las deudas y funcionamiento implican más recursos que los ingresos que percibe.
A pesar que la entidad ya fue sometida a un proceso de reestructuración para lograr su viabilidad financiera, las decisiones y medidas tomadas en su momento no cumplieron sus objetivos, por el contrario, debido a malas administraciones y al desgreño administrativo agravaron la crisis, dejando el ente en estado moribundo, por eso se hizo necesario la elaboración de un Plan de Saneamiento Fiscal que pretende devolverle la viabilidad financiera y garantizar su funcionamiento.
Para que este Plan de Saneamiento sea exitoso deben converger muchos factores que implican estrategias, decisiones y acciones tanto de la Empresa Social del Estado en el fortalecimiento de los ingresos y disminución del gasto, como de los entes territoriales municipal, departamental y hasta nacional, que deben realizar un esfuerzo económico para inyectarle recursos que permitan estructurar y hacer posible el Plan de Saneamiento.
En la actualidad, la entidad está en mora de realizar las acciones correspondientes para iniciar su salvamente financiero, pero la mayor incertidumbre y desesperanza para el saneamiento fiscal del hospital se encuentra con las entidades territoriales, toda vez que no realizan el esfuerzo financiero necesario que permita cubrir la cartera morosa de la entidad, que oscila entre los 5 a 6 mil millones de pesos.
El municipio, consciente de su compromiso y responsabilidad con la salud de sus habitantes, a pesar de atravesar una crisis financiera y estar en curso de la Ley 550, realiza un esfuerzo y aporta 400 millones de su presupuesto para apoyar el saneamiento de la ESE, infortunadamente la Gobernación del Cesar solo asigna 200 millones, los cuales para nuestro juicio es un aporte irrisorio por parte del ente departamental, y la nación se hace la de la vista gorda y hasta el momento no anuncia o asigna ningún aporte.
Ante esta situación, el panorama para el saneamiento fiscal del Hospital Tamalameque es desalentador e imposible, por lo que se avizora una inminente liquidación de la ESE, trayendo como consecuencia un atentado y violación al derecho constitucional a la salud que tenemos los tamalamequeros.
Es por esto que lanzamos un llamado de SOS al gobierno departamental y nacional para que de manera urgente y responsable realicen una bolsa común, que signifique un aporte financiero considerable que garantice el salvamento de la Empresa Social del Estado y permita a los tamalamequeros gozar de un excelente, idóneo, eficiente y eficaz servicio de salud, solo así podremos construir un ‘Futuro para Todos’ y demostrar que lo ‘Haremos Mejor’.
De lo contario, estamos condenando al Hospital, en estos tiempos de dificultad, a su muerte, por la falta de voluntad política de un gobierno que no prioriza los recursos en garantizar servicios esenciales y de vital importancia como la salud, más en estos momentos de pandemia y crisis de salud mundial, sino que designa al municipio esta responsabilidad sin importar su déficit de ingresos y fuente de recursos, obligándolo a realizar un esfuerzo comprometiendo vigencias futuras, el poco recurso de regalías y del SGP para tratar de salvar su ESE, coartándole así en un futuro la posibilidad de inversión en obras de impacto social que permitan el progreso, desarrollo y bienestar de su gente.
P.D. La Gobernación del Cesar, en el primer mandato de Luis Alberto Monsalvo, invirtió grandes recursos en adecuación y remodelaciones locativas de la ESE, no permitamos que esos dineros se dilapiden por la liquidación del Hospital.
El Hospital local de Tamalameque atraviesa la peor crisis de su historia. De acuerdo a los informes financieros de la entidad, la ESE posee un déficit financiero aproximado de 6 mil millones de pesos, en los términos de esta alta cartera morosa la sostenibilidad es prácticamente imposible, por cuanto las deudas y funcionamiento implican más […]
El Hospital local de Tamalameque atraviesa la peor crisis de su historia. De acuerdo a los informes financieros de la entidad, la ESE posee un déficit financiero aproximado de 6 mil millones de pesos, en los términos de esta alta cartera morosa la sostenibilidad es prácticamente imposible, por cuanto las deudas y funcionamiento implican más recursos que los ingresos que percibe.
A pesar que la entidad ya fue sometida a un proceso de reestructuración para lograr su viabilidad financiera, las decisiones y medidas tomadas en su momento no cumplieron sus objetivos, por el contrario, debido a malas administraciones y al desgreño administrativo agravaron la crisis, dejando el ente en estado moribundo, por eso se hizo necesario la elaboración de un Plan de Saneamiento Fiscal que pretende devolverle la viabilidad financiera y garantizar su funcionamiento.
Para que este Plan de Saneamiento sea exitoso deben converger muchos factores que implican estrategias, decisiones y acciones tanto de la Empresa Social del Estado en el fortalecimiento de los ingresos y disminución del gasto, como de los entes territoriales municipal, departamental y hasta nacional, que deben realizar un esfuerzo económico para inyectarle recursos que permitan estructurar y hacer posible el Plan de Saneamiento.
En la actualidad, la entidad está en mora de realizar las acciones correspondientes para iniciar su salvamente financiero, pero la mayor incertidumbre y desesperanza para el saneamiento fiscal del hospital se encuentra con las entidades territoriales, toda vez que no realizan el esfuerzo financiero necesario que permita cubrir la cartera morosa de la entidad, que oscila entre los 5 a 6 mil millones de pesos.
El municipio, consciente de su compromiso y responsabilidad con la salud de sus habitantes, a pesar de atravesar una crisis financiera y estar en curso de la Ley 550, realiza un esfuerzo y aporta 400 millones de su presupuesto para apoyar el saneamiento de la ESE, infortunadamente la Gobernación del Cesar solo asigna 200 millones, los cuales para nuestro juicio es un aporte irrisorio por parte del ente departamental, y la nación se hace la de la vista gorda y hasta el momento no anuncia o asigna ningún aporte.
Ante esta situación, el panorama para el saneamiento fiscal del Hospital Tamalameque es desalentador e imposible, por lo que se avizora una inminente liquidación de la ESE, trayendo como consecuencia un atentado y violación al derecho constitucional a la salud que tenemos los tamalamequeros.
Es por esto que lanzamos un llamado de SOS al gobierno departamental y nacional para que de manera urgente y responsable realicen una bolsa común, que signifique un aporte financiero considerable que garantice el salvamento de la Empresa Social del Estado y permita a los tamalamequeros gozar de un excelente, idóneo, eficiente y eficaz servicio de salud, solo así podremos construir un ‘Futuro para Todos’ y demostrar que lo ‘Haremos Mejor’.
De lo contario, estamos condenando al Hospital, en estos tiempos de dificultad, a su muerte, por la falta de voluntad política de un gobierno que no prioriza los recursos en garantizar servicios esenciales y de vital importancia como la salud, más en estos momentos de pandemia y crisis de salud mundial, sino que designa al municipio esta responsabilidad sin importar su déficit de ingresos y fuente de recursos, obligándolo a realizar un esfuerzo comprometiendo vigencias futuras, el poco recurso de regalías y del SGP para tratar de salvar su ESE, coartándole así en un futuro la posibilidad de inversión en obras de impacto social que permitan el progreso, desarrollo y bienestar de su gente.
P.D. La Gobernación del Cesar, en el primer mandato de Luis Alberto Monsalvo, invirtió grandes recursos en adecuación y remodelaciones locativas de la ESE, no permitamos que esos dineros se dilapiden por la liquidación del Hospital.