La noche del sábado, el alcalde de Valledupar, Mello Castro, lamentó la muerte de Pedro Reyes, asesor de turismo de Montería que estaba de visita en Valledupar para correr la Media Maratón Valle de Upar.
Los delincuentes asesinaron al deportista y funcionario en el Centro Histórico de la ciudad, frente a la plaza Alfonso López, la tarde del sábado 5 de agosto para robarle prendas de valor.

Según indicaron las autoridades, el hecho ocurrió sobre las 3:52 p. m., cuando el turista visitaba almacenes de artesanías con la intención de comprar unos artículos, momentos en que fue abordado por unos sujetos en motocicleta para robarle una cadena de oro, recibiendo dos impactos de fuego: uno en la axila derecha y otro en el antebrazo derecho tras oponerse al hurto.

Pese a que fue auxiliado y trasladado a un centro asistencial de la ciudad, Pedro Reyes Arzuaga murió por la gravedad de las heridas en la Clínica de Alta Complejidad de la ciudad cuando era atendido por el cuerpo médico.

El asesinato representa un duro golpe para su familia, pues no lo recibirán con medallas como lo esperaban; pero también para la ciudad, que se conmocionó ante el asesinato, ocurrido en pleno corazón de la capital del Cesar.

En respuesta a este suceso, la Policía Nacional activó un plan candado y capturó a un hombre, quien sería el presunto responsable del homicidio del atleta y gestor de turismo. También anunció medidas para reforzar la presencia policial en el área y prevenir futuros incidentes.

No obstante, este homicidio representa una derrota porque se pierde una vida y porque queda demostrado que no hay garantías ni en el lugar más icónico de la ciudad: la plaza Alfonso López, a menos de 20 metros de la Alcaldía de Valledupar.