Los médicos del hospital hacen esfuerzos por salvarle la vida a este hombre que ingresó con un disparo en la cabeza. Las autoridades investigan las extrañas circunstancias en que un jornalero resultó con una herida de arma de fuego a la altura de la cabeza, en hechos ocurridos a las 5:00 de la tarde del […]
Las autoridades investigan las extrañas circunstancias en que un jornalero resultó con una herida de arma de fuego a la altura de la cabeza, en hechos ocurridos a las 5:00 de la tarde del lunes anterior en la finca Japón cerca al corregimiento de El Tropezón, jurisdicción del departamento de Norte de Santander, quien fue remitido hasta Valledupar para su atención.
El hombre de 24 años, fue identificado como Alejandro Ortiz Suárez, quien es atendido en el hospital `Rosario Pumarejo de López´ de Valledupar.
El médico del centro hospitalario, Freddy Molina, manifestó a EL PILÓN que el paciente presenta una herida por arma de fuego con orificio en el dorso nasal sin salida.
Al parecer, el proyectil se alojó al lado izquierdo de la cabeza. Dijo también el médico, que Ortiz Suárez será sometido a una delicada cirugía para extraerle el proyectil que además le causó una contusión hemorrágica.
Aunque están por confirmarse los móviles del hecho, se cree que la víctima estaba manipulando (limpiando) un arma y accidentalmente disparó propinándose la herida que lo mantiene en delicado estado de salud y sin recobrar el conocimiento.
De acuerdo con lo expresado por Luz María Suárez, madre del herido, no se sabe con claridad cómo sucedieron los hechos; también dijo la mujer que su hijo normalmente no porta arma y que tenía poco tiempo de laborar en la finca donde ocurrieron los hechos: “a mí sólo me dijeron que estaba herido, pero no me explicaron bien las cosas. En ese momento solo pensé en la vida de mi hijo”, sostuvo la mujer ante los confusos hechos que mantienen a su hijo bajo observación médica.
Los médicos del hospital hacen esfuerzos por salvarle la vida a este hombre que ingresó con un disparo en la cabeza. Las autoridades investigan las extrañas circunstancias en que un jornalero resultó con una herida de arma de fuego a la altura de la cabeza, en hechos ocurridos a las 5:00 de la tarde del […]
Las autoridades investigan las extrañas circunstancias en que un jornalero resultó con una herida de arma de fuego a la altura de la cabeza, en hechos ocurridos a las 5:00 de la tarde del lunes anterior en la finca Japón cerca al corregimiento de El Tropezón, jurisdicción del departamento de Norte de Santander, quien fue remitido hasta Valledupar para su atención.
El hombre de 24 años, fue identificado como Alejandro Ortiz Suárez, quien es atendido en el hospital `Rosario Pumarejo de López´ de Valledupar.
El médico del centro hospitalario, Freddy Molina, manifestó a EL PILÓN que el paciente presenta una herida por arma de fuego con orificio en el dorso nasal sin salida.
Al parecer, el proyectil se alojó al lado izquierdo de la cabeza. Dijo también el médico, que Ortiz Suárez será sometido a una delicada cirugía para extraerle el proyectil que además le causó una contusión hemorrágica.
Aunque están por confirmarse los móviles del hecho, se cree que la víctima estaba manipulando (limpiando) un arma y accidentalmente disparó propinándose la herida que lo mantiene en delicado estado de salud y sin recobrar el conocimiento.
De acuerdo con lo expresado por Luz María Suárez, madre del herido, no se sabe con claridad cómo sucedieron los hechos; también dijo la mujer que su hijo normalmente no porta arma y que tenía poco tiempo de laborar en la finca donde ocurrieron los hechos: “a mí sólo me dijeron que estaba herido, pero no me explicaron bien las cosas. En ese momento solo pensé en la vida de mi hijo”, sostuvo la mujer ante los confusos hechos que mantienen a su hijo bajo observación médica.