Ser una petición del entrenador e incluso haber alcanzado con él su máximo rendimiento no serán determinantes a la hora de abrirse un espacio en el once de lujo del Bayern Múnich. El mensaje del italiano para su nuevo refuerzo es claro y franco.

“Por supuesto que habrá competencia y habrá que descansar, pero es normal en un equipo tan grande. La competitividad es el combustible de un equipo, es energía y motivación. Para mí no es un problema. El tema es que los jugadores entiendan que la competencia ayuda a que cada uno sea mejor”, dijo el técnico.

Respecto de la posición en la que puede jugar James, el estratega no dio pistas muy claras: “Él va a jugar en la posición que prefiere, no tiene problema en hacerlo por la derecha, al centro, por la izquierda. Ahora tendremos tiempo de pensarlo bien. El año pasado jugamos con tres medios, luego cambiamos, creo que seguiremos en esta línea de jugar con dos mediocentro”.

En ese panorama, las opciones del nuevo número 11 del equipo alemán están por los extremos o como mediapunta. Precisamente, ante la baja de Robben (lesionado en la pantorrilla durante un juego de tenis en sus vacaciones) y la salida de Douglas Costa, el ensayo puede hacerse en cualquier momento.

Ancelotti, de hecho, dijo que el debut de James no demorará mucho: “si no tienen ningún problema podría jugar 45 minutos el sábado en la Copa Telekom”.

“Feliz de estar aquí en un club tan grande como Bayern Múnich. Quiero hacer historia y ayudar a que el equipo gane cosas importantes”: James.

Cortesía/EFE

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