La Defensoría del Pueblo del Valle del Cauca y la Secretaría de Seguridad y Justicia de Cali, luego de visitar las instalaciones, expresaron públicamente que evidenciaron que allí no se presentaron situaciones de este tipo.
Por medio de un comunicado, el Grupo Éxito rechazó las acusaciones que se han hecho en redes sociales en las que se aseguran que uno de sus almacenes de Cali, ubicado en el Simón Bolívar, se haya vuelto un “centro de torturas” y reveló que desde el pasado 20 de mayo los órganos de control han podido visitar el lugar para que constaten que dichas acusaciones carecen de fundamento.
“No se puede con injurias tratar de convertir a las víctimas en supuestos victimarios”, se lee en la misiva.
Por otro lado el documento subraya: “En estos ataques se ha puesto en riesgo la vida e integridad física de empleados que trabajan honestamente; de vigilantes y de colombianos y colombianas de la Policía Nacional que cumplen con su deber de protección a las personas y a las instalaciones públicas y privadas. En estos asaltos se han derribado muros, puertas, rejas para robar cajeros electrónicos y productos de distintas secciones del almacén, lo que nos ha llevado a tener que cerrarlo desde el 1 de mayo, ante la imposibilidad de operar”.
También mencionan que desde el jueves la Defensoría del Pueblo del Valle del Cauca y la Secretaría de Seguridad y Justicia de Cali, luego de visitar las instalaciones, expresaron públicamente que evidenciaron que allí no se presentaron situaciones de este tipo.
La Defensoría del Pueblo del Valle del Cauca y la Secretaría de Seguridad y Justicia de Cali, luego de visitar las instalaciones, expresaron públicamente que evidenciaron que allí no se presentaron situaciones de este tipo.
Por medio de un comunicado, el Grupo Éxito rechazó las acusaciones que se han hecho en redes sociales en las que se aseguran que uno de sus almacenes de Cali, ubicado en el Simón Bolívar, se haya vuelto un “centro de torturas” y reveló que desde el pasado 20 de mayo los órganos de control han podido visitar el lugar para que constaten que dichas acusaciones carecen de fundamento.
“No se puede con injurias tratar de convertir a las víctimas en supuestos victimarios”, se lee en la misiva.
Por otro lado el documento subraya: “En estos ataques se ha puesto en riesgo la vida e integridad física de empleados que trabajan honestamente; de vigilantes y de colombianos y colombianas de la Policía Nacional que cumplen con su deber de protección a las personas y a las instalaciones públicas y privadas. En estos asaltos se han derribado muros, puertas, rejas para robar cajeros electrónicos y productos de distintas secciones del almacén, lo que nos ha llevado a tener que cerrarlo desde el 1 de mayo, ante la imposibilidad de operar”.
También mencionan que desde el jueves la Defensoría del Pueblo del Valle del Cauca y la Secretaría de Seguridad y Justicia de Cali, luego de visitar las instalaciones, expresaron públicamente que evidenciaron que allí no se presentaron situaciones de este tipo.