Una compleja estructura de organización independiente rige cada uno de los cuatros pueblos de la Sierra Nevada de Santa Marta: Arhuacos, Koguis, Wiwas y Kankuamos,  y aunque los hermanos menores, civiles o blancos, como ellos llaman al resto de ciudadanos, ignoren que existen, en las montañas de la región hay resguardos encerrados tradicionalmente en las selvas y zonas de reserva, desde donde ordenan respeto a la madre tierra, como base fundamental de la ley.

Los Gobiernos Indígenas son estructuras de carácter especial, reconocidos por la Constitución Política de 1991, en cuanto a la autonomía para implementar sus leyes y establecer jurisdicción. Los últimos años de estos gobiernos, la principal tarea es la recuperación, protección y veneración de sus territorios.

Los mamos son los líderes espirituales de los pueblos de la Sierra Nevada; todos son gobernados por los Cabildos, posición que recae en los hombros de un miembro de la comunidad que ha sobresalido entre todos. 

Los Cabildos son los representantes de su comunidad ante los gobiernos civiles; son los encargados de administrar el enlace entre los pueblos, dirigir la preservación y continuidad de sus costumbres, velar por el éxito de su economía basada en el aprovechamiento del suelo y los recursos naturales, a través de actividades como la pesca, ganadería y agricultura.

Resistencia en la Línea Negra: Gobierno Arhuaco
Los mamos deciden luego de un tiempo, el final de las gestiones de un Cabildo, para estos efectos se reúnen y lo comunican en asamblea; Rogelio Mejía Izquierdo es el Cabildo Gobernador del pueblo Arhuaco, líder desde hace cuatro años de esta comunidad de 24 mil miembros.

La lucha por el cerro El Alguacil o de las Antenas, ha sido una de las más largas que ha librado el gobierno arhuaco como acto de defensa de los territorios sagrados; el cerro está ocupado por las Fuerzas Armadas de Colombia, quienes protegen un centro grupo de antes de comunicación privada.

“Todos los pueblos indígenas del Cesar, tenemos la concepción de que la mayor fortaleza de nuestros gobiernos está en los territorios”, dijo José Ricardo Villafañe, de la Oficina de Asuntos Indígenas de la Gobernación del Cesar.

Gobierno Kankuamo: preservación de la cultura a través de la educación
Jaime Luis Arias, Secretario Técnico del Cabildo Kankuamo, aseguró que esta población está cerca de los 20 mil miembros, habitantes de la parte suroriental de la Sierra Nevada de Santa Marta, Atánquez, jurisdicción de Valledupar, entre otros lugares, incluyendo a indígenas desplazados a lo largo del territorio colombiano.

“Nuestra ley de origen o ley mayor es la máxima expresión de la autoridad propia porque es la misma naturaleza, nuestros padres ordenaron el mundo y desde ahí se rige todo el ordenamiento y ya hoy con la situación del pueblo Kankuamo, ese es el fundamento principal”, dijo el líder indígena.

El pueblo Kankuamo tiene 12 cabildos, representados por Jaime Arias como Gobernador, quien durante 15 años ha liderado a este pueblo ante el Gobierno del País y demás habitantes de Colombia mediante su organización jurídica. La época de la violencia golpeó al territorio Kankuamo; asesinatos, desapariciones, torturas y desplazamiento por parte las Autodefensas,  fue quizá la época más difícil de este gobierno.

Las resoluciones del Gobierno Kankuamo sobre la preservación del territorio, indican como fundamento, la Concertación con el Gobierno Nacional para la intervención de cualquier naturaleza en los predios propiedad del pueblo y el respeto por sus lugares sagrados, de la misma manera lo han establecido los demás pueblos de la Sierra Nevada de Santa Marta.

Mediante acciones del Gobierno Kankuamo, la educación rural en el territorio de Atánquez logró quedar bajo la administración de este pueblo, quien en conversaciones con la     Secretaría de Educación Municipal, estableció en el 2013 los parámetros bajos los cuales se rige la formación académica de los jóvenes del sector. 

Los Wiwas: fortalecimiento del gobierno propio
Este pueblo de 16 mil miembros, según las afirmaciones de Indalecio Bolívar, Fiscal de la Organización Wiwa,  tiene representación en La Guajira y Cesar.

“El Cabildo Gobernador y la mesa directiva  nos representan a nivel nacional. Los Comisarios reciben las leyes de los mamos, y las aplican a la comunidad entera”, dijo el líder indígena, y agregó que a través de los Comisarios, los lineamientos son transmitidos al  Cabildo.

Es Gobierno Wiwa ha manifestado que las acciones del Gobierno Nacional contrastan con las leyes indígenas desde hace muchos años, también irrumpen en la jurisdicción especial de la comunidad, por lo que los actos del mandato étnico, han sido encaminados a la búsqueda del reconocimiento, mas allá de lo que el Estado ha pretendido.

“Queremos mostrarle al gobierno como es nuestra educación y que esto se apruebe, no que ellos nos vengan a aplicar a nosotros”, dijo el líder indígena Wiwa, y agregó que en conversaciones con el Ministerio de Educación pretenden administrar tanto la educación occidental como la propia.

Víctor Loperena Mindiola es el actual Cabildo Gobernador; desde hace un mes lidera la representación de la comunidad; en esta comunidad, el pueblo señala en un congreso a sus candidatos para la escogencia del Cabildo que durará cuatro años y que finalmente está en las manos de los Mamos. El Congreso de los Wiwas se celebra en la capital de esta comunidad indígena ubicada en La Guajira, y conocida como Achintukua.

El Pueblo de los Koguis esperanzado en el Gobierno
En La Guajira, Cesar y Magdalena habita el pueblo Kogui, con más de 10 mil habitantes según las apreciaciones del gobierno indígena, liderado por la autoridad máxima encarnada en Los Mamos, el nivel más alto en la jerarquía de esta comunidad; el Cabildo Gobernador Kogui es José de los Santos Sauna, quien es la representación política externa de la organización.

Junto a los demás pueblos de la sierra, los Koguis han librado una batalla por la protección del medioambiente, nombre dado por los civiles, y fundamento del espíritu para ellos; proyectos como los de explotación minera de La Guajira y Cesar aprobados con licencia por el Ministerio de Medio Ambiente, han enfrentado a los gobiernos indígenas como éste, que pretende proteger sus sitios sagrados, algunos de ellos ya fueron invadidos por la maquinaria carbonera u otras actividades de desarrollo.

La Corte Constitucional ha recibido en sus manos una tutela impetrada por los cuatro gobiernos de la Sierra, para la reclamación de sus derechos sobre los sitios sagrados que proyectos como Puerto Brisa en las estribaciones de la Sierra, destruyó.

Un collar de cuarzos que representa cuatro elementos, entre ellos el buen gobierno, fue entregado por los Mamos Koguis al presidente Juan Manuel Santos en su acto de posesión, y desde entonces esta comunidad indígena está esperando que el primer mandatario honre el obsequio con la protección de los sitios sagrados de los pueblos de la Sierra, quienes argumentan que, “no solo a los indios les beneficia proteger el corazón del mundo, a los hermanitos menores también”. 

Luego de varias décadas de reconocimiento en el ordenamiento Nacional, a través de la Constitución Política de Colombia 1991, los pueblos indígenas siguen luchando por la recuperación, restauración y protección de sus territorios sagrados, invadidos, despojados por los hermanos menores, y abandonados en algunos casos por ellos mismos, huyendo de la violencia.

Por Andrés Llamas Nova