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General - 3 agosto, 2013

Francisco Javier bajo el temor de las balas

Según los habitantes del sector subnormal ‘Francisco Javier’ están cansados de constantes disparos que los tienen atemorizados. La casa de un adulto mayor discapacitado recibió ocho impactos de bala la noche del jueves.

Habitantes de la invasión y de Bello Horizonte, manifestaron que estos actos podrían tratarse de intimidación para que nadie invada el terreno que queda libre en ese sector.
Habitantes de la invasión y de Bello Horizonte, manifestaron que estos actos podrían tratarse de intimidación para que nadie invada el terreno que queda libre en ese sector.

Un adulto mayor, discapacitado, habitante del barrio Bello Horizonte, en límites con la invasión Francisco Javier, se llevó tremendo susto cuando intentaba sacar agua con una turbina en el patio de su casa, la noche del pasado jueves.

Ocho proyectiles impactaron su vivienda hecha con hojas de lata, cosa que sorprendió al  anciano que sin una de sus piernas intentó resguardarse porque pensó que era un incendio, según relata Manuela Andrade Anaya, hija del afectado.

“Eran como las 10 de la noche, cuando el vio la candela pensó que era un incendio y apagó la turbina, cuando sube acá, se da cuenta de que son disparos y además encuentra un panfleto, en donde le dicen que mandara a desalojar la gente que está invadiendo, porque piensan que él es que está metiendo a la gente ahí”, dijo Andrade Anaya, quien manifestó que su padre fue sacado del lugar por razones de seguridad  y que teme por su vida.

En el último rincón de la ciudad al noroccidente, en la comuna 5, se encuentran los barrios Bello Horizonte y Francisco Javier; este último considerado invasión porque no ha recibido legalidad de parte del Municipio, aunque aseguran que han estado comprando predios a su propietario.

La casa del anciano, de quien se abstuvieron de suministrar la identidad,  está justo al borde del muro que delimita el último  sector de la ciudad en la comuna 5; frente a un terreno empinado justo detrás de la invasión Francisco Javier, en donde al parecer han intentado seguir invadiendo, y allí estaría el origen del problema.

¿Protegiendo la tierra?

Octavio Rico, líder de la invasión Francisco Javier, asegura que están cansados de los disparos que a diario se escuchan en el lugar. “El señor no tiene nada que ver con la invasión, él es un anciano sin una pierna, según tenemos entendido son un personal que tiene la señora María Eugenia Vizcaíno (encargada de negociar con los invasores), que son los encargados de presionar, amedrentar y amenazar a los habitantes de Francisco Javier, hace algunos años”, dijo.

El terreno donde está ubicado este conjunto de viviendas nombrado Francisco Javier, está fuera del perímetro urbano de la ciudad, fue invadido, pero según los habitantes, los predios se han ido comprando a su propietario; sin embargo, desde que están en el lugar han sido víctimas de intimidaciones y atentados para que desocupen.

“Tenemos una semana de estar escuchando tiros en la noche, cogen a las casas a plomo. Esto es intolerable, hace cuatro días balearon ocho veces una casa. Estamos atemorizados”, concluyó Octavio Rico.

Continuaría la invasión

El terreno que por alguna razón está despejado, justo detrás de Francisco Javier, podría ser invadido por varias personas que argumentan no tener hogar; en el caso del anciano atacado, su familia asegura que ha manifestado que él está de acuerdo en que el predio sea poblado porque la delincuencia, inseguridad, y las basuras lo afectan, pero insisten en que esto no es motivo para atacar a bala a una persona indefensa.

El Comandante de la Policía del Cesar, Coronel Juan Pablo Guerrero, afirmó que hasta el momento se investigan los detalles de este hecho y que en horas de la tarde de ayer visitaría el lugar para apersonarse del caso.

Los terrenos

La invasión Francisco Javier, ubicada fuera del perímetro urbano de la ciudad, fue cobijada en la Sentencia de la Corte Constitucional, (T-946 de 2011), proferida en respuesta a una tutela de un grupo de personas habitantes de este predio y de “Los Guasimales” asentadas en el predio La Sabana 1, ubicada en la vereda Los Cominos de Tamacal de Valledupar. 

Aseguran los habitantes de estos territorios que desde entonces, han venido solicitando la ayuda del Municipio para poder hacer parte del Plan de Ordenamiento Territorial, puesto que en un proceso de establecimiento de lotes, los predios se han ido comprando a Miguel Morales, propietario de la extensión de tierra.

Pero mientras esto se viene desarrollando, los ataques con arma de fuego a las viviendas, panfletos intimidatorios, y otros aspectos, han ensombrecido el panorama de los invasores que podrían dejar de serlo, si el proceso de compra de lotes continua, o si son cobijados con las viviendas de interés social que está sorteando el Municipio.

Puntos de vista

Eder Maestre, invasor: “Este es un tiradero de basura y rincón de viciosos, para estar eso así, mejor que haya personal ahí, nosotros necesitamos un lugar donde vivir”.

Manuela Andrade, vecina: “Mi papá no se mete con los drogadictos por temor, por eso ha dicho simplemente que le conviene que ese lugar esté lleno de gente”.

Por Andrés Llamas Nova 
[email protected]

 

 

General
3 agosto, 2013

Francisco Javier bajo el temor de las balas

Según los habitantes del sector subnormal ‘Francisco Javier’ están cansados de constantes disparos que los tienen atemorizados. La casa de un adulto mayor discapacitado recibió ocho impactos de bala la noche del jueves.


Habitantes de la invasión y de Bello Horizonte, manifestaron que estos actos podrían tratarse de intimidación para que nadie invada el terreno que queda libre en ese sector.
Habitantes de la invasión y de Bello Horizonte, manifestaron que estos actos podrían tratarse de intimidación para que nadie invada el terreno que queda libre en ese sector.

Un adulto mayor, discapacitado, habitante del barrio Bello Horizonte, en límites con la invasión Francisco Javier, se llevó tremendo susto cuando intentaba sacar agua con una turbina en el patio de su casa, la noche del pasado jueves.

Ocho proyectiles impactaron su vivienda hecha con hojas de lata, cosa que sorprendió al  anciano que sin una de sus piernas intentó resguardarse porque pensó que era un incendio, según relata Manuela Andrade Anaya, hija del afectado.

“Eran como las 10 de la noche, cuando el vio la candela pensó que era un incendio y apagó la turbina, cuando sube acá, se da cuenta de que son disparos y además encuentra un panfleto, en donde le dicen que mandara a desalojar la gente que está invadiendo, porque piensan que él es que está metiendo a la gente ahí”, dijo Andrade Anaya, quien manifestó que su padre fue sacado del lugar por razones de seguridad  y que teme por su vida.

En el último rincón de la ciudad al noroccidente, en la comuna 5, se encuentran los barrios Bello Horizonte y Francisco Javier; este último considerado invasión porque no ha recibido legalidad de parte del Municipio, aunque aseguran que han estado comprando predios a su propietario.

La casa del anciano, de quien se abstuvieron de suministrar la identidad,  está justo al borde del muro que delimita el último  sector de la ciudad en la comuna 5; frente a un terreno empinado justo detrás de la invasión Francisco Javier, en donde al parecer han intentado seguir invadiendo, y allí estaría el origen del problema.

¿Protegiendo la tierra?

Octavio Rico, líder de la invasión Francisco Javier, asegura que están cansados de los disparos que a diario se escuchan en el lugar. “El señor no tiene nada que ver con la invasión, él es un anciano sin una pierna, según tenemos entendido son un personal que tiene la señora María Eugenia Vizcaíno (encargada de negociar con los invasores), que son los encargados de presionar, amedrentar y amenazar a los habitantes de Francisco Javier, hace algunos años”, dijo.

El terreno donde está ubicado este conjunto de viviendas nombrado Francisco Javier, está fuera del perímetro urbano de la ciudad, fue invadido, pero según los habitantes, los predios se han ido comprando a su propietario; sin embargo, desde que están en el lugar han sido víctimas de intimidaciones y atentados para que desocupen.

“Tenemos una semana de estar escuchando tiros en la noche, cogen a las casas a plomo. Esto es intolerable, hace cuatro días balearon ocho veces una casa. Estamos atemorizados”, concluyó Octavio Rico.

Continuaría la invasión

El terreno que por alguna razón está despejado, justo detrás de Francisco Javier, podría ser invadido por varias personas que argumentan no tener hogar; en el caso del anciano atacado, su familia asegura que ha manifestado que él está de acuerdo en que el predio sea poblado porque la delincuencia, inseguridad, y las basuras lo afectan, pero insisten en que esto no es motivo para atacar a bala a una persona indefensa.

El Comandante de la Policía del Cesar, Coronel Juan Pablo Guerrero, afirmó que hasta el momento se investigan los detalles de este hecho y que en horas de la tarde de ayer visitaría el lugar para apersonarse del caso.

Los terrenos

La invasión Francisco Javier, ubicada fuera del perímetro urbano de la ciudad, fue cobijada en la Sentencia de la Corte Constitucional, (T-946 de 2011), proferida en respuesta a una tutela de un grupo de personas habitantes de este predio y de “Los Guasimales” asentadas en el predio La Sabana 1, ubicada en la vereda Los Cominos de Tamacal de Valledupar. 

Aseguran los habitantes de estos territorios que desde entonces, han venido solicitando la ayuda del Municipio para poder hacer parte del Plan de Ordenamiento Territorial, puesto que en un proceso de establecimiento de lotes, los predios se han ido comprando a Miguel Morales, propietario de la extensión de tierra.

Pero mientras esto se viene desarrollando, los ataques con arma de fuego a las viviendas, panfletos intimidatorios, y otros aspectos, han ensombrecido el panorama de los invasores que podrían dejar de serlo, si el proceso de compra de lotes continua, o si son cobijados con las viviendas de interés social que está sorteando el Municipio.

Puntos de vista

Eder Maestre, invasor: “Este es un tiradero de basura y rincón de viciosos, para estar eso así, mejor que haya personal ahí, nosotros necesitamos un lugar donde vivir”.

Manuela Andrade, vecina: “Mi papá no se mete con los drogadictos por temor, por eso ha dicho simplemente que le conviene que ese lugar esté lleno de gente”.

Por Andrés Llamas Nova 
[email protected]