BOGOTA (AP) — En su afán por esclarecer hasta dónde han llegado los horrores del conflicto armado en Colombia en los últimos 30 años, la Fiscalía se dio a la tarea de establecer cuántas personas fueron sepultadas sin identificar en todos los cementerios del país, dijo un alto funcionario el miércoles. “No nos podemos aterrar: […]
BOGOTA (AP) —
En su afán por esclarecer hasta dónde han llegado los horrores del conflicto armado en Colombia en los últimos 30 años, la Fiscalía se dio a la tarea de establecer cuántas personas fueron sepultadas sin identificar en todos los cementerios del país, dijo un alto funcionario el miércoles.
“No nos podemos aterrar: llevamos 30 años de conflicto y sabemos que en muchos cementerios hay NN” o cadáveres sepultados como ‘nomen nescio’ o nombre desconocido, dijo en una entrevista con la AP Luis González, jefe de la Unidad de Justicia y Paz, la dependencia de la Fiscalía que investiga los crímenes perpetrados por los grupos armados al margen de la ley.
Nivaldo Jiménez, coordinador de la subunidad de apoyo de la Justicia y Paz, explicó que los actores del conflicto desaparecían a sus víctimas sin ningún documento con un sólo fin: “No dejar ninguna huella, no dejar ningún rastro de su crimen”.
La Fiscalía calcula que en Colombia, al menos 41.000 personas fueron desaparecidas con ocasión del conflicto armado. Asimismo, los paramilitares pudieron haber asesinado a unas 156.000 personas desde 1980 a 2004 y entre esas víctimas podrían estar algunos de los considerados como desaparecidos. De allí la importancia de determinar quiénes son esas personas enterradas como NN en los distintos cementerios del país.
González agregó que para establecer cuántas personas fueron sepultadas sin identificar, la Fiscalía les envió recientemente una solicitud a los alcaldes de los 1.098 municipios del país “para que nos digan cuántos cementerios hay legales –e ilegales– y en cuántos de esos cementerios se inhumaron NN”.
González observó que el objetivo de ese estudio es también establecer qué grupos armados hacían presencia en aquellas localidades donde fueron reportadas personas enterradas sin identificar.
González dijo además que intentan confirmar recientes informes de prensa y de grupos no gubernamentales (ONG’s) dando cuenta de que en el cementerio de la localidad de Mutatá, departamento de Antioquia, al menos 1.500 personas fueron inhumadas sin identificación previa.
Más recientemente, diversas ONG denunciaron que en el municipio de La Macarena, departamento del Meta, había una supuesta fosa común con unos 2.000 muertos, presuntas víctimas de bandas paramilitares y del Ejército. “La Macarena ni es una fosa común ni son 2.000 cadáveres”, aseguró González.
Precisó que a la fecha, en La Macarena han sido hallados por fiscales 449 cadáveres sin identificar “que fueron llevados allí, previa las normas colombianas de una inspección al cadáver y de una necropsia en el hospital”.
“La gente puede decir lo que quiera”, indicó González. “Pero nosotros como justicia no podemos especular” con las cifras.
BOGOTA (AP) — En su afán por esclarecer hasta dónde han llegado los horrores del conflicto armado en Colombia en los últimos 30 años, la Fiscalía se dio a la tarea de establecer cuántas personas fueron sepultadas sin identificar en todos los cementerios del país, dijo un alto funcionario el miércoles. “No nos podemos aterrar: […]
BOGOTA (AP) —
En su afán por esclarecer hasta dónde han llegado los horrores del conflicto armado en Colombia en los últimos 30 años, la Fiscalía se dio a la tarea de establecer cuántas personas fueron sepultadas sin identificar en todos los cementerios del país, dijo un alto funcionario el miércoles.
“No nos podemos aterrar: llevamos 30 años de conflicto y sabemos que en muchos cementerios hay NN” o cadáveres sepultados como ‘nomen nescio’ o nombre desconocido, dijo en una entrevista con la AP Luis González, jefe de la Unidad de Justicia y Paz, la dependencia de la Fiscalía que investiga los crímenes perpetrados por los grupos armados al margen de la ley.
Nivaldo Jiménez, coordinador de la subunidad de apoyo de la Justicia y Paz, explicó que los actores del conflicto desaparecían a sus víctimas sin ningún documento con un sólo fin: “No dejar ninguna huella, no dejar ningún rastro de su crimen”.
La Fiscalía calcula que en Colombia, al menos 41.000 personas fueron desaparecidas con ocasión del conflicto armado. Asimismo, los paramilitares pudieron haber asesinado a unas 156.000 personas desde 1980 a 2004 y entre esas víctimas podrían estar algunos de los considerados como desaparecidos. De allí la importancia de determinar quiénes son esas personas enterradas como NN en los distintos cementerios del país.
González agregó que para establecer cuántas personas fueron sepultadas sin identificar, la Fiscalía les envió recientemente una solicitud a los alcaldes de los 1.098 municipios del país “para que nos digan cuántos cementerios hay legales –e ilegales– y en cuántos de esos cementerios se inhumaron NN”.
González observó que el objetivo de ese estudio es también establecer qué grupos armados hacían presencia en aquellas localidades donde fueron reportadas personas enterradas sin identificar.
González dijo además que intentan confirmar recientes informes de prensa y de grupos no gubernamentales (ONG’s) dando cuenta de que en el cementerio de la localidad de Mutatá, departamento de Antioquia, al menos 1.500 personas fueron inhumadas sin identificación previa.
Más recientemente, diversas ONG denunciaron que en el municipio de La Macarena, departamento del Meta, había una supuesta fosa común con unos 2.000 muertos, presuntas víctimas de bandas paramilitares y del Ejército. “La Macarena ni es una fosa común ni son 2.000 cadáveres”, aseguró González.
Precisó que a la fecha, en La Macarena han sido hallados por fiscales 449 cadáveres sin identificar “que fueron llevados allí, previa las normas colombianas de una inspección al cadáver y de una necropsia en el hospital”.
“La gente puede decir lo que quiera”, indicó González. “Pero nosotros como justicia no podemos especular” con las cifras.