Hoy, cuando solo faltan 45 días para la inauguración del Festival, veo con preocupación el estado en que se encuentran los principales sitios de interés turístico en nuestra ciudad, que nuevamente luce su peor imagen para la gran fiesta de acordeones
Por Franklin Daza Suarez
Hoy, cuando solo faltan 45 días para la inauguración del Festival, veo con preocupación el estado en que se encuentran los principales sitios de interés turístico en nuestra ciudad, que nuevamente luce su peor imagen para la gran fiesta de acordeones. Al parecer es algo cíclico que irremediablemente se repite, como lo dije en mi columna pasada “Así no se hace una ciudad”.
Cada año la administración municipal pasa casi de agache ante la magnitud del evento que con lujo de detalles es organizado y realizado por la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata. Pero una cosa es el Festival y otra muy diferente aunque complementaria, es la disposición de la ciudad para aprovechar positivamente la presencia de miles de visitantes que por esos días se toma a Valledupar.
Entiendo que el año pasado la alcaldía de Valledupar no haya tomado ese liderazgo debido al poco tiempo que llevaba la administración Socarrás a la fecha de inicio del festival, pero para esta edición no veo excusa válida para no destacarse y es por ello que espero que en abril se note la diferencia en la forma como se aprovecha en toda su dimensión la vitrina del festival para posicionar la ciudad, para vender el territorio, para generar impactos positivos en un amplio porcentaje de la comunidad vallenata.
La administración debe convertirse en protagonista de primera línea y liderar actividades que complementen la fiesta folclórica .Esto se logra con hechos contundentes que permitan hacer sentir al visitante que llegó a una ciudad diferente, a un evento diferente en el que desde que llega a la ciudad hasta el último día, se le genere al turista una admiración y unas ganas de volver a esta tierra. Para ello se requiere ejercicio pleno de autoridad y de mucha creatividad.
Son muchos los frentes que corresponde cubrir para que se sienta la presencia institucional en este gran evento anual. Veamos algunos:
a. Implementar el servicio de puntos de información turística en sitios estratégicos complementados con un nutrido grupo de guías u orientadores debidamente certificados por el SENA.
b. Establecer Normas de ocupación vial y de sitios de interés y sus áreas aledañas. Por ser alta temporada deben revisarse zonas de parqueo, habilitar nuevas áreas y tener control total del tráfico.
c. Normatividad clara y específica para el uso de los bienes públicos con elementos publicitarios. Es totalmente anti estética y abusiva la forma en que se atiborra la Plaza Alfonso López (Por citar un ejemplo) de toda clase de publicidad de mal gusto, que desdibuja la belleza de este espacio urbano , con la frustración que esto genera a los visitantes.
d. Priorizar la divulgación de mensajes cívicos y campañas de imagen de la ciudad en todos los puntos de interés. Revisar y mejorar la señalización vial e informativa en todos los puntos críticos y en lugares de interés.
e. Concertación con empresas licoreras, grupos musicales, organizadores y patrocinadores para llegar a acuerdos que permitan el surgimiento de actividades alternas en sectores apartados de la ciudad.
f. Acuerdo con las empresas de taxis y obligatoriedad de portar una calcomanía con la tarifa acordada para festival en todos los taxis que circulan en la ciudad.
g. Plan de adecuación y embellecimiento de los sitios emblemáticos que tienen presencia masiva de turistas: Glorietas, parques, centro histórico, bulevares, monumentos, etc.
Son muchas las posibilidades que nos brinda esta temporada para mostrar una mejor ciudad, incluso desde Semana Santa se pueden dar algunos cambios, falta ver si el alcalde piensa igual.
Hoy, cuando solo faltan 45 días para la inauguración del Festival, veo con preocupación el estado en que se encuentran los principales sitios de interés turístico en nuestra ciudad, que nuevamente luce su peor imagen para la gran fiesta de acordeones
Por Franklin Daza Suarez
Hoy, cuando solo faltan 45 días para la inauguración del Festival, veo con preocupación el estado en que se encuentran los principales sitios de interés turístico en nuestra ciudad, que nuevamente luce su peor imagen para la gran fiesta de acordeones. Al parecer es algo cíclico que irremediablemente se repite, como lo dije en mi columna pasada “Así no se hace una ciudad”.
Cada año la administración municipal pasa casi de agache ante la magnitud del evento que con lujo de detalles es organizado y realizado por la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata. Pero una cosa es el Festival y otra muy diferente aunque complementaria, es la disposición de la ciudad para aprovechar positivamente la presencia de miles de visitantes que por esos días se toma a Valledupar.
Entiendo que el año pasado la alcaldía de Valledupar no haya tomado ese liderazgo debido al poco tiempo que llevaba la administración Socarrás a la fecha de inicio del festival, pero para esta edición no veo excusa válida para no destacarse y es por ello que espero que en abril se note la diferencia en la forma como se aprovecha en toda su dimensión la vitrina del festival para posicionar la ciudad, para vender el territorio, para generar impactos positivos en un amplio porcentaje de la comunidad vallenata.
La administración debe convertirse en protagonista de primera línea y liderar actividades que complementen la fiesta folclórica .Esto se logra con hechos contundentes que permitan hacer sentir al visitante que llegó a una ciudad diferente, a un evento diferente en el que desde que llega a la ciudad hasta el último día, se le genere al turista una admiración y unas ganas de volver a esta tierra. Para ello se requiere ejercicio pleno de autoridad y de mucha creatividad.
Son muchos los frentes que corresponde cubrir para que se sienta la presencia institucional en este gran evento anual. Veamos algunos:
a. Implementar el servicio de puntos de información turística en sitios estratégicos complementados con un nutrido grupo de guías u orientadores debidamente certificados por el SENA.
b. Establecer Normas de ocupación vial y de sitios de interés y sus áreas aledañas. Por ser alta temporada deben revisarse zonas de parqueo, habilitar nuevas áreas y tener control total del tráfico.
c. Normatividad clara y específica para el uso de los bienes públicos con elementos publicitarios. Es totalmente anti estética y abusiva la forma en que se atiborra la Plaza Alfonso López (Por citar un ejemplo) de toda clase de publicidad de mal gusto, que desdibuja la belleza de este espacio urbano , con la frustración que esto genera a los visitantes.
d. Priorizar la divulgación de mensajes cívicos y campañas de imagen de la ciudad en todos los puntos de interés. Revisar y mejorar la señalización vial e informativa en todos los puntos críticos y en lugares de interés.
e. Concertación con empresas licoreras, grupos musicales, organizadores y patrocinadores para llegar a acuerdos que permitan el surgimiento de actividades alternas en sectores apartados de la ciudad.
f. Acuerdo con las empresas de taxis y obligatoriedad de portar una calcomanía con la tarifa acordada para festival en todos los taxis que circulan en la ciudad.
g. Plan de adecuación y embellecimiento de los sitios emblemáticos que tienen presencia masiva de turistas: Glorietas, parques, centro histórico, bulevares, monumentos, etc.
Son muchas las posibilidades que nos brinda esta temporada para mostrar una mejor ciudad, incluso desde Semana Santa se pueden dar algunos cambios, falta ver si el alcalde piensa igual.