Cerca de 400 wiwas, equivalente a 76 familias, de las cuales hay mujeres embarazadas y más de 200 niños, han tenido que huir.
La comunidad indígena del departamento de La Guajira lo perdió todo al ser desplazada forzosamente por la confrontación entre los grupos paramilitares AGC (Autodefensas Gaitanistas de Colombia) y Los Pachencas, que aparentemente se enfrentan por la disputa de territorios en zonas de la Sierra Nevada de Santa Marta. Cerca de 400 wiwas, equivalente a 76 familias, de las cuales hay mujeres embarazadas y más de 200 niños, han tenido que huir desde las 11 p.m. del sábado 24 de febrero de sus asentamientos Simimke, sabanajoaquina, marokasso, La Laguna, Limón – Carrizal y Bunkuamake, por temor a que el conflicto se siga extendiendo y acabe con sus vidas.
“Cada día son más las personas desplazadas. Lo cual pone en riesgo la vida, cultura y preservación del pueblo wiwa”, dijo a EL PILÓN Nelson Martínez Mendoza, miembro del pueblo indígena wiwa de la Sierra Nevada de Santa Marta, al denunciar este escenario de riesgo.
Martínez Mendoza expuso además que esta no es la primera vez que su comunidad sufre por la presencia de personal armado que no hace parte de las fuerzas militares, pues en años anteriores han vivido situaciones similares de mucho dolor en las que varios indígenas han sido asesinados.
Según el líder de la comunidad wiwa, desde el año anterior vienen denunciando ante las autoridades la circulación de estos grupos en sus territorios, pero no han sido escuchados pese a estar su cultura sujeta de protección por parte del Estado colombiano desde el año 2004, al estar en riesgo de desaparecer. Por esta razón, activarán alertas frente a organismos internacionales en busca de apoyo.
Al abandonar sus territorios, la mayoría de estas familias se han ubicado en la casa indígena del municipio de Riohacha, y otros en San Juan del Cesar.
Cerca de 400 wiwas, equivalente a 76 familias, de las cuales hay mujeres embarazadas y más de 200 niños, han tenido que huir.
La comunidad indígena del departamento de La Guajira lo perdió todo al ser desplazada forzosamente por la confrontación entre los grupos paramilitares AGC (Autodefensas Gaitanistas de Colombia) y Los Pachencas, que aparentemente se enfrentan por la disputa de territorios en zonas de la Sierra Nevada de Santa Marta. Cerca de 400 wiwas, equivalente a 76 familias, de las cuales hay mujeres embarazadas y más de 200 niños, han tenido que huir desde las 11 p.m. del sábado 24 de febrero de sus asentamientos Simimke, sabanajoaquina, marokasso, La Laguna, Limón – Carrizal y Bunkuamake, por temor a que el conflicto se siga extendiendo y acabe con sus vidas.
“Cada día son más las personas desplazadas. Lo cual pone en riesgo la vida, cultura y preservación del pueblo wiwa”, dijo a EL PILÓN Nelson Martínez Mendoza, miembro del pueblo indígena wiwa de la Sierra Nevada de Santa Marta, al denunciar este escenario de riesgo.
Martínez Mendoza expuso además que esta no es la primera vez que su comunidad sufre por la presencia de personal armado que no hace parte de las fuerzas militares, pues en años anteriores han vivido situaciones similares de mucho dolor en las que varios indígenas han sido asesinados.
Según el líder de la comunidad wiwa, desde el año anterior vienen denunciando ante las autoridades la circulación de estos grupos en sus territorios, pero no han sido escuchados pese a estar su cultura sujeta de protección por parte del Estado colombiano desde el año 2004, al estar en riesgo de desaparecer. Por esta razón, activarán alertas frente a organismos internacionales en busca de apoyo.
Al abandonar sus territorios, la mayoría de estas familias se han ubicado en la casa indígena del municipio de Riohacha, y otros en San Juan del Cesar.