En varias operaciones adelantadas por la Policía Nacional en los departamentos de La Guajira, Antioquia y Córdoba, capturaron a tres presuntos integrantes del Clan del Golfo, entre ellos al presunto cabecilla de esa organización criminal, que tenían incidencia en el Cesar con homicidios selectivos y el control de rutas del narcotráfico.

De acuerdo con el reporte entregado por las autoridades del Magdalena, las acciones contra esa estructura delictiva se concentraron en los municipios de La Jagua del Pilar, sur de La Guajira; Nechi, Antioquia, y Montería, Córdoba, en el marco de la operación nacional Agamenón Dos.

Entre los apresados se encuentra Andrés Cantillo Sánchez, alias ‘El Ratón’, quien al parecer era el jefe de sicarios de la organización, también el encargado de dirigir y ordenar homicidios selectivos y el control de las rutas del narcotráfico en la zona del norte del Cesar, sur del Magdalena y Bolívar.

También fue aprehendido, Orlando Peñate Correa, alias ‘Manolo’, presunto cabecilla militar y el primero en la línea de mando de la estructura ‘Erlin Pino Duarte’ y supuestamente era el encargado de ordenar actividades de observación contra unidades de la fuerza pública, especialmente de la Policía, para luego ordenar acciones criminales en contra de los uniformados.

Y Jader Negrete Ávila, alias ‘Merlano’, presunto cabecilla de finanzas de la estructura ‘Erlin Pino Duarte’, es señalado de coordinar la comercialización de sustancias alucinógenas y el transporte de grandes sumas de dinero para el pago de la nómina de los integrantes de las diferentes subestructuras criminales.

De igual forma se conoció que tenían bajo su mando un grupo de 15 integrantes encargados de consolidar las finanzas obtenidas a partir de actividades ilegales como la comercialización de pasta de base de coca, una de sus principales fuentes de financiación.

A los presuntos delincuentes les legalizaron la captura mediante audiencia pública, les imputaron cargos y los enviaron a un centro carcelario de Santa Marta por el delito de concierto para delinquir agravado.

Por Abdel Martínez Pérez /EL PILÓN