Lo vivido este miércoles 16 de octubre en la Universidad Popular del Cesar es la ratificación de, quizás, la peor crisis de credibilidad institucional que haya sufrido la UPC. Así lo definieron profesionales de la universidad. Una campaña en la que el debate y la elección de quiénes participarían en la consulta estamentaria se dio en los estrados judiciales no podía terminar de otra forma que entre el caos y los señalamientos de fraude.

En la entrada de la UPC sede Sábanas desde antes de las ocho de la mañana se instalaron carpas con logos de los candidatos y computadores conectados a internet para que votaran los estudiantes que entraban o salían de clases.

A priori, la apuesta de un voto virtual parecía innovadora y ágil porque los estudiantes no tendrían que acercarse a las sedes del centro académico a depositar su voto. Para hacerlo bastaba aparecer en la base de datos y tener acceso a internet desde un computador o celular. Pero el sistema virtual que no había fallado, durante la consulta estamentaria de la UPC presentó fallas que provocaron señalamientos, duda y por supuesto incertidumbre entre los candidatos y la comunidad estudiantil.

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El software para las elecciones virtuales fue contratado con la Universidad Industrial de Santander, UIS. A las dos horas de abiertas las votaciones, de las 44.067 personas habilitadas para votar, había registro de alrededor 1.250 votos porque el portal negaba el acceso, incluso dejó de cargar. Los candidatos, veedores y estudiantes decidieron pedir explicaciones al Tribunal de Garantías de la universidad. Los nervios estaban alterados y cada uno reclamaba en su tono.

“No hay garantías”, “es imposible, se están marchando estudiantes sin votar”, “esto no puede continuar, debe suspenderse”, “esto es una burla”.

FUERZA BUROCRÁTICA

Desde la salida obligada del exrector Enrique Meza en julio de este año, la Universidad Popular del Cesar ha estado a cargo de rectores encargados. Las elecciones estaban programadas inicialmente para el 14 de junio para elegir un nuevo rector antes del seis de julio cuando terminó el periodo de Meza.

Pero los candidatos inadmitidos por el Tribunal de Garantías suspendieron, a punta de tutela, una y otra vez el proceso, hasta llegar al miércoles 16 de octubre donde se esperaba que finalizara una de las elecciones más caóticas recordadas en la UPC.

En la disputa por la rectoría hay diez candidatos: Carmen Alicia Rivera, Álvaro Javier Iglesias, Julio César Vega, Darling Francisca Guevara, Robert Trinidad Romero, Luis Alberto Caballero, César Galindo, Juan Bautista Ochoa, Emiliano Piedrahita y Jhon Jairo Díaz.

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¿Qué está en disputa?

Para la consulta estamentaria hay 17.525 estudiantes registrados, población similar a la de municipios de sexta categoría del Cesar. Pero la universidad maneja recursos mayores.

En la vigencia pasada la UPC percibió recursos por $88.513 millones. El doble que lo destinado desde el Sistema General de Participación, SGP, para Aguachica en el 2019, cinco veces más que Curumaní y hasta nueve veces más que lo destinado en el SGP para Tamalameque. Un presupuesto que resulta atractivo para los clanes políticos que apadrinan a casi la mitad de los candidatos.

El poder burocrático del centro universitario es igual de grande. Para el 2018, el valor de la planta de personal de la UPC significó $12.523 millones: son 557 empleos que genera el centro de educación solo en la parte administrativa de la universidad, sin contar, por ejemplo, los 145 contratos de prestación de servicios anuales por un valor de $1.673 millones.

¿AHORA QUÉ VIENE?

Sobre las 11:00 a.m. del miércoles, con el software de votación virtual presentando problemas, el Tribunal de Garantías, la rectora de la UPC, Alexi Vidal Brito, los candidatos a rector y la delegada de la UIS, se reunieron para tomar una decisión. Casi todos los candidatos exigieron suspender el proceso: era medio día y menos del 3 % de la población habilitada había votado.

Fue entonces cuando se tomó la decisión de suspender las elecciones. En los corredores se preveía la decisión, entonces la incógnita era cuál sería el siguiente paso porque aunque la rectora brindó una rueda de prensa no dejó claridad.

Por ejemplo, según los presentes en la reunión a puerta cerrada, ocho de los diez candidatos presionaron para que las elecciones se hicieran presencial, el tradicional voto en el tarjetón. Al respecto la rectora, Alexi Vidal, dijo que la decisión será estudiada.

“Lamentablemente el proceso de elección fue suspendido por fallas técnicas. Lo íbamos a realizar a través de la UIS por su experiencia pero se registraron fallas técnicas que causaron intermitencia en el proceso: se caía y volvía a restablecerse el servicio. No puedo garantizar que la próxima vez sea con la UIS, con otro o presencial, porque eso no es decisión de la rectoría sino del Consejo Superior, sin embargo las inquietudes de todos los candidatos se llevarán ante el Consejo y que sean ellos los que tomen la decisión”, explicó Alexi Vidal, quien es rectora encargada de la UPC desde el mes de agosto.

Asimismo, explicó que será el Consejo Superior el que en una sesión extraordinaria definirá el calendario electoral y la forma cómo se realizará. El primer problema con los tiempos son las elecciones regionales del próximo 27 de octubre. Todo indica que no se combinarán las fechas ni se realizarían antes.

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¿Qué dice la UIS?

Según la secretaria general de la Universidad Industrial de Santander, Sofía Pinzón, es la primera vez que el sistema falla desde el 2005. “La Universidad Industrial de Santander en aras de mejorar sus plataformas técnicas y los procesos, hizo una actualización de plataformas, y precisamente al iniciar el proceso funcionó bien, pero de repente hubo fallas técnicas que no pudimos resolver rápidamente y por eso se le solicitó al Tribunal de Garantías que se suspendieran las elecciones hasta tanto se pudiera garantizar la continuidad en el acceso de las personas al sistema de información”, explicó Pinzón, quien agregó que este jueves se presentará un informe técnico sobre las posibles fallas a la Universidad Popular del Cesar.

Seguramente el Consejo Superior de la UPC, analizadas las conclusiones del informe técnico, establecerá las nuevas fechas de elecciones y las formas cómo se realizarán, esto es, si se mantiene a la UIS como proveedor, se busca un nuevo software o se retorna a las elecciones tradicionales.

Si la jornada electoral se programa para noviembre, el nuevo rector estaría posesionándose a mitad de diciembre o quizás el próximo año. Mientras, la UPC seguirá en la agenda.

POR: DEIVIS CARO DAZA / EL PILÓN
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