Aunque en cada elección los diferentes partidos políticos hacen sus mejores esfuerzos para que el pueblo responda con su voto, siempre aparece el abstencionismo que es tal vez el ‘contrincante’ al que más temen los candidatos; por eso, como una forma de hacerle frente, el mismo Estado creó unos beneficios para quienes acuden a sufragar.
Sin embargo, es el hecho de que el elegido, sea éste alcalde, gobernador, senador, representante a la Cámara, concejal o diputado, realice una buena gestión lo que más agrada al elector; situación que en los últimos años parece no ser tal, pues cada vez el abstencionismo cobra más adeptos y en el Cesar supera el 50% del censo electoral según la Registraduría del Estado Civil.
Las personas, tal vez desmotivadas porque los funcionarios públicos una vez llegan a los cargos públicos no cumplen con sus promesas, en las últimas elecciones han dejado de acudir a las urnas, por lo que son muchas las campañas que se hacen desde el mismo Estado, y hasta los candidatos también, buscando que la gente salga a votar.
Cuando un ciudadano sale a sufragar, cumple con uno de sus máximos deberes como es el de participar en la vida política del país, al tiempo que elige para que a través de los nuevos gobernantes, congresistas, diputados y concejales pueda mejorar la calidad de vida de la comunidad.
Pese a ello, el abstencionismo sigue siendo el protagonista en cada elección y en contiendas como las que se avecinan a Cámara y Senado, se lleva cerca del 60% en el país.
Características del voto
El voto es libre y no debe mediar ningún tipo de presión económica o intimidadora; de igual modo, éste es secreto y así lo deben garantizar las autoridades según la Registraduría del Estado Civil.
El voto también tiene como característica que los ciudadanos al acudir a las urnas participan en las decisiones públicas, forman voluntad política y mantienen la democracia.
También se debe recordar que cuando se vota, este derecho lo debe ejercer la persona por sí misma, no enviar a otra a hacerlo, lo mismo que tampoco puede ser por correo.
Los beneficios del voto
Ejercer el derecho al voto tiene múltiples beneficios en materia educativa y de descuentos, entre otros.
* Quien vota tiene el derecho a ser preferido en caso de un empate para ingresar a una universidad sobre aquel que no lo haya hecho.
* El haber ejercido este derecho le permite tener un descuento del 10% en la matrícula de la universidad en todos los semestres siguientes a la votación.
* También le da el beneficio de ser el preferido en caso de un empate para la asignación de becas educativas.
* Para los jóvenes que deben prestar el servicio militar, el certificado electoral le da una rebaja de un mes a los bachilleres y de dos meses al soldado campesino regular.
* Un descuento del 10% en el valor de la expedición inicial o duplicado de la libreta militar.
* También otorga un 10% de descuento en el costo del duplicado de la cédula.
* El voto también otorga un 10% de descuento y por una sola vez, en el valor de la expedición del pasaporte.
* En vivienda también tiene sus beneficios, pues es preferido en caso de un empate a la hora de asignar un predio rural o subsidio de vivienda de interés social.
* En empleo, a quien vota, le da favorabilidad en caso de igualdad de puntaje de la lista de elegibles para un cargo público.
* Toda persona que haya votado tiene derecho a medio día de descanso remunerado.
Lo que no se debe hacer
Según la Registraduría del Estado Civil el voto se expresa en la fórmula ‘un hombre, un voto’ y todos los ciudadanos tienen el mismo derecho a votar y a que éste valga lo mismo sin que sea posible diferenciar la importancia de éste en función de criterios de propiedad, educación, religión, raza, sexo o posición política.
Sin embargo, dentro de éste hay unas prácticas que no se deberían cometer; tal es el caso de votar sin saber por quién, sin conocer su propuesta y los proyectos que podría ejecutar en favor de la comunidad.
Tampoco se debe votar por el que diga la gente o porque es el que va a ganar, sino por aquel por el cual el ciudadano está convencido que hará lo mejor para la comunidad.
Historia del voto
El origen del voto en Colombia, con el fin de elegir altos funcionarios del Estado y corporaciones públicas, data de la época conocida como La Patria Boba (1810-1816), cuando se empiezan a concebir las instituciones liberales clásicas que se consolidaron luego de la independencia en la Carta de Angostura de 1819.
En esa época los sistemas electorales estaban basados en el sufragio indirecto y público.
El voto indirecto de la Patria Boba y la Gran Colombia era parecido al usado en Francia y España en 1810 y practicado hasta 1834, en éste se sufragaba de manera directa en las parroquias y se designaban los apoderados o Electores, quienes nombraban a otros electores, que a su vez en el nivel de la provincia, elegían a los diputados a las Cortes en elecciones terciarias. La mayoría calificada era requerida para la elección de Presidente, Vicepresidente y Senadores.
Cuando se dio la Nueva Granada, fue reducida una instancia y la elección pasó a ser en principio de segundo grado, pero cuando faltaba la mayoría absoluta se debía acudir al tercero, el cual era un “perfeccionamiento”. Este eventual paso le correspondía al Congreso para la elección de Presidente y Vicepresidente de la República, y a las respectivas Asambleas Electorales, en los casos de la elección de diputados a la Cámara Provincial, cuando en el primer escrutinio de aquellas no se hubiere logrado la mayoría absoluta.
Sandra Santiago B.
Sandra.santiagoelpilon.com.co











