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General - 26 agosto, 2013

El río Guatapurí clama por ayuda

Lleno de historias como ícono de Valledupar ante el mundo, el río Guatapurí no solo lleva agua a la tierra del Caique Upar, es también centro de recreación. Hoy, su estado preocupa a más de uno y muy pocos hacen algo para recuperarlo.

 Esta es la vista actual del río Guatapurí, desconsoladora imagen si se compara con la de años atrás. EL PILÓN/Joaquín Ramírez
Esta es la vista actual del río Guatapurí, desconsoladora imagen si se compara con la de años atrás. EL PILÓN/Joaquín Ramírez
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El río Guatapurí es fuente de vida para la comunidad Vallenata,  se ha convertido en inspiración para compositores y es sinónimo de deidad para comunidades indígenas. Sin embargo, este afluente que es insigne para los oriundos de la capital del Cesar y que es reconocido a nivel nacional e internacional, está en peligro y en el sonar de su corriente, parece que clamara por ayuda.

Este río enmarca una tradición en la ciudad de los Santos Reyes del Valle de Upar,  que fue plasmada en las letras del inmortal Fredy Molina, quien describió este paraíso como un amor sensible.

“Es un río que nace en la nevada, que en todo el Cesar fuerte se siente, pero mi gran pasión la iguala el ímpetu de su torrente. Cuando el Guatapurí se crece, al sentir mi pasión se calma”, reza un fragmento de la canción de Molina.

 “Goatapore” en arhuaco significa “agua fría”. El río es un camino de agua fría que nace desde la laguna Curigua a más de 4 mil metros en la Sierra Nevada de Santa Marta y pasa por Valledupar a 70 kilómetros desde el lugar donde se origina.

Mucho se ha mostrado a nivel nacional el río Guatapurí, pero no todos conocen su situación actual, pues de tener un caudal fuerte pasó a convertirse en un ‘hilo’ de agua, cambio que ha sido visible para quienes tienen años de vivir en la capital del Cesar.

De esta manera, el Guatapurí ha venido presentando cambios como resultado de distintos factores, entre ellos el crecimiento de la población de Valledupar, la contaminación de su cauce, y el desvío del mismo por personas que están asentadas en sus cercanías.

También está la deforestación y el abandono de su cuenca. No se ha podido adelantar el Plan de Ordenamiento de la Cuenca (PONCA), por falta de acuerdo con los indígenas, que piden estar en los organismos de decisión. Es necesario llegar un acuerdo con las comunidades indígenas para desarrollar el PONCA, hacer reforestación y muchas obras de ingeniería que están pendientes.

Otra problemática a la cual se debe buscar solución es el arrojo de desechos por parte de quienes visitan el lugar.

El afluente provee de agua a toda la población de Valledupar, incluyendo las veredas y corregimientos que hacen parte de su jurisdicción, lo que en cifras llevaría a decir que la cantidad de personas que se benefician del río Guatapurí supera las 400 mil.

En una anterior publicación en EL PILON, se había expuesto una serie de compromisos de distintas entidades tanto públicas como privadas. Sin embargo, parece que con el pasar del tiempo a la comunidad se le va olvidando la importancia del Guatapurí para toda la población.

¿Cómo intervienen empresas privadas? 

Las empresas privadas reconocen la importancia que hay en preservar el cuidado del afluente, cerca de 11 entidades se han unido para crear Mesa Interinstitucional del Río Guatapurí con el cual buscan promover y ejecutar programas y políticas nacionales, regionales y sectoriales en relación con el medio ambiente y los recursos naturales renovables.

De igual forma, con este trabajo, mediante políticas de responsabilidad Social Empresarial, las entidades privadas pasarán a ejecutar obras o proyectos de descontaminación de corrientes o depósitos de agua afectados por vertimiento del municipio y promover, en coordinación con los entes directores y organismos ejecutores del Sistema Nacional de Adecuación de Tierras y con las Corporaciones Autónomas Regionales, obras  y proyectos de irrigación para mejorar el estado del río.

Alberto Gutiérrez, Coordinador Ambiental de la Fundación Carboandes, asegura que se hace necesario trabajar por el río teniendo en cuenta que si se sigue dando el manejo que se le está dando en pocos años, Valledupar no contará con una fuente hídrica que de abasto para la comunidad en general. 

“Si seguimos así, y no se toman cartas en el asunto, en 20 años no tendremos río, por eso las empresas privadas hemos decidido empezar a trabajar por esta corriente de agua que nos ha dado tanto a los vallenatos”, afirmó Gutiérrez.

Asimismo,  aseveró que ha sido difícil  trabajar de la mano con el sector público, pues ellos no han mostrado su interés en realizar proyectos concretos que ayuden a mejorar el estado del río.

Por su parte la gerente del Centro Comercial Guatapurí Plaza, Sandra García,  expresó que para ellos es preponderante el trabajo que se debe realizar para preservar el río, y que la conformación de esta Mesa Interinstitucional es un paso para empezar a ejecutar obras que permitan salvaguardar la cuenca “es importante el apoyo que tenemos, necesitamos llegar a toda la comunidad vallenata, queremos que nos vean como un aliado que queremos ayudar a la recuperación del ´rio Guatapurí que es tan necesario para todos nosotros”.

Lo que adelanta la administración municipal 

Para el Alcalde Fredys Socarrás Reales, los temas de cuidado y la preservación del río Guatapurí son importantes, ya que estos puntos están plasmados en el plan de desarrollo.

Socarrás Reales, dijo que actualmente se están ejecutando proyectos con la ubicación de espolones de protección los cuales serán de seis metros de altura y de seis de profundidad hacia la corriente, en palabras del mandatario, “las estructuras no afectarán en ningún momento las condiciones naturales del río, esto solamente controlará la fuerza para que no se siga erosionando la margen derecha.

  • Al paso del río por el norte de Valledupar, se encuentra el balneario Hurtado, principal lugar de recreación y diversión de la capital del Cesar y uno de los lugares más contaminados del afluente.
  • El municipio de Valledupar no cuenta con espacios físicos que permitan el desarrollo de actividades recreativas por medio de programas de ecoturismo ni la estimulación de la conservación o la preservación del medio ambiente.
  • Un factor al que se le atribuye la latente problemática del río Guatapurí es la falta de cultura ciudadana por parte de vendedores ambulantes y de quienes se acercan a tomar un baño en el lugar, y arrojan desechos orgánicos de alimentos y basuras.

Por Freddy Oñate Acevedo


[email protected]

 

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26 agosto, 2013

El río Guatapurí clama por ayuda

Lleno de historias como ícono de Valledupar ante el mundo, el río Guatapurí no solo lleva agua a la tierra del Caique Upar, es también centro de recreación. Hoy, su estado preocupa a más de uno y muy pocos hacen algo para recuperarlo.


 Esta es la vista actual del río Guatapurí, desconsoladora imagen si se compara con la de años atrás. EL PILÓN/Joaquín Ramírez
Esta es la vista actual del río Guatapurí, desconsoladora imagen si se compara con la de años atrás. EL PILÓN/Joaquín Ramírez
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El río Guatapurí es fuente de vida para la comunidad Vallenata,  se ha convertido en inspiración para compositores y es sinónimo de deidad para comunidades indígenas. Sin embargo, este afluente que es insigne para los oriundos de la capital del Cesar y que es reconocido a nivel nacional e internacional, está en peligro y en el sonar de su corriente, parece que clamara por ayuda.

Este río enmarca una tradición en la ciudad de los Santos Reyes del Valle de Upar,  que fue plasmada en las letras del inmortal Fredy Molina, quien describió este paraíso como un amor sensible.

“Es un río que nace en la nevada, que en todo el Cesar fuerte se siente, pero mi gran pasión la iguala el ímpetu de su torrente. Cuando el Guatapurí se crece, al sentir mi pasión se calma”, reza un fragmento de la canción de Molina.

 “Goatapore” en arhuaco significa “agua fría”. El río es un camino de agua fría que nace desde la laguna Curigua a más de 4 mil metros en la Sierra Nevada de Santa Marta y pasa por Valledupar a 70 kilómetros desde el lugar donde se origina.

Mucho se ha mostrado a nivel nacional el río Guatapurí, pero no todos conocen su situación actual, pues de tener un caudal fuerte pasó a convertirse en un ‘hilo’ de agua, cambio que ha sido visible para quienes tienen años de vivir en la capital del Cesar.

De esta manera, el Guatapurí ha venido presentando cambios como resultado de distintos factores, entre ellos el crecimiento de la población de Valledupar, la contaminación de su cauce, y el desvío del mismo por personas que están asentadas en sus cercanías.

También está la deforestación y el abandono de su cuenca. No se ha podido adelantar el Plan de Ordenamiento de la Cuenca (PONCA), por falta de acuerdo con los indígenas, que piden estar en los organismos de decisión. Es necesario llegar un acuerdo con las comunidades indígenas para desarrollar el PONCA, hacer reforestación y muchas obras de ingeniería que están pendientes.

Otra problemática a la cual se debe buscar solución es el arrojo de desechos por parte de quienes visitan el lugar.

El afluente provee de agua a toda la población de Valledupar, incluyendo las veredas y corregimientos que hacen parte de su jurisdicción, lo que en cifras llevaría a decir que la cantidad de personas que se benefician del río Guatapurí supera las 400 mil.

En una anterior publicación en EL PILON, se había expuesto una serie de compromisos de distintas entidades tanto públicas como privadas. Sin embargo, parece que con el pasar del tiempo a la comunidad se le va olvidando la importancia del Guatapurí para toda la población.

¿Cómo intervienen empresas privadas? 

Las empresas privadas reconocen la importancia que hay en preservar el cuidado del afluente, cerca de 11 entidades se han unido para crear Mesa Interinstitucional del Río Guatapurí con el cual buscan promover y ejecutar programas y políticas nacionales, regionales y sectoriales en relación con el medio ambiente y los recursos naturales renovables.

De igual forma, con este trabajo, mediante políticas de responsabilidad Social Empresarial, las entidades privadas pasarán a ejecutar obras o proyectos de descontaminación de corrientes o depósitos de agua afectados por vertimiento del municipio y promover, en coordinación con los entes directores y organismos ejecutores del Sistema Nacional de Adecuación de Tierras y con las Corporaciones Autónomas Regionales, obras  y proyectos de irrigación para mejorar el estado del río.

Alberto Gutiérrez, Coordinador Ambiental de la Fundación Carboandes, asegura que se hace necesario trabajar por el río teniendo en cuenta que si se sigue dando el manejo que se le está dando en pocos años, Valledupar no contará con una fuente hídrica que de abasto para la comunidad en general. 

“Si seguimos así, y no se toman cartas en el asunto, en 20 años no tendremos río, por eso las empresas privadas hemos decidido empezar a trabajar por esta corriente de agua que nos ha dado tanto a los vallenatos”, afirmó Gutiérrez.

Asimismo,  aseveró que ha sido difícil  trabajar de la mano con el sector público, pues ellos no han mostrado su interés en realizar proyectos concretos que ayuden a mejorar el estado del río.

Por su parte la gerente del Centro Comercial Guatapurí Plaza, Sandra García,  expresó que para ellos es preponderante el trabajo que se debe realizar para preservar el río, y que la conformación de esta Mesa Interinstitucional es un paso para empezar a ejecutar obras que permitan salvaguardar la cuenca “es importante el apoyo que tenemos, necesitamos llegar a toda la comunidad vallenata, queremos que nos vean como un aliado que queremos ayudar a la recuperación del ´rio Guatapurí que es tan necesario para todos nosotros”.

Lo que adelanta la administración municipal 

Para el Alcalde Fredys Socarrás Reales, los temas de cuidado y la preservación del río Guatapurí son importantes, ya que estos puntos están plasmados en el plan de desarrollo.

Socarrás Reales, dijo que actualmente se están ejecutando proyectos con la ubicación de espolones de protección los cuales serán de seis metros de altura y de seis de profundidad hacia la corriente, en palabras del mandatario, “las estructuras no afectarán en ningún momento las condiciones naturales del río, esto solamente controlará la fuerza para que no se siga erosionando la margen derecha.

  • Al paso del río por el norte de Valledupar, se encuentra el balneario Hurtado, principal lugar de recreación y diversión de la capital del Cesar y uno de los lugares más contaminados del afluente.
  • El municipio de Valledupar no cuenta con espacios físicos que permitan el desarrollo de actividades recreativas por medio de programas de ecoturismo ni la estimulación de la conservación o la preservación del medio ambiente.
  • Un factor al que se le atribuye la latente problemática del río Guatapurí es la falta de cultura ciudadana por parte de vendedores ambulantes y de quienes se acercan a tomar un baño en el lugar, y arrojan desechos orgánicos de alimentos y basuras.

Por Freddy Oñate Acevedo


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