Por un examen médico que decía que tenía un problema cardíaco, al patrullero de Tránsito y Transportes de la Policía, Germán Vargas Giraldo, una de las personas muertas en el derrumbe del corregimiento Manglar, del municipio de Giraldo, en el Urabá antioqueño, casi no lo admiten en la institución.

Por eso Elkin, uno de sus hermanos mayores, hizo que le practicaran otra prueba, porque consideraba que un joven, boxeador de alto rendimiento desde los 14 años y con varios títulos nacionales, como era Germán, no podía estar enfermo. El nuevo dictamen le dio la razón a Elkin, también boxeador y fundador de la escuela Puños de Oro, de Codazzi, Cesar, donde vive la familia.

De esta manera, Germán pudo llegar a ser patrullero de la Policía.
Prestó servicio como auxiliar bachiller en Bogotá y después de graduarse en la escuela de Fusa, Cundinamarca, fue incorporado a la sección de Tránsito en Antioquia.

“Estoy triste pero tranquilo, porque mi hermano murió en su ley, salvando vidas y al servicio de la institución que amó”,  dijo Elkin.

El patrullero Vargas había nacido el 22 de diciembre de 1985 y fue subcampeón  de boxeo en la categoría de los 63 kilos  en el Campeonato Nacional de  Ibagué en el año 2001, tiempo en que se vino de su natal  Codazzi y convivía con los demás púgiles en el coliseo Jesús Penso de Valledupar, bajo la instrucción del profesor Manuel Prescott. En total, su familia la conforman nueve hermanos. Uno de ellos, Elkin, que trabaja la educación física en Girardot, Cundinamarca, se lo llevó a esa tierra donde se incorporó como policía bachiller y después se quedó como patrullero.