Uno de los problemas más complicados y polémicos de las ciudades más grandes del mundo es el de la movilidad; las grandes urbes, propias del proceso de industrialización del mundo moderno, acogen a miles y millones de personas que tienen que desplazarse en las mismas entre sus hogares y sus sitios de trabajo.
En Colombia, ciudades de tamaño intermedio como Valledupar, ya comienzan a tener problemas en su movilidad, de allí surge el tema del motociclismo y del mototaxismo y ahora existe la esperanza de un  moderno sistema de transporte que sustituya a nuestro actual obsoleto y deficiente transporte público colectivo.
En Bogotá, el alcalde Enrique Peñaloza Londoño, hace varios años, dispuso, luego de una consulta popular, el establecimiento de un día sin carro durante el mes de febrero, como un ejercicio pedagógico encaminado a desestimular el uso del vehículo particular y a estimular – a la vez- el uso del transporte masivo. Pero Bogotá cuenta con un sistema de transporte público suficiente y hasta sobre-ofertado.
Por todo lo anterior, nos parece bastante arriesgada la decisión del señor Alcalde de Valledupar, Luis Fabián Fernández Maestre, de realizar el próximo miércoles una jornada experimental del día “sin moto y sin carros”, con el fin de generar una reflexión sobre el uso del carro particular y –fundamentalmente- reducir el impacto que sobre el medio ambiente tiene el uso de estos dos tipos de vehículos: las motos y el carro particular, las 7 de la mañana hasta las 7 de la noche.
La primera observación que hacemos sobre esta medida es que ha faltado  divulgación y pedagogía sobre la misma, en este sentido solicitamos al Alcalde y a sus secretarios de Gobierno y de Tránsito, fundamentalmente, explicar a la gente, a través de los medios de comunicación, por Internet y personalmente, el objetivo de la medida y las condiciones de la misma.
Adicionalmente, nos preguntamos, a manera de reflexión previsiva, si la administración sabe, con certeza, ¿Cuántos vehículos particulares circulan en Valledupar hoy en día y si hay seguridad sobre la suficiencia  del parque de taxis y de la capacidad del resto del transporte público de movilizar ese día a la población, sin mayores contratiempos?.
¿Existe un plan de contingencia, en caso que el transporte público colectivo y los taxis no sean suficientes para movilizar a la gente? ¿Qué va a pasar con los estudiantes de todos los niveles?…son elementos para la reflexión.
La medida, como era de suponer, ha generado mucha polémica, principalmente por parte de los comerciantes y de varios ciudadanos, comunes y corrientes, usuarios de las motos y del carro particular, consultados por este diario en las calles, quienes consideran exagerada la medida.
El debate está abierto y se trata, a nuestro modo de ver, de un experimento del cual se pueden sacar muchas conclusiones para el futuro de Valledupar. Llamamos a la ciudadanía a acatar la norma y a colaborar con los fines de la misma, por supuesto; pero también queremos alertar a la administración sobre el costo que esta va a tener, sin lugar a dudas, sobre la economía de la ciudad, cuyo comercio no pasa por el mejor momento.
Con todo el respeto por el señor Alcalde, y conociendo su actitud tolerante y receptiva, queremos sugerirle que se disponga de buses adicionales especiales para transportar a la gente entre los puntos de mayor movilidad de la ciudad, por ejemplo, entre la zona de La Nevada y el Centro, entre el Terminal de Transporte y el Centro; como también disponer a las autoridades de tránsito para el uso masivo de la bicicleta que probablemente se pueda presentar. Son algunas ideas para esta jornada del día sin moto y sin carro en Valledupar.