Por Sergio Barranco

El pluralismo político en Colombia es un principio de la democracia moderna y reconocimiento de la diversidad ideológica, que permite la coexistencia pacífica de distintos intereses y convicciones acerca del modo de ver la sociedad.

Además de este concepto, existen múltiples nociones, una de tantas, es la herramienta que posibilita a asentar posiciones divergentes como la que ahora manifiesta el movimiento Centro Democrático, que capitanea el ex presidente Álvaro Uribe Vélez, con una razón que solamente conoce su corazón y unos cuantos de sus séquitos.

Este movimiento que aparece en el escenario político como el desenlace de la discrepancia de ex compañeros, que juraron guardarse lealtad y seguir con la continuidad de políticas, un pacto que se incumplió sin nosotros conocer el motivo, a pesar de ese gran apego. 

La negatividad y el veto al proceso de paz en curso, es el asunto donde se ha hecho más hincapié por parte de este solitario movimiento, debido a que es el único que lo desaprueba.

En aras de hacer más firme esta oposición, presenta su legión a las futuras contiendas electorales de Senado, Cámara y Presidencia, que ha sido censurada por personajes políticos investigados, reprochada por la presencia de integrantes con un minúsculo trayecto político, no obstante se perciben consistentes con sus propósitos, al no reflejar coqueteo con ningún partido político, como lo ha hecho la meretriz verde con su nuevo cliente progresista, sin embargo el lastre que mencioné anteriormente de miembros en el ojo de la justicia y otros en el anonimato, es su flaqueza y posterior deceso, es que sin lugar a dudas el pasado no perdona ni olvida, y esta no es la excepción. 

Actualmente la riña interna de los precandidatos presidenciales con comentarios que no caen bien dentro del clan, la exhibición de imágenes, grabaciones y videos de adeptos con el maquiavelismo colombiano, es lo que ha impulsado a su líder a encabezar lista al Senado, aprovechando su popularidad como empuje a esta opción política, siendo este curul segura, por el respaldo de aciertos en su mandato, por otra parte, lo más probable es que su comitiva quede corta en votos y haga uso de la cifra repartidora como salvavidas, porque al no tener de aliado ningún partido político que sirva de torque, revela su fragilidad en su pie de fuerza electoral, y se le hará muy difícil su entrada al Congreso.

Las estrategias de marketing, halagos de dignatarios y el trato especial de medios han sido sus maniobras, que tristemente no serán de gran ayuda en un ambiente de confusión, que es lo verdaderamente se respira dentro sus adoctrinados.

En conclusión las resultas de este proceso electoral que se acerca, confirmarán el querer a un ex presidente o el hastío de sus opiniones, el batacazo al uribismo o su renacer mayestático.