Publicidad
Categorías
Categorías
Columnista - 12 junio, 2023

El efecto Benedetti

Todavía Colombia no ha terminado de superar el proceso 8.000 con la campaña de Ernesto Samper, penetrada por los dineros del narcotráfico, interceptaciones, asesinatos, compra de parlamentarios y periodistas; menos aún, las campañas de Andrés Pastrana y Álvaro Uribe, financiadas por paramilitares como recientemente confesó Salvatore Mancuso; tampoco las financiaciones,

Todavía Colombia no ha terminado de superar el proceso 8.000 con la campaña de Ernesto Samper, penetrada por los dineros del narcotráfico, interceptaciones, asesinatos, compra de parlamentarios y periodistas; menos aún, las campañas de Andrés Pastrana y Álvaro Uribe, financiadas por paramilitares como recientemente confesó Salvatore Mancuso; tampoco las financiaciones, que llegaron luego, con la corrupta firma Odebrecht a la campaña Santos; ni el escándalo de la ‘Ñeñepolítica’ en el nefasto gobierno Duque; y ya estamos en otra tormenta de dimensiones insospechadas, esta vez en la campaña de Petro; por cuenta de unos polémicos audios de Armando Benedetti, reconocido político, marrullero y mano derecha de la campaña, en los que habla de una presunta financiación ilegal para la campaña en la costa.

 ” …un man que se consiguió $15.000 millones y ahora…. Prepárense porque yo en cualquier momento reclamo mi espacio político y no lo hagan para que vean, y si creen que es una amenaza, es una amenaza y si quieres grabarlo, grábalo, exploto porque ayer ustedes me maltrataron como una mierda y eso no se le hace a Benedetti…” Sin duda, impactantes y reveladoras declaraciones que llegan a causar revuelo en todo el país y en las que además, aparecen chuzadas empleadas, en especial la niñera del hijo, de Laura Sarabia, jefe de gabinete y asesora de confianza del Presidente, presuntamente provenientes de la misma Presidencia de la República, una situación muy delicada porque 4 oficiales implicados guardan silencio y el quinto apareció muerto en extrañas circunstancias, el coronel Óscar Darío Dávila, jefe de avanzada de la presidencia y quien habría recibido la orden de chuzar a la niñera, con estas palabras que dijo antes de su muerte a la revista Cambio, todo queda claro: “Yo no me puedo pronunciar ante esto… Humm, mejor dicho, me acaban”. Una hipótesis necesaria de aclarar y que dejan muy mal parado al gobierno Petro, quien en un discurso en la carrera 7, el día de las marchas en favor de sus reformas, que, entre otras, no fueron lo que se esperaba, dijo tajantemente que su gobierno no chuzaba. Pero está claro que aquí hay gato encerrado y lo que está pasando indica que sí, lo que hicieron con la niñera para recuperar el dinero robado en casa de Laura Sarabia, se les salió de las manos. Si esto se comprueba, sería un golpe brutal para el Presidente, quien se atrincheró en el radicalismo de la izquierda y comienza a ver enemigos por todas partes, lo cierto es que en su primer año de gobierno ha cometido errores garrafales y hoy por hoy, tiene decepcionada a mucha gente con anhelos de un verdadero cambio. 

Lo que se le viene no será fácil, enfrentado con los poderes, en especial con la Fiscalía, que tiene una oportunidad de oro para despedirse, descubriendo a la que hace un mes era la mujer más poderosa del país, pero en este momento está prácticamente acorralada, escondida y nerviosa y con el exembajador Benedetti,  fuera del país, sin saber si regresa o no y muy afectado por el trato desleal del presidente Petro, quien una vez más demuestra que cuando está frente a una tormenta que lo salpica, se desmarca rápidamente, aunque le hayan ayudado con sus logros políticos. Lo mismo le hizo a Juan Carlos Montes, el célebre asesor que entregó la plata en bolsas y de quien después no se acordaba, hoy está exiliado y sin saber qué hacer, por lo pronto callado, para no verse inmerso en más problemas. 

En este caso, Benedetti tiene varias opciones y las más indicada puede ser hablar con las autoridades de EEUU a cambio de beneficios. Pero, en resumen, este escándalo, que ya muchos denominaron el proceso 15.000, le resta mucha legitimidad al gobierno, máxime cuando se trata de un presidente que se rasgaba las vestiduras con estos delicados temas; además que han dejado al descubierto la manera en que se han movido las últimas 6 campañas presidenciales, con intereses oscuros que siempre salen a la luz. @JACOBOSOLANOC

Columnista
12 junio, 2023

El efecto Benedetti

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Jacobo Solano Cerchiaro

Todavía Colombia no ha terminado de superar el proceso 8.000 con la campaña de Ernesto Samper, penetrada por los dineros del narcotráfico, interceptaciones, asesinatos, compra de parlamentarios y periodistas; menos aún, las campañas de Andrés Pastrana y Álvaro Uribe, financiadas por paramilitares como recientemente confesó Salvatore Mancuso; tampoco las financiaciones,


Todavía Colombia no ha terminado de superar el proceso 8.000 con la campaña de Ernesto Samper, penetrada por los dineros del narcotráfico, interceptaciones, asesinatos, compra de parlamentarios y periodistas; menos aún, las campañas de Andrés Pastrana y Álvaro Uribe, financiadas por paramilitares como recientemente confesó Salvatore Mancuso; tampoco las financiaciones, que llegaron luego, con la corrupta firma Odebrecht a la campaña Santos; ni el escándalo de la ‘Ñeñepolítica’ en el nefasto gobierno Duque; y ya estamos en otra tormenta de dimensiones insospechadas, esta vez en la campaña de Petro; por cuenta de unos polémicos audios de Armando Benedetti, reconocido político, marrullero y mano derecha de la campaña, en los que habla de una presunta financiación ilegal para la campaña en la costa.

 ” …un man que se consiguió $15.000 millones y ahora…. Prepárense porque yo en cualquier momento reclamo mi espacio político y no lo hagan para que vean, y si creen que es una amenaza, es una amenaza y si quieres grabarlo, grábalo, exploto porque ayer ustedes me maltrataron como una mierda y eso no se le hace a Benedetti…” Sin duda, impactantes y reveladoras declaraciones que llegan a causar revuelo en todo el país y en las que además, aparecen chuzadas empleadas, en especial la niñera del hijo, de Laura Sarabia, jefe de gabinete y asesora de confianza del Presidente, presuntamente provenientes de la misma Presidencia de la República, una situación muy delicada porque 4 oficiales implicados guardan silencio y el quinto apareció muerto en extrañas circunstancias, el coronel Óscar Darío Dávila, jefe de avanzada de la presidencia y quien habría recibido la orden de chuzar a la niñera, con estas palabras que dijo antes de su muerte a la revista Cambio, todo queda claro: “Yo no me puedo pronunciar ante esto… Humm, mejor dicho, me acaban”. Una hipótesis necesaria de aclarar y que dejan muy mal parado al gobierno Petro, quien en un discurso en la carrera 7, el día de las marchas en favor de sus reformas, que, entre otras, no fueron lo que se esperaba, dijo tajantemente que su gobierno no chuzaba. Pero está claro que aquí hay gato encerrado y lo que está pasando indica que sí, lo que hicieron con la niñera para recuperar el dinero robado en casa de Laura Sarabia, se les salió de las manos. Si esto se comprueba, sería un golpe brutal para el Presidente, quien se atrincheró en el radicalismo de la izquierda y comienza a ver enemigos por todas partes, lo cierto es que en su primer año de gobierno ha cometido errores garrafales y hoy por hoy, tiene decepcionada a mucha gente con anhelos de un verdadero cambio. 

Lo que se le viene no será fácil, enfrentado con los poderes, en especial con la Fiscalía, que tiene una oportunidad de oro para despedirse, descubriendo a la que hace un mes era la mujer más poderosa del país, pero en este momento está prácticamente acorralada, escondida y nerviosa y con el exembajador Benedetti,  fuera del país, sin saber si regresa o no y muy afectado por el trato desleal del presidente Petro, quien una vez más demuestra que cuando está frente a una tormenta que lo salpica, se desmarca rápidamente, aunque le hayan ayudado con sus logros políticos. Lo mismo le hizo a Juan Carlos Montes, el célebre asesor que entregó la plata en bolsas y de quien después no se acordaba, hoy está exiliado y sin saber qué hacer, por lo pronto callado, para no verse inmerso en más problemas. 

En este caso, Benedetti tiene varias opciones y las más indicada puede ser hablar con las autoridades de EEUU a cambio de beneficios. Pero, en resumen, este escándalo, que ya muchos denominaron el proceso 15.000, le resta mucha legitimidad al gobierno, máxime cuando se trata de un presidente que se rasgaba las vestiduras con estos delicados temas; además que han dejado al descubierto la manera en que se han movido las últimas 6 campañas presidenciales, con intereses oscuros que siempre salen a la luz. @JACOBOSOLANOC