El lenguaje, las ideolologías y las religiones, son estructuras maleables porque se pueden moldear cumpliendo intereses determinados; por eso, son sujetos constantes de desprestigio. Las palabras pueden tener diferentes significados, más allá de lo etimológico, dependiendo de quiénes las empleen. La moda, para ciertos sectores de la sociedad colombiana, es hablar de institucionalidad, democracia, comunismo, dictadura, estado de derecho y muchas otras algarabías semánticas con sus respectivas interpretaciones particulares que, por lo general son sofísticas. 

Esta jerga gramatical se ha exagerado desde que Petro llegó al solio de Bolívar, por no pertenecer a las tradicionales familias nobiliarias que han gobernado al país con carácter monárquico; para estas, Ciénaga de Oro no puede ser la cuna de un presidente de la república. Eso hace parte del santanderismo que nos inocularon desde el comienzo de la república en el cual lo trivial está por encima de lo fundamental a fin de moldear las cosas a su manera. 

Como ejemplos, citaremos algunos conceptos cuyos significados varían según quiénes pretendan venderlos. Para algunas vertientes ideológicas que llamaremos A, el concepto individuo mata al de sociedad, concepción neoliberal. En cambio, B dice que la sociedad somos todos.Para A, el fundamento democrático no es la libertad sino el orden; desde la oficialización del escudo nacional se sientan estos dos principios donde el cóndor vigila la libertad con el fin de depredarla. A mide la riqueza de un país por su PIB mientras que B lo hace con el saber. A dice que una nación es una aldea global, B considera que es una identidad sociocultural. A sostiene que avanzar es construir sobre lo construido; esto es un sofisma; ¿por qué no seguimos construyendo sobre la colonia española?; B cree que avanzar consiste en producir cambios cualitativos en la sociedad. A dice que Colombia debe vivir de las rentas mineras, B sostiene que debe vivir de las rentas de trabajo.

En cuestiones de valores, A dice que el fin justifica los medios mientras que B cree que la mediatización deben ser la virtud. A sostiene que la espiritualidad viene de un ser supremo y desconocido mientras que B cree que está en nosotros mismos. A define a la juventud como una máquina de guerra; para B es una esperanza. Para A, la represión contra el narcotráfico es la solución mientras que para B es la regulación. A dice que la tauromaquia es una cultura, B dice que es crueldad. A sostiene que contradecir es fomentar el odio y la lucha de clases, mientras que B habla de generar cambios y vida.

A dice que el enfermo es un cliente mientras B habla de pacientes. Para A, la ideología de género consiste en quitar diferencias entre los roles entre hombres y mujeres, para B consiste en auscultar la verdad. A quiere apartar al Estado del desarrollo de la economía, B dice que debe ser el motor y guía. A cree que la captura y cooptación del Estado es una condición sine qua non para gobernar, B cree en el equilibrio de los poderes. A el alquimista, dice que los impuestos debenser indirectos y regresivos, B alega que deben ser progresivos y directos. A dice que la salud y la educación deben ser privadas, B cree lo contrario.

A cree que el sapiens es obra de la creación y que todo el poder viene de Dios que facilitó las monarquías y los imperios, B sostiene que el sapiens es producto de la evolución y/o de la panspermia. Para A los recursos de la naturaleza se deben explotar irracionalmente, para B hay que conservarlos. Este es el lenguaje, con contenido ideológicopolítico que emplean pares diferentes de la sociedad. Ojalá algún día existiera un lenguaje común.

Luis Napoleón de Armas P.