En entrevista concedida al periódico El Heraldo de Barranquilla, el ex alcalde de esa ciudad y nuevamente candidato Alejandro Char, acuñó la frase “el bogocentrismo” haciendo referencia a las disposiciones orientadoras organizadas desde la capital del país.

La discusión de los efectos del centralismo es asentida en todo momento, a menudo su origen se caracteriza por razones coyunturales por el afán de disimular la corresponsabilidad del rezago inherente a los indicadores socioeconómicos de la Región Caribe. No exagero al considerar que los debates son coyunturales, el otorgamiento del aval del partido Cambio Radical para Oneida Pinto es un ejemplo contundente.

El Índice de Competitividad Departamental de 2014 es la radiografía que nos muestra hasta donde llega la responsabilidad del centralismo y donde inicia la deuda de la dirigencia local. El Índice en referencia realiza mediciones en tres factores: 1) Condiciones Básicas que incluye seis pilares relacionados con: instituciones; infraestructura; tamaño del mercado; educación básica y media; salud; y medio ambiente, 2) Eficiencia incluye dos pilares: educación superior y capacitación, y eficiencia de los mercados 3) Sofisticación e innovación, incluye dos pilares que miden: la sofisticación y diversificación productiva, así como la innovación y la dinámica empresarial.

De acuerdo con el primer factor, La Guajira entre 21 departamentos y Bogotá, en su orden ocupó los lugares 20, 21, 9, 22, 22 y 20. En lo relativo al segundo factor los resultados fueron los siguientes, 20, 22 y 9, entre tanto, para el tercer factor quedó posicionada en los lugares 18, 16 y 22. Las cifras son frías y dicientes, estos resultados de alguna manera tienen que ver con el centralismo o bogocentrismo en los términos de Alejandro Char, sin embargo, no es menuda la responsabilidad de nuestra dirigencia.

El Índice de competitividad también analiza el comportamiento de los tres factores en los departamentos del Cesar, Bolívar, Sucre, Magdalena y Córdoba, en el primer factor nuestro departamento se ubica entre el puesto 14 y 18, en el segundo, entre el puesto 16 y 21 y en el tercero entre el puesto 17 y 20. La tendencia posicional es similar en los otros departamentos del Caribe, aunque Bolívar presenta un margen diferencial aceptable en algunos pilares. http://www.urosario.edu.co/competitividad/documentos/IDC-2014/ en este link pueden encontrar el informe, en el podrán ver la prosperidad del Departamento del Atlántico, este avance le concede a Barranquilla la consideración de ser la ciudad colombiana de mejor proyección y una de las de mejor prospectiva en Latinoamérica.

La economía triangular de la Región Andina es una locomotora con mucho frenesí, no obstante, los puertos y la perspectiva comercial sobre el Océano Pacifico, necesariamente debe coadyuvar en romper ese modelo depreciado. El Caribe Colombiano privilegiado por la riqueza natural y ubicación geográfica, requiere cambiar la concepción mental de su dirigencia y su gente, a partir de la utilización de nuestras similitudes, apropiación de la autonomía territorial y económica establecidas constitucionalmente, con fundamento en el aprovechamiento de las ventajas comparativas, para iniciar a cambiar el paradigma que inhibe el desarrollo de estrategia regional por la infatigable incursión del centralismo o bogocentrismo y naturalmente por la falta de liderazgo en nuestra región.