La elección del excontralor Delwin Jiménez como nuevo director del Área Metropolitana de Valledupar es la oportunidad para hablar del ostracismo en el que ha caído esta importante entidad en los últimos años. Poco o nada se sabe de su gestión. Y no fue por falta de comunicación.
La elección del excontralor Delwin Jiménez como nuevo director del Área Metropolitana de Valledupar es la oportunidad para hablar del ostracismo en el que ha caído esta importante entidad en los últimos años. Poco o nada se sabe de su gestión. Y no fue por falta de comunicación.
El Área Metropolitana la integran Valledupar, La Paz, San Diego, Manaure y Agustín Codazzi. Por falta voluntad, de competencia o porque están centrados cada uno en solucionar los problemas de su municipio, poco o nada se ha avanzado en la integración, aunque se haya elaborado un Plan Metropolitano de Ordenamiento Territorial, PEMOT, de mayor jerarquía que los municipales, el cual debe darse a conocer.
Pero si no conocemos bien el POT de Valledupar, mucho menos se sabe qué es ese plan. Eso en lo político- administrativo. La integración económica se circunscribe al actual intercambio resultado del mercado movido por individuos y empresas y la cercanía entre los municipios.
No hay transporte alrededor de la sede de la Universidad Nacional en La Paz —una universidad metropolitana por su localización—. Eso por decir un punto que ha sido reciente noticia por la terminación de la primera calzada de la Avenida Metropolitana que une a Valledupar y La Paz.
El Área Metropolitana de Bucaramanga, para relacionar una cercana, nos lleva años luz, como dicen popularmente. Además de transporte público de conexión, ya tienen empresas de servicios públicos conjuntas.
Hay cosas que abordar desde una perspectiva e integralidad metropolitana: el transporte y las vías son ejes estructuradores, como se ha mencionado atrás; los temas de conurbación y de servicios públicos: en el futuro se unirán las viviendas de Valledupar y La Paz, se podrán conectar los acueductos y un embalse como el que se ha proyectado arriba de la capital podrá servir de reserva hídrica estratégica también a La Paz y San Diego; los temas ambientales —incluso en el PEMOT se proyecta un parque metropolitano de protección—, la nueva PTAR de Valledupar es un proyecto metropolitano (a propósito en qué quedó un contrato de arborización que se le dio al Área en la pasada administración), los rellenos sanitarios y manejo de basuras podrían ser compartidos, una escombrera en el sur de Valledupar podría servir para los residuos de construcción y demolición, RCD, de los municipios; la seguridad, con el establecimiento de la sede y la oficialidad de la Policía Metropolitana y su interconexión vial a municipios metropolitanos; los programas de bomberos, entre otros frentes que se les puede dar alcance metropolitano. En el mediano plazo, el anillo guajiro -La Jagua, Villanueva, El Molino, San Juan y Urumita- se podrá incorporar al Área Metropolitana, como lo ha propuesto este diario.
Esperamos que el nuevo director sepa convertirse en un gestor insistente ante los ocupados alcaldes para que se integren y contribuyan según sus capacidades a la entidad y ésta les devuelva servicios y asistencia. No es lo mismo llegar solo que acompañado de otros cuatro mandatarios. Se requiere menos política, más transparencia, más coordinación técnica.
La elección del excontralor Delwin Jiménez como nuevo director del Área Metropolitana de Valledupar es la oportunidad para hablar del ostracismo en el que ha caído esta importante entidad en los últimos años. Poco o nada se sabe de su gestión. Y no fue por falta de comunicación.
La elección del excontralor Delwin Jiménez como nuevo director del Área Metropolitana de Valledupar es la oportunidad para hablar del ostracismo en el que ha caído esta importante entidad en los últimos años. Poco o nada se sabe de su gestión. Y no fue por falta de comunicación.
El Área Metropolitana la integran Valledupar, La Paz, San Diego, Manaure y Agustín Codazzi. Por falta voluntad, de competencia o porque están centrados cada uno en solucionar los problemas de su municipio, poco o nada se ha avanzado en la integración, aunque se haya elaborado un Plan Metropolitano de Ordenamiento Territorial, PEMOT, de mayor jerarquía que los municipales, el cual debe darse a conocer.
Pero si no conocemos bien el POT de Valledupar, mucho menos se sabe qué es ese plan. Eso en lo político- administrativo. La integración económica se circunscribe al actual intercambio resultado del mercado movido por individuos y empresas y la cercanía entre los municipios.
No hay transporte alrededor de la sede de la Universidad Nacional en La Paz —una universidad metropolitana por su localización—. Eso por decir un punto que ha sido reciente noticia por la terminación de la primera calzada de la Avenida Metropolitana que une a Valledupar y La Paz.
El Área Metropolitana de Bucaramanga, para relacionar una cercana, nos lleva años luz, como dicen popularmente. Además de transporte público de conexión, ya tienen empresas de servicios públicos conjuntas.
Hay cosas que abordar desde una perspectiva e integralidad metropolitana: el transporte y las vías son ejes estructuradores, como se ha mencionado atrás; los temas de conurbación y de servicios públicos: en el futuro se unirán las viviendas de Valledupar y La Paz, se podrán conectar los acueductos y un embalse como el que se ha proyectado arriba de la capital podrá servir de reserva hídrica estratégica también a La Paz y San Diego; los temas ambientales —incluso en el PEMOT se proyecta un parque metropolitano de protección—, la nueva PTAR de Valledupar es un proyecto metropolitano (a propósito en qué quedó un contrato de arborización que se le dio al Área en la pasada administración), los rellenos sanitarios y manejo de basuras podrían ser compartidos, una escombrera en el sur de Valledupar podría servir para los residuos de construcción y demolición, RCD, de los municipios; la seguridad, con el establecimiento de la sede y la oficialidad de la Policía Metropolitana y su interconexión vial a municipios metropolitanos; los programas de bomberos, entre otros frentes que se les puede dar alcance metropolitano. En el mediano plazo, el anillo guajiro -La Jagua, Villanueva, El Molino, San Juan y Urumita- se podrá incorporar al Área Metropolitana, como lo ha propuesto este diario.
Esperamos que el nuevo director sepa convertirse en un gestor insistente ante los ocupados alcaldes para que se integren y contribuyan según sus capacidades a la entidad y ésta les devuelva servicios y asistencia. No es lo mismo llegar solo que acompañado de otros cuatro mandatarios. Se requiere menos política, más transparencia, más coordinación técnica.