Las rendiciones de cuentas en el Cesar iniciaron como iniciativa del Comité de Seguimiento a las Regalías, sin obligación legal, en el 2004. Hoy son de los buenos instrumentos que tienen los mandatarios,  y mejor aún los ciudadanos,  para conocer detalles de la ejecución de los planes de desarrollo municipal o departamental  y hacerle seguimiento a las inversiones de los dineros públicos que, en realidad por un camino u otro, no provienen de fuente diferente que de la actividad privada, de los propios ciudadanos. 

Ayer el alcalde Mello Castro Gonzáles se estrenó, se movió exhibiendo seguridad y manejo, y usó lentes, dando aire de mayor veteranía; un buen evento, buen escenario en uno de los lindos parques, el de los algarrobillos, dándole vitrina al sur de la ciudad.

Usó  un formato que permitió a los secretarios de cada área explicar de manera ágil las inversiones en su sectorial y empezó con el secretario de Hacienda, responsable de  todos los  ingresos municipales, reportando en  el 2020 la suma de $781.000 millones  frente  a $787 mil millones en el 2019,  lo que en un año de pandemia por covid-19 es solo el 0.76% menos, resaltando la necesaria confianza  en la administración, que  disminuyó en  $1.700 millones los gastos de funcionamiento en el periodo, bueno en la administración pública que poco defiende la  austeridad del gasto.

Hoy, mostró el secretario, los contribuyentes tienen incentivos para pagar impuestos: hay sistema de tributación simple, hay mejor tasa de delineación urbana, incentivos por pronto pago de predial y uso de modo virtual. Se  liberaron renegociando con los acreedores de la Ley 550 alrededor de $6.000 millones para inversión  en educación, salud, seguridad, infraestructura…

El tema salud exhibe los mejores indicadores, pues el municipio ha logrado, en el año de pandemia,  sortear mejor que otras ciudades intermedias de la costa el grave virus; ha invertido ingentes recursos y esperamos no sucumba todo el esfuerzo realizado; no se  debe bajar la guardia. 

Ha iniciado la Alcaldía  la fase de la vacunación y de reactivación económica, hermanos siameses, de manera profesional, con el concurso en los dos frentes de datos, estadísticas y  de expertos. Reactivación es empleo y todo indica que las promesas  del alcalde, muy frenadas por la imprevista pandemia, no se han olvidado. 

Desde el periódico haremos seguimiento a las ejecuciones municipales siempre buscando que la comunidad esté enterada de primera mano y pueda beneficiarse de ellas de la mejor manera. La comunidad tiene también el gran compromiso de cuidar la inversión pública como propia. 

Esperamos que iniciando Valledupar, a través de su alcalde dando ejemplo, sigan los demás alcaldes de los  municipios del departamento rindiendo cuentas a su gente. También lo hará hoy el gobernador Monsalvo. 

En fin, lo importante del ejercicio  es que sirva para que  los ciudadanos se apoderen de las inversiones y se empoderen de su control, exigiendo obras  pertinentes, de calidad  y sostenibles en el tiempo.