Después de unas merecidas vacaciones, regresamos con todos los bríos y la energía necesaria para conversar sobre la riqueza más grande que tenemos los vallenatos: nuestra música folclórica. El folclor vallenato ha pasado por diversas facetas, temporadas y olas, es así como recordamos el surgir de los juglares o músicos completos, época en la cual […]
Después de unas merecidas vacaciones, regresamos con todos los bríos y la energía necesaria para conversar sobre la riqueza más grande que tenemos los vallenatos: nuestra música folclórica.
El folclor vallenato ha pasado por diversas facetas, temporadas y olas, es así como recordamos el surgir de los juglares o músicos completos, época en la cual el acordeonero fungía como líder y protagonista único, en ocasiones sólo con su acordeón al pecho, y en otras, se hacía acompañar de un cajero y un guacharaquero.
Sin duda alguna, entre los más mencionados y reconocidos de esa era tenemos a: José León Carrillo, Juan Muñoz, Francisco Moscote, Eusebio Ayala, Francisco ‘Pacho’ Rada, Sebastián Guerra y ‘Chico’ Bolaños, por solo mencionar algunos.
Estos primeros juglares interpretaban el vallenato incipiente, ese al que aún ni se le había bautizado, y lo hacían sin mayores pretensiones, ni mucho menos, ambiciones de que se convirtiera en un género musical. Hablamos de las postrimerías del siglo XIX y los albores del siglo XX; después vendrían otros músicos, también empíricos, pero ya con mayores destrezas, como Abel Antonio Villa, Luis Enrique Martínez, Alejandro Durán, Emiliano Zuleta Baquero, Lorenzo Morales, ‘Juancho’ Polo Valencia, y posteriormente, la época dorada de esta música con acordeoneros como Calixto Ochoa Campo, Nicolás ‘Colacho’ Mendoza, Alfredo Gutiérrez y Miguel López, también sólo a título enunciativo, ya en la segunda mitad del siglo pasado.
La principal característica de estos juglares en sus inicios era que ellos lideraban la agrupación o conjunto de músicos, y también llevaban la vocería, mientras que los demás integrantes eran acompañantes y nada más.
Hubo una época corta en la que se trató de implementar el conjunto vallenato de forma parecida a las orquestas, en las que el liderazgo se diluía y los músicos se veían en un plano de igualdad, luego llegó la era del liderazgo compartido entre cantante y acordeonero, y posteriormente, el vocalista le tomó ventaja al músico completo y asumió la batuta.
Desde la década anterior se viene levantando un movimiento, de buenas proporciones, que hace pensar en un resurgir del liderazgo de los acordeoneros, y es así como algunos siguen el camino de Israel Romero, Omar Geles y Juan Mario De la Espriella, quienes son líderes naturales y jalonan esta nueva ola que ya integran ‘El Morre’ Romero y Gregorio ‘Goyo’ Oviedo, entre otros.
Hay que reconocer que el proyecto de Silvestre Dangond, denominado ‘Entre Grandes’, le hace un aporte importante a esta nueva etapa en la que los acordeoneros quieren retomar el liderazgo. Es muy plausible que este gran artista les muestre a los amantes de este género cuáles son los mejores ejecutantes del acordeón en Colombia; así es como ahora podemos deleitarnos en vivo con la nota de Emilianito Zuleta, Julián Rojas, Iván Zuleta, Beto Villa, Franco Arguelles, Álvaro López, Gonzalo ‘El Cocha’ Molina, Omar Geles y Víctor Reyes.
COLOFÓN: En esta nueva ola de juglares modernos se viene mostrando la figura de un joven vallenato que tiene impresionados a propios y extraños con su acordeón, su voz y su estilo. Se trata de Santiago Rafael Fontalvo Vásquez, más conocido como Santos Rafael, quien está dando de qué hablar al seguir el camino musical de Alfredo, Calixto y Aníbal.
Después de unas merecidas vacaciones, regresamos con todos los bríos y la energía necesaria para conversar sobre la riqueza más grande que tenemos los vallenatos: nuestra música folclórica. El folclor vallenato ha pasado por diversas facetas, temporadas y olas, es así como recordamos el surgir de los juglares o músicos completos, época en la cual […]
Después de unas merecidas vacaciones, regresamos con todos los bríos y la energía necesaria para conversar sobre la riqueza más grande que tenemos los vallenatos: nuestra música folclórica.
El folclor vallenato ha pasado por diversas facetas, temporadas y olas, es así como recordamos el surgir de los juglares o músicos completos, época en la cual el acordeonero fungía como líder y protagonista único, en ocasiones sólo con su acordeón al pecho, y en otras, se hacía acompañar de un cajero y un guacharaquero.
Sin duda alguna, entre los más mencionados y reconocidos de esa era tenemos a: José León Carrillo, Juan Muñoz, Francisco Moscote, Eusebio Ayala, Francisco ‘Pacho’ Rada, Sebastián Guerra y ‘Chico’ Bolaños, por solo mencionar algunos.
Estos primeros juglares interpretaban el vallenato incipiente, ese al que aún ni se le había bautizado, y lo hacían sin mayores pretensiones, ni mucho menos, ambiciones de que se convirtiera en un género musical. Hablamos de las postrimerías del siglo XIX y los albores del siglo XX; después vendrían otros músicos, también empíricos, pero ya con mayores destrezas, como Abel Antonio Villa, Luis Enrique Martínez, Alejandro Durán, Emiliano Zuleta Baquero, Lorenzo Morales, ‘Juancho’ Polo Valencia, y posteriormente, la época dorada de esta música con acordeoneros como Calixto Ochoa Campo, Nicolás ‘Colacho’ Mendoza, Alfredo Gutiérrez y Miguel López, también sólo a título enunciativo, ya en la segunda mitad del siglo pasado.
La principal característica de estos juglares en sus inicios era que ellos lideraban la agrupación o conjunto de músicos, y también llevaban la vocería, mientras que los demás integrantes eran acompañantes y nada más.
Hubo una época corta en la que se trató de implementar el conjunto vallenato de forma parecida a las orquestas, en las que el liderazgo se diluía y los músicos se veían en un plano de igualdad, luego llegó la era del liderazgo compartido entre cantante y acordeonero, y posteriormente, el vocalista le tomó ventaja al músico completo y asumió la batuta.
Desde la década anterior se viene levantando un movimiento, de buenas proporciones, que hace pensar en un resurgir del liderazgo de los acordeoneros, y es así como algunos siguen el camino de Israel Romero, Omar Geles y Juan Mario De la Espriella, quienes son líderes naturales y jalonan esta nueva ola que ya integran ‘El Morre’ Romero y Gregorio ‘Goyo’ Oviedo, entre otros.
Hay que reconocer que el proyecto de Silvestre Dangond, denominado ‘Entre Grandes’, le hace un aporte importante a esta nueva etapa en la que los acordeoneros quieren retomar el liderazgo. Es muy plausible que este gran artista les muestre a los amantes de este género cuáles son los mejores ejecutantes del acordeón en Colombia; así es como ahora podemos deleitarnos en vivo con la nota de Emilianito Zuleta, Julián Rojas, Iván Zuleta, Beto Villa, Franco Arguelles, Álvaro López, Gonzalo ‘El Cocha’ Molina, Omar Geles y Víctor Reyes.
COLOFÓN: En esta nueva ola de juglares modernos se viene mostrando la figura de un joven vallenato que tiene impresionados a propios y extraños con su acordeón, su voz y su estilo. Se trata de Santiago Rafael Fontalvo Vásquez, más conocido como Santos Rafael, quien está dando de qué hablar al seguir el camino musical de Alfredo, Calixto y Aníbal.