Con 27,2% y 33 % de imagen favorable del presidente Iván Duque Márquez marcaron los sondeos de Invamer y Polimétrica, respectivamente, los que sugieren que se estaría rajando el mandatario en su primer semestre de gobierno.

Aunque cinco días después de esas mediciones, apareció un nuevo sondeo con 48,5 % de la empresa Guarumo, esa alza en la favorabilidad genera cierta sospecha, pero en realidad quisiéramos que fuera cierta. ¿En qué sentido? Si al presidente le va bien en su gestión a Colombia también, por lo que esperamos que el mandatario y su equipo de ministros encuentren las fórmulas que permitan equilibrar las finanzas del país, sin desequilibrar la de la clase media, que sería la más impactada con el proyecto de ley de financiamiento.

Luego del debate sobre la imposición de IVA a varios productos de la canasta familiar, uno de los temas que más está afectando la imagen de Duque son las protestas de los estudiantes de la educación superior; dos problemas que se resuelven con plata y por ello tiene mucho protagonismo el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla.

Por fortuna ya se ha establecido una mesa de diálogo, con rupturas, pero hay un avance. El objetivo de dicha mesa por la educación es alcanzar un acuerdo que ponga cese definitivo al paro estudiantil que ya lleva casi dos meses en las principales universidades públicas del país.

Una de las principales reclamaciones de los líderes estudiantiles era contar con la presencia del ministro de Hacienda y Crédito Público, quien ha acompañado la mesa de diálogo para la construcción de acuerdos y soluciones que permitan resolver la situación actual de la educación superior.

Carrasquilla debe seguir haciendo la tarea de escuchar propuestas, responder preguntas, aclarar cifras y formar parte de esta importante conversación para ayudar a resolver el problema de fondo y de paso ayudar a la imagen de Duque, a quien los críticos no le perdonan un rato de recreo con sus artistas favoritos.

Una de las tareas cumplidas por Carrasquilla fue aclarar las cifras presupuestales ante la inquietud formulada sobre la existencia, para 2018, de $57.1 billones del Presupuesto General de la Nación que estarían disponibles sin un uso específico. Minhacienda precisó que los $57.1 billones que, a 31 de octubre de 2018, se encontraban aún sin comprometer, tienen usos ciertos y específicos ya previstos en la Ley de Presupuesto y se destinarán para cumplir las obligaciones relacionadas con los gastos de personal, gastos generales, y transferencias de la Nación, como pensiones, Sistema General de Participaciones –SGP- (incluyendo el componente de educación) y las prestaciones sociales del magisterio. Asimismo, precisó que otra parte de estos recursos se destinará a atender el servicio de la deuda externa e interna, el pago de los programas sociales y la financiación de la implementación del programa de paz y posconflicto.

Además, los ministerios de Hacienda y de Educación Nacional han realizado propuestas que aumentan la base presupuestal y fortalecen las instituciones públicas de educación superior. Sin embargo, un grueso número de estudiantes que lideran las protestas no creen en el Gobierno y mantienen las universidades públicas paralizadas.