“Yo salí de la sala de juntas hacia el baño, cuando estoy ahí se me presenta el doctor Iván Álvarez, y sin más acá y más allá, comienza a propinarme golpes en la cara junto con un hermano de él”, señaló el representante de los usuarios en la junta directiva del Hospital Rosario Pumarejo de […]
“Yo salí de la sala de juntas hacia el baño, cuando estoy ahí se me presenta el doctor Iván Álvarez, y sin más acá y más allá, comienza a propinarme golpes en la cara junto con un hermano de él”, señaló el representante de los usuarios en la junta directiva del Hospital Rosario Pumarejo de López en Valledupar, Kilman Morris, sobre los hechos ocurridos el viernes en el centro asistencial.
Morris indicó que denunció ante la Fiscalía a Iván Álvarez, médico pediatra, también integrante de la junta, porque este supuestamente lo golpeó, al punto de afectarle la mandíbula.
En la reunión de la junta directiva en la que estuvieron presentes el secretario de gobierno departamental, Raúl Maya Pabón; la secretaria de Salud del Cesar, Erika Mendoza; Frank Buendía, representantes de los científicos internos; Jaimer Maestre, representante de los gremios de producción; Iván Álvarez en representación de los científicos externos; y Kilman Morris.
El afectado señaló que las únicas diferencias que tuvo con Álvarez fue porque estaba en desacuerdo con la aprobación de un acta para escoger al revisor fiscal del hospital y eso generó una discusión.
“Yo grité auxilio y así llegó el cuerpo de seguridad del centro asistencial, me sacaron del baño con los pantalones abajo. No he tenido problemas personales con él, hemos tenido diferencia en la Junta Directiva respecto a las decisiones…”, contó Morris a EL PILÓN.
El representante de los usuarios del hospital dijo que instauró una denuncia en la Fiscalía por lesiones personales. “Temo por mi vida, si algo me pasa será el doctor Iván Álvarez y a su familia”, dijo.
Morris explicó que por los golpes fue valorado por médicos del mismo Rosario Pumarejo y el trauma que sufrió en el rostro lo dejó con 10 días de incapacidad.
“Tengo medida de protección policial, me valoró Medicina Legal y el resumen es que este fue un acto muy bochornoso al atentar contra la integridad física de un miembro junta de una institución tan prestigiosa como lo es el hospital Rosario Pumarejo”, declaró Kilman Morris.
Este medio intentó comunicarse con el médico Iván Álvarez pero no respondió las llamadas realizadas a su teléfono celular.
Por Carlos Mario Jiménez / EL PILÓN
[email protected]
“Yo salí de la sala de juntas hacia el baño, cuando estoy ahí se me presenta el doctor Iván Álvarez, y sin más acá y más allá, comienza a propinarme golpes en la cara junto con un hermano de él”, señaló el representante de los usuarios en la junta directiva del Hospital Rosario Pumarejo de […]
“Yo salí de la sala de juntas hacia el baño, cuando estoy ahí se me presenta el doctor Iván Álvarez, y sin más acá y más allá, comienza a propinarme golpes en la cara junto con un hermano de él”, señaló el representante de los usuarios en la junta directiva del Hospital Rosario Pumarejo de López en Valledupar, Kilman Morris, sobre los hechos ocurridos el viernes en el centro asistencial.
Morris indicó que denunció ante la Fiscalía a Iván Álvarez, médico pediatra, también integrante de la junta, porque este supuestamente lo golpeó, al punto de afectarle la mandíbula.
En la reunión de la junta directiva en la que estuvieron presentes el secretario de gobierno departamental, Raúl Maya Pabón; la secretaria de Salud del Cesar, Erika Mendoza; Frank Buendía, representantes de los científicos internos; Jaimer Maestre, representante de los gremios de producción; Iván Álvarez en representación de los científicos externos; y Kilman Morris.
El afectado señaló que las únicas diferencias que tuvo con Álvarez fue porque estaba en desacuerdo con la aprobación de un acta para escoger al revisor fiscal del hospital y eso generó una discusión.
“Yo grité auxilio y así llegó el cuerpo de seguridad del centro asistencial, me sacaron del baño con los pantalones abajo. No he tenido problemas personales con él, hemos tenido diferencia en la Junta Directiva respecto a las decisiones…”, contó Morris a EL PILÓN.
El representante de los usuarios del hospital dijo que instauró una denuncia en la Fiscalía por lesiones personales. “Temo por mi vida, si algo me pasa será el doctor Iván Álvarez y a su familia”, dijo.
Morris explicó que por los golpes fue valorado por médicos del mismo Rosario Pumarejo y el trauma que sufrió en el rostro lo dejó con 10 días de incapacidad.
“Tengo medida de protección policial, me valoró Medicina Legal y el resumen es que este fue un acto muy bochornoso al atentar contra la integridad física de un miembro junta de una institución tan prestigiosa como lo es el hospital Rosario Pumarejo”, declaró Kilman Morris.
Este medio intentó comunicarse con el médico Iván Álvarez pero no respondió las llamadas realizadas a su teléfono celular.
Por Carlos Mario Jiménez / EL PILÓN
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