Publicidad
Categorías
Categorías
Columnista - 6 abril, 2010

Del acuerdo humanitario

ENTRE OTRAS COSAS…. Por: Dario Arregoces La liberación del Soldado Profesional Josué Daniel Calvo Sánchez y del Sargento Pablo Emilio Moncayo Cabrera, que contó con la mediación del gobierno del presidente Lula, de la Cruz Roja Internacional y de la Iglesia, cerró un capítulo más,  de un largo y tortuoso conflicto armado, que no repara […]

Boton Wpp

ENTRE OTRAS COSAS….

Por: Dario Arregoces

La liberación del Soldado Profesional Josué Daniel Calvo Sánchez y del Sargento Pablo Emilio Moncayo Cabrera, que contó con la mediación del gobierno del presidente Lula, de la Cruz Roja Internacional y de la Iglesia, cerró un capítulo más,  de un largo y tortuoso conflicto armado, que no repara en consideraciones humanitarias para secuestrar cuando no ejecutar a personas  y  que reivindica estos actos como “armas” de guerra.
Atrocidades de lado y lado dejan un saldo de sangre y dolor en una Colombia señalada internacionalmente por tener en su suelo el flagelo de la guerrilla y el narcotráfico.
Con las liberaciones de Calvo y Moncayo, se abre la posibilidad de llegar a un Acuerdo Humanitario, también llamado Intercambio Humanitario o Canje Humanitario, que daría lugar a las liberaciones de  guerrilleros presos, de una parte, y de  militares secuestrados, de la otra.
En el comunicado enviado por las FARC-E.P. se deja claro que no están dispuestos a realizar más liberaciones unilaterales, y expresan su interés en un Acuerdo Humanitario que incluya la liberación de  Ricardo Palmera alias Simón Trinidad y de la guerrillera Sonia, quienes fueron extraditados a los Estados Unidos.
Para ser honesto, veo muy remota la posibilidad de que a través del Canje Humanitario, se consiga la libertad de Simón Trinidad y de Sonia, entre otras razones porque nuestro presidente Uribe,  no está interesado en acceder a ello, más cuando está a pocos meses de concluir su mandato.
Asimismo, pienso que el rescate militar  no garantiza la vida de los secuestrados No obstante ha dicho el Gobierno que el Acuerdo Humanitario es viable siempre y cuando los liberados abandonen su actividad subversiva. Por su parte, las FARC insisten en el despeje de los municipios de Florida y Pradera  (Valle del Cauca) por un lapso de cuarenta y cinco días, convirtiéndose lo anterior en una propuesta inaceptable para el Gobierno de Uribe, quien ha reiterado que no habrán más despejes y que solo se ordenará la suspensión de operaciones militares, como ocurrió con la liberación de Calvo y Moncayo.
Mientras se abre paso el Acuerdo Humanitario, es bueno  solidarizarse con las humildes familias colombianas que sufren el terrible e inhumano secuestro de sus seres queridos y ven como se alarga indefinidamente su cautiverio en condiciones atroces, sin que al parecer se vislumbre una luz de esperanza.

[email protected]

Columnista
6 abril, 2010

Del acuerdo humanitario

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Dario Arregoces

ENTRE OTRAS COSAS…. Por: Dario Arregoces La liberación del Soldado Profesional Josué Daniel Calvo Sánchez y del Sargento Pablo Emilio Moncayo Cabrera, que contó con la mediación del gobierno del presidente Lula, de la Cruz Roja Internacional y de la Iglesia, cerró un capítulo más,  de un largo y tortuoso conflicto armado, que no repara […]


ENTRE OTRAS COSAS….

Por: Dario Arregoces

La liberación del Soldado Profesional Josué Daniel Calvo Sánchez y del Sargento Pablo Emilio Moncayo Cabrera, que contó con la mediación del gobierno del presidente Lula, de la Cruz Roja Internacional y de la Iglesia, cerró un capítulo más,  de un largo y tortuoso conflicto armado, que no repara en consideraciones humanitarias para secuestrar cuando no ejecutar a personas  y  que reivindica estos actos como “armas” de guerra.
Atrocidades de lado y lado dejan un saldo de sangre y dolor en una Colombia señalada internacionalmente por tener en su suelo el flagelo de la guerrilla y el narcotráfico.
Con las liberaciones de Calvo y Moncayo, se abre la posibilidad de llegar a un Acuerdo Humanitario, también llamado Intercambio Humanitario o Canje Humanitario, que daría lugar a las liberaciones de  guerrilleros presos, de una parte, y de  militares secuestrados, de la otra.
En el comunicado enviado por las FARC-E.P. se deja claro que no están dispuestos a realizar más liberaciones unilaterales, y expresan su interés en un Acuerdo Humanitario que incluya la liberación de  Ricardo Palmera alias Simón Trinidad y de la guerrillera Sonia, quienes fueron extraditados a los Estados Unidos.
Para ser honesto, veo muy remota la posibilidad de que a través del Canje Humanitario, se consiga la libertad de Simón Trinidad y de Sonia, entre otras razones porque nuestro presidente Uribe,  no está interesado en acceder a ello, más cuando está a pocos meses de concluir su mandato.
Asimismo, pienso que el rescate militar  no garantiza la vida de los secuestrados No obstante ha dicho el Gobierno que el Acuerdo Humanitario es viable siempre y cuando los liberados abandonen su actividad subversiva. Por su parte, las FARC insisten en el despeje de los municipios de Florida y Pradera  (Valle del Cauca) por un lapso de cuarenta y cinco días, convirtiéndose lo anterior en una propuesta inaceptable para el Gobierno de Uribe, quien ha reiterado que no habrán más despejes y que solo se ordenará la suspensión de operaciones militares, como ocurrió con la liberación de Calvo y Moncayo.
Mientras se abre paso el Acuerdo Humanitario, es bueno  solidarizarse con las humildes familias colombianas que sufren el terrible e inhumano secuestro de sus seres queridos y ven como se alarga indefinidamente su cautiverio en condiciones atroces, sin que al parecer se vislumbre una luz de esperanza.

[email protected]