La comunidad del municipio de Codazzi, Cesar, sigue haciendo frente a los estragos que se produjeron a raíz de las fuertes lluvias que se presentaron desde la noche del pasado viernes hasta la madrugada de este domingo y producto de las cuales se vieron afectadas alrededor de 400 familias en cinco barrios de esta población.

Para esto, y tras la reunión del Consejo Municipal de Gestión del Riesgo, fue decretada la calamidad pública para acceder a recursos del Gobierno Nacional que permitan gestionar otras ayudas para los afectados por las inundaciones de sus viviendas.

De acuerdo con la jefe de la Oficina Departamental para la Gestión del Riesgo y Cambio Climático, María José Páez, según como se tramite la documentación, estiman que dentro de los próximos tres días esté llegando dicha asistencia.

LAS AYUDAS

Hasta el momento, se refirió Páez, en la noche del sábado hicieron entrega de unas carpas para que las personas a las cuales se les cayeron sus viviendas pudieran dormir. A esto se sumó la entrega de colchonetas y mercados a los afectados en el transcurso de este domingo.

Por su parte el alcalde (e) de este municipio, Ricardo Fernández Urbina, entregó un balance de la situación según el cual, a raíz de la creciente súbita de aproximadamente 200 milímetros que se presentó, hay 50 casas afectadas y de estas, 31 viviendas inhabitables; 30 de ellas en el barrio El Tiburón, con una topografía que influyó en que se represara el agua, y una en el sector de Villa Luz.

“Nos viene otro problema porque son barrios subnormales, son invasiones, entonces nos va a quedar un poco complicado la reparación de esas viviendas, ahí no podemos hacer nada, ningún ente estatal puede invertir recursos en barrios subnormales. De todas maneras vamos a tratar de ver cómo logramos una reubicación, que también desde el punto de vista financiero es un poco complicado teniendo en cuenta la situación por la que atraviesa el municipio”, explicó Fernández Urbina.

Sin embargo, hizo referencia a que por el momento se han ayudado con las mencionadas carpas, también se les ha suministrado agua potable y mercados en los sectores afectados y que hasta ahora algunos perjudicados se han reubicado en las casas de otros familiares.

“Vamos a hacer una brigada de salud para atender a todos los niños, adultos mayores, personas que tengan algún cuadro propio del invierno porque se vino una ola invernal de tres días atrás y hemos tenido una influencia de lluvia bastante alta”, agregó el mandatario, quien se mostró preocupado con relación a la reubicación de esta comunidad, algo que consideró difícil.

Entre tanto, se mostró optimista de que no se vuelvan a presentar lluvias de esta envergadura aunque mantienen la alerta porque es posible que sigan las precipitaciones.

Precisamente en este sentido la jefe de la Oficina de Gestión del Riesgo, reiteró el llamado a los alcaldes de los diferentes municipios del Cesar para que tengan en cuenta que hasta ahora está comenzando la segunda temporada de lluvias.

“Estas son las primeras lluvias como quien dice de gran intensidad, la temporada más fuerte la esperamos en octubre entonces hacemos un llamado a que mantengan activos sus Consejos Municipales de Gestión del Riesgo”, expresó Páez, quien invitó también a los mandatarios a que tengan preparada toda la logística para los organismos de socorro y algunas ayudas humanitarias para entregarle a las personas de la manera más rápida posible cuando ocurran estos eventos.

A la par de estas entidades, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, llegó también este domingo a realizar una caracterización de la población afectada con las torrenciales lluvias. Al cierre de esta edición se registraba a dos niños afectados levemente y atendidos en salud, según informaron desde dicho ente.

Daniela Rincones Julio / EL PILÓN
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