Publicidad
Categorías
Categorías
Columnista - 30 septiembre, 2019

Cultura ciudadana en Valledupar

La comunidad residente del barrio Sicarare de la ciudad de Valledupar registró con emoción y complacencia el pasado viernes 13 de septiembre del presente año la entrega de la remodelación del parque Rojo, que a partir de esa fecha lleva por nombre parque Rafael Orozco, en homenaje al cantante vallenato que residió por varios años […]

La comunidad residente del barrio Sicarare de la ciudad de Valledupar registró con emoción y complacencia el pasado viernes 13 de septiembre del presente año la entrega de la remodelación del parque Rojo, que a partir de esa fecha lleva por nombre parque Rafael Orozco, en homenaje al cantante vallenato que residió por varios años en el mencionado barrio, de donde se dio a conocer en el mundo vallenato al realizar su primera producción musical en el año 1976, al lado de Emilio Oviedo, también residente del barrio Sicarare para esa época, a quien también se le hizo un merecido reconocimiento al colocarle a la tarima del parque su nombre.

Al acto inaugural del parque Rafael Orozco se hicieron presentes el alcalde municipal Augusto Ramirez Uhia, el gobernador del departamento del Cesar, Francisco Ovalle Angarita, el representante a la Cámara por el departamento del Cesar, Alfredo ‘Ape’ Cuello, integrantes de la Junta de Acción Comunal del barrio Sicarare presidida por Leandro Torres, integrantes de la Fundación Hijos del Sicarare y de la Fundación Deportiva la Bombonera del Sicarare, residentes del barrio, acto que fue amenizado por la agrupación musical los Juglares vallenatos y por el cantante Fabio Quiroz, nacido en el barrio Sicarare.

Desde esta columna, queremos darle nuestro sincero agradecimiento al alcalde Municipal Augusto Ramirez Uhia, por haber tenido en cuenta el barrio Sicarare para realizar la remodelación del parque Rojo, el cual se encontraba en un deplorable estado de abandono, dado que a nuestro barrio hacia mas de 30 años ninguna administración municipal lo había tenido en cuenta para realizar alguna obra en beneficio de la comunidad residente en ese sector.

Cabe resaltar que la remodelación del parque Rojo le cambió la cara urbanísticamente al sector donde se encuentra ubicado. La obra estuvo bien diseñada y ejecutada por la firma contratista encargada de su ejecución, lo que preocupa a la comunidad en general del barrio sicarare, es la falta de cultura ciudadana, si quienes nos beneficiamos directamente de dichas obras no las usamos correctamente, las conservamos, y respetamos los derechos de todos a su usufructo.

Por esto es tan importante cumplir las normas del buen uso del mobiliario público, utilizándolo con la misma responsabilidad y esmero con el que cuidamos el de nuestra casa.

Es cotidiano observar en los parques y zonas comunes de la ciudad de Valledupar la existencia de materia fecal de mascotas en los senderos peatonales, al ser casi nula la cultura de depositarlas en canecas. Esta incultura es tan grave que es frecuente observar perros defecando, al lado de sus dueños, cerca de letreros que invitan, justamente, a recogerlas.

Otra demostración de falta de cultura ciudadana en la ciudad de Valledupar es la movilidad, derivada del irrespeto a las señales de tránsito, el estacionamiento sobre las vías, la desatención a los guías de movilidad y los semáforos, la no utilización de los paraderos por parte de los conductores de vehículos de transporte público empeora la situación el inapropiado comportamiento de los motociclistas, ciclistas y peatones.

La cultura de la gente y su responsabilidad son determinantes en la construcción de la identidad de una ciudad, sin ellas es imposible lograr la sana convivencia y el respeto integral a los derechos de todos, por eso invito a todos los residentes de la ciudad de Valledupar y en especial los habitantes del Barrio sicarare a poner en práctica la cultura ciudadana, para un mejor vivir en comunidad y preservar las obras publicas.

Columnista
30 septiembre, 2019

Cultura ciudadana en Valledupar

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Enrique Aguancha Rivero

La comunidad residente del barrio Sicarare de la ciudad de Valledupar registró con emoción y complacencia el pasado viernes 13 de septiembre del presente año la entrega de la remodelación del parque Rojo, que a partir de esa fecha lleva por nombre parque Rafael Orozco, en homenaje al cantante vallenato que residió por varios años […]


La comunidad residente del barrio Sicarare de la ciudad de Valledupar registró con emoción y complacencia el pasado viernes 13 de septiembre del presente año la entrega de la remodelación del parque Rojo, que a partir de esa fecha lleva por nombre parque Rafael Orozco, en homenaje al cantante vallenato que residió por varios años en el mencionado barrio, de donde se dio a conocer en el mundo vallenato al realizar su primera producción musical en el año 1976, al lado de Emilio Oviedo, también residente del barrio Sicarare para esa época, a quien también se le hizo un merecido reconocimiento al colocarle a la tarima del parque su nombre.

Al acto inaugural del parque Rafael Orozco se hicieron presentes el alcalde municipal Augusto Ramirez Uhia, el gobernador del departamento del Cesar, Francisco Ovalle Angarita, el representante a la Cámara por el departamento del Cesar, Alfredo ‘Ape’ Cuello, integrantes de la Junta de Acción Comunal del barrio Sicarare presidida por Leandro Torres, integrantes de la Fundación Hijos del Sicarare y de la Fundación Deportiva la Bombonera del Sicarare, residentes del barrio, acto que fue amenizado por la agrupación musical los Juglares vallenatos y por el cantante Fabio Quiroz, nacido en el barrio Sicarare.

Desde esta columna, queremos darle nuestro sincero agradecimiento al alcalde Municipal Augusto Ramirez Uhia, por haber tenido en cuenta el barrio Sicarare para realizar la remodelación del parque Rojo, el cual se encontraba en un deplorable estado de abandono, dado que a nuestro barrio hacia mas de 30 años ninguna administración municipal lo había tenido en cuenta para realizar alguna obra en beneficio de la comunidad residente en ese sector.

Cabe resaltar que la remodelación del parque Rojo le cambió la cara urbanísticamente al sector donde se encuentra ubicado. La obra estuvo bien diseñada y ejecutada por la firma contratista encargada de su ejecución, lo que preocupa a la comunidad en general del barrio sicarare, es la falta de cultura ciudadana, si quienes nos beneficiamos directamente de dichas obras no las usamos correctamente, las conservamos, y respetamos los derechos de todos a su usufructo.

Por esto es tan importante cumplir las normas del buen uso del mobiliario público, utilizándolo con la misma responsabilidad y esmero con el que cuidamos el de nuestra casa.

Es cotidiano observar en los parques y zonas comunes de la ciudad de Valledupar la existencia de materia fecal de mascotas en los senderos peatonales, al ser casi nula la cultura de depositarlas en canecas. Esta incultura es tan grave que es frecuente observar perros defecando, al lado de sus dueños, cerca de letreros que invitan, justamente, a recogerlas.

Otra demostración de falta de cultura ciudadana en la ciudad de Valledupar es la movilidad, derivada del irrespeto a las señales de tránsito, el estacionamiento sobre las vías, la desatención a los guías de movilidad y los semáforos, la no utilización de los paraderos por parte de los conductores de vehículos de transporte público empeora la situación el inapropiado comportamiento de los motociclistas, ciclistas y peatones.

La cultura de la gente y su responsabilidad son determinantes en la construcción de la identidad de una ciudad, sin ellas es imposible lograr la sana convivencia y el respeto integral a los derechos de todos, por eso invito a todos los residentes de la ciudad de Valledupar y en especial los habitantes del Barrio sicarare a poner en práctica la cultura ciudadana, para un mejor vivir en comunidad y preservar las obras publicas.