Los deportistas de mejor rendimiento en el Cesar no están en casa. Patinadores, judocas y taekwondistas, han tenido que emigrar a otras tierras donde les dan lo necesario para seguir con sus carreras porque en este departamento no hay presupuesto para impulsar el deporte. También amenazan con fugarse, boxeadores y atletas.
Por Yolis Díaz Arrieta / EL PILÓN
[email protected]
Los deportistas de mejor rendimiento en el Cesar no están en casa. Patinadores, judocas y taekwondistas, han tenido que emigrar a otras tierras donde les dan lo necesario para seguir con sus carreras porque en este departamento no hay presupuesto para impulsar el deporte. También amenazan con fugarse, boxeadores y atletas.
La lanzadora de jabalina
Zuleima Aramendiz, nacida en el barrio Primero de Mayo se fue de Valledupar hace algunos años porque acá no tenía quien la apoyara. Todas sus medallas las ha obtenido con la liga de Antioquia, donde los paisas se sienten orgullosos cuando los representa a nivel mundial.
“Gracias a Dios que conté con apoyo en Antioquia, allí saqué también mi carrera universitaria, pero nunca olvido a mis paisanos”, dice desde Medellín Zuleima, quien ratifica que el apoyo que tiene el deporte en ese departamento se da por el interés que muestran sus gobernantes. “eso le da sentido de pertenencia a sus deportistas, ya sea que hayan nacido en su tierra o llevados de otros departamentos, ellos orgullosos gritan en los estadios, “Antioquia, Antioquia, Antioquia”, como señal de victoria.
En tierras paisas le dan al deportista todo lo que necesita: alimentación, hospedaje, sueldo, estudios, y entrenan con la mira en que compita en los campeonatos, mientras que en el Cesar se le pone a que participe.
Zuleima Aramendiz le entregó tres medallas de oro seguidas a Antioquia, en los Juegos Nacionales: del 96 en Bucaramanga, 2000 en Nariño y Boyacá y 2004 en Bogotá y Cundinamarca, además de una de plata en el 2008 en Cali y la de bronce el año pasado en las justas con sede en Popayán, Cúcuta y Montería.
A la judoca Yadinis Amaris Rocha le ocurre lo mismo en Santander, en donde la han apoyado e impulsado para que compita contra los mejores.
La decisión de irse de Cesar le sirvió para concentrarse en su carrera y, con el apoyo santandereano, logró un cupo a los Olímpicos de Londres en donde tuvo una aceptable presentación pese a que no ganó medallas. Esta joven ganó representando a Colombia en 2011 un oro en la copa mundo de Minsk, Bielorusia.
“Me tocó salir de Aguachica. En el Cesar fui varias veces Deportista del Año y sé que ellos me ayudaron en lo que pudieron, pero para llegar a lo alto tenía que salir. Le doy gracias a los dirigentes de Santander que me han apoyado en mi carrera”, dijo Yadinis Amaris, quien vive en Bucaramanga, pero que pasa vacaciones en su natal Aguachica, Cesar.
Patinan por otras tierras
Otro ejemplo del desinterés por el deporte es la patinadora Andrea Cañón, formada en el Club Midas de Valledupar; debió irse este año a representar al Club Kakiscur de Cartagena al que le acaba de dar una medalla de oro en un torneo nacional realizado en Tuluá. En ese mismo evento la vallenata Katiuska Mendoza, corrió para otro club de Cartagena.
“Aún no sé que va a pasar, he estado corriendo para un Club de Cartagena, esperando que me llamen del Cesar para informarme que me van a apoyar en mis estudios, con algún incentivo mensual, con los patines, con los viajes, pero no me han dicho nada”, dijo Katiuska.
Según Jeison Becerra, el entrenador de la Liga de Patinaje del Cesar, “lo que pasa es que el patinaje es un poco costoso y como algunos están dando resultado en las competencias nacionales, la falta de incentivo crea desinterés entre los practicantes, entonces los que tienen mejor suerte se van a otros departamentos”.
Ante la falta de apoyo, con Becerra coincide el presidente de la Liga de Patinaje departamental, Gustavo Galvis, quien asegura que ellos presentaron un proyecto a la Secretaría del Deporte de Cesar, y hasta la hora “allí no ha pasado nada”.
Galvis sabe que el esfuerzo lo han hecho los padres de los deportistas, quienes desde Valledupar trabajan para enviarles dinero y puedan continuar con sus carreras.
No lo valoraron
John Ochoa tiene un problema en Cali, le robaron una bicicleta prestada para sus entrenamientos matinales, los que alterna con la práctica del patinaje, y ahora debe buscar 950 mil pesos para pagársela al dueño. Este deportista quien ganó medalla de plata en el patinaje de los Juegos Nacionales del 2012 se fue del Cesar porque no encontró apoyo para seguir entrenando.
En enero, este joven de 18 años, había dicho, llorando, en Valledupar que nadie había valorado lo que consiguió en los Juegos Nacionales de Cúcuta de 2012, en un deporte donde reinan deportistas del Valle, Bogotá, Antioquia y Bolívar.
“Lo único que le dio la Gobernación fue un par de patines que usó en Cúcuta, nunca le hicieron un reconocimiento, tampoco le han dado los incentivos por la medalla ganada”, dice Álvaro, su padre, quien junto a su esposa vende ‘bolis’ en el Patinódromo de esta ciudad para ayudar con el sustento de Jhon quien acaba de sorprender al mundo deportivo, al sumar una medalla de plata en los Juegos Nacionales del 2012.
Otros que se fueron
Antes de estos deportistas se habían marchado de tierras cesarenses, Ady Durán que lo hizo para Bogotá y Helena Guerrero que se fue a Risaralda; con ellos tomó vuelo una gran cantidad de futbolistas, algunos que labraron su futuro en América de Cali, como Foad Maziri o José Cuadrado con Millonarios y que ahora es arquero en el Once Caldas, entre otros que se fugaron por no tener un equipo de fútbol profesional al que pudieran representar en Valledupar o el Cesar.
Si se vieran las cifras del deporte se podría decir que en este departamento importa muy poco. O que se concentra en la construcción de escenarios deportivos, como lo muestra que en 2012 el gobierno departamental destinó 7.235 millones de pesos para todo Cesar, pero de esa cifra, solo dos mil millones de pesos los manejó directamente la Secretaría Departamental del Deporte (Serdeportes) en la contratación de los entrenadores, desarrollo de sus programas instituciones como ‘Muévete Cesar’, ‘Adulto Mayor’, ‘Hábitos y Estilo de Vida Saludable’, ‘Festivales Escolares’ y ‘Juegos Comunitarios’. De igual modo, estableció los convenios con las diferentes ligas deportivas.
Para el 2013, la cifra aumentó poco más de tres mil millones y llegó a 10.954 millones pesos. De ese dinero, 8 mil millones de pesos fueron destinados para la construcción de parques, coliseos y canchas, una de éstas será sintética, y está prevista para el barrio Las Flores de Valledupar.
De este presupuesto, el dinero que queda, es poco menos de 3 mil millones de pesos, que se deben repartir en gastos de funcionamiento, contratación de los entrenadores y monitores, además de establecer los convenios con las ligas.
Recursos Insuficientes
Para Yohenis Vanegas, directivo de la Liga de Taekwondo del Cesar, esos recursos son insuficientes, porque ya se ha visto que un alto porcentaje se gasta en pagar personal administrativo, mientras estas organizaciones sufren para cumplir con los objetivos, sumado a que los dineros de la Gobernación ya no llegan directamente a las ligas porque deben pasar por las manos de los llamados operadores.
“Ellos son los que contratan los uniformes, el bus, la alimentación, entonces la liga prevé los eventos pero después está sujeta a lo que digan los operadores”, agregó.
Luego de que desapareciera el Instituto Departamental de Deporte, Iderce, en la administración del gobernador Rafael Bolaños, se ha pedido la conformación de un nuevo ente; sin embargo, en la medida en que suben y bajan gobernadores, no pasa nada.
Según algunos líderes deportivos, como no hay un ente descentralizado, lo que se vive en materia deportiva es un completo desorden. Actualmente el deporte del Cesar lo maneja el Secretario de Planeación Departamental, ante la licencia que por maternidad pidió la titular Claudia Margarita Zuleta.
Para deportistas, entrenadores y dirigentes, es claro que el Secretario de Planeación debe atender los compromisos de su cartera y, debido a esta situación, las oficinas de la Secretaría Departamental del Deporte están solas la mayor parte del tiempo.
“En el tema del deporte del Cesar encontramos que hay una orfandad, lo que vemos es que al deporte del Cesar lo tienen relegado, y al final los deportistas se quieren ir para otros departamentos en donde los tratan mejor”, dice Yimis Núñez Hurtado, presidente de Acord Cesar, el gremio de los periodistas deportivos que está preocupado porque el apoyo para este sector no se ve.
Los deportistas de mejor rendimiento en el Cesar no están en casa. Patinadores, judocas y taekwondistas, han tenido que emigrar a otras tierras donde les dan lo necesario para seguir con sus carreras porque en este departamento no hay presupuesto para impulsar el deporte. También amenazan con fugarse, boxeadores y atletas.
Por Yolis Díaz Arrieta / EL PILÓN
[email protected]
Los deportistas de mejor rendimiento en el Cesar no están en casa. Patinadores, judocas y taekwondistas, han tenido que emigrar a otras tierras donde les dan lo necesario para seguir con sus carreras porque en este departamento no hay presupuesto para impulsar el deporte. También amenazan con fugarse, boxeadores y atletas.
La lanzadora de jabalina
Zuleima Aramendiz, nacida en el barrio Primero de Mayo se fue de Valledupar hace algunos años porque acá no tenía quien la apoyara. Todas sus medallas las ha obtenido con la liga de Antioquia, donde los paisas se sienten orgullosos cuando los representa a nivel mundial.
“Gracias a Dios que conté con apoyo en Antioquia, allí saqué también mi carrera universitaria, pero nunca olvido a mis paisanos”, dice desde Medellín Zuleima, quien ratifica que el apoyo que tiene el deporte en ese departamento se da por el interés que muestran sus gobernantes. “eso le da sentido de pertenencia a sus deportistas, ya sea que hayan nacido en su tierra o llevados de otros departamentos, ellos orgullosos gritan en los estadios, “Antioquia, Antioquia, Antioquia”, como señal de victoria.
En tierras paisas le dan al deportista todo lo que necesita: alimentación, hospedaje, sueldo, estudios, y entrenan con la mira en que compita en los campeonatos, mientras que en el Cesar se le pone a que participe.
Zuleima Aramendiz le entregó tres medallas de oro seguidas a Antioquia, en los Juegos Nacionales: del 96 en Bucaramanga, 2000 en Nariño y Boyacá y 2004 en Bogotá y Cundinamarca, además de una de plata en el 2008 en Cali y la de bronce el año pasado en las justas con sede en Popayán, Cúcuta y Montería.
A la judoca Yadinis Amaris Rocha le ocurre lo mismo en Santander, en donde la han apoyado e impulsado para que compita contra los mejores.
La decisión de irse de Cesar le sirvió para concentrarse en su carrera y, con el apoyo santandereano, logró un cupo a los Olímpicos de Londres en donde tuvo una aceptable presentación pese a que no ganó medallas. Esta joven ganó representando a Colombia en 2011 un oro en la copa mundo de Minsk, Bielorusia.
“Me tocó salir de Aguachica. En el Cesar fui varias veces Deportista del Año y sé que ellos me ayudaron en lo que pudieron, pero para llegar a lo alto tenía que salir. Le doy gracias a los dirigentes de Santander que me han apoyado en mi carrera”, dijo Yadinis Amaris, quien vive en Bucaramanga, pero que pasa vacaciones en su natal Aguachica, Cesar.
Patinan por otras tierras
Otro ejemplo del desinterés por el deporte es la patinadora Andrea Cañón, formada en el Club Midas de Valledupar; debió irse este año a representar al Club Kakiscur de Cartagena al que le acaba de dar una medalla de oro en un torneo nacional realizado en Tuluá. En ese mismo evento la vallenata Katiuska Mendoza, corrió para otro club de Cartagena.
“Aún no sé que va a pasar, he estado corriendo para un Club de Cartagena, esperando que me llamen del Cesar para informarme que me van a apoyar en mis estudios, con algún incentivo mensual, con los patines, con los viajes, pero no me han dicho nada”, dijo Katiuska.
Según Jeison Becerra, el entrenador de la Liga de Patinaje del Cesar, “lo que pasa es que el patinaje es un poco costoso y como algunos están dando resultado en las competencias nacionales, la falta de incentivo crea desinterés entre los practicantes, entonces los que tienen mejor suerte se van a otros departamentos”.
Ante la falta de apoyo, con Becerra coincide el presidente de la Liga de Patinaje departamental, Gustavo Galvis, quien asegura que ellos presentaron un proyecto a la Secretaría del Deporte de Cesar, y hasta la hora “allí no ha pasado nada”.
Galvis sabe que el esfuerzo lo han hecho los padres de los deportistas, quienes desde Valledupar trabajan para enviarles dinero y puedan continuar con sus carreras.
No lo valoraron
John Ochoa tiene un problema en Cali, le robaron una bicicleta prestada para sus entrenamientos matinales, los que alterna con la práctica del patinaje, y ahora debe buscar 950 mil pesos para pagársela al dueño. Este deportista quien ganó medalla de plata en el patinaje de los Juegos Nacionales del 2012 se fue del Cesar porque no encontró apoyo para seguir entrenando.
En enero, este joven de 18 años, había dicho, llorando, en Valledupar que nadie había valorado lo que consiguió en los Juegos Nacionales de Cúcuta de 2012, en un deporte donde reinan deportistas del Valle, Bogotá, Antioquia y Bolívar.
“Lo único que le dio la Gobernación fue un par de patines que usó en Cúcuta, nunca le hicieron un reconocimiento, tampoco le han dado los incentivos por la medalla ganada”, dice Álvaro, su padre, quien junto a su esposa vende ‘bolis’ en el Patinódromo de esta ciudad para ayudar con el sustento de Jhon quien acaba de sorprender al mundo deportivo, al sumar una medalla de plata en los Juegos Nacionales del 2012.
Otros que se fueron
Antes de estos deportistas se habían marchado de tierras cesarenses, Ady Durán que lo hizo para Bogotá y Helena Guerrero que se fue a Risaralda; con ellos tomó vuelo una gran cantidad de futbolistas, algunos que labraron su futuro en América de Cali, como Foad Maziri o José Cuadrado con Millonarios y que ahora es arquero en el Once Caldas, entre otros que se fugaron por no tener un equipo de fútbol profesional al que pudieran representar en Valledupar o el Cesar.
Si se vieran las cifras del deporte se podría decir que en este departamento importa muy poco. O que se concentra en la construcción de escenarios deportivos, como lo muestra que en 2012 el gobierno departamental destinó 7.235 millones de pesos para todo Cesar, pero de esa cifra, solo dos mil millones de pesos los manejó directamente la Secretaría Departamental del Deporte (Serdeportes) en la contratación de los entrenadores, desarrollo de sus programas instituciones como ‘Muévete Cesar’, ‘Adulto Mayor’, ‘Hábitos y Estilo de Vida Saludable’, ‘Festivales Escolares’ y ‘Juegos Comunitarios’. De igual modo, estableció los convenios con las diferentes ligas deportivas.
Para el 2013, la cifra aumentó poco más de tres mil millones y llegó a 10.954 millones pesos. De ese dinero, 8 mil millones de pesos fueron destinados para la construcción de parques, coliseos y canchas, una de éstas será sintética, y está prevista para el barrio Las Flores de Valledupar.
De este presupuesto, el dinero que queda, es poco menos de 3 mil millones de pesos, que se deben repartir en gastos de funcionamiento, contratación de los entrenadores y monitores, además de establecer los convenios con las ligas.
Recursos Insuficientes
Para Yohenis Vanegas, directivo de la Liga de Taekwondo del Cesar, esos recursos son insuficientes, porque ya se ha visto que un alto porcentaje se gasta en pagar personal administrativo, mientras estas organizaciones sufren para cumplir con los objetivos, sumado a que los dineros de la Gobernación ya no llegan directamente a las ligas porque deben pasar por las manos de los llamados operadores.
“Ellos son los que contratan los uniformes, el bus, la alimentación, entonces la liga prevé los eventos pero después está sujeta a lo que digan los operadores”, agregó.
Luego de que desapareciera el Instituto Departamental de Deporte, Iderce, en la administración del gobernador Rafael Bolaños, se ha pedido la conformación de un nuevo ente; sin embargo, en la medida en que suben y bajan gobernadores, no pasa nada.
Según algunos líderes deportivos, como no hay un ente descentralizado, lo que se vive en materia deportiva es un completo desorden. Actualmente el deporte del Cesar lo maneja el Secretario de Planeación Departamental, ante la licencia que por maternidad pidió la titular Claudia Margarita Zuleta.
Para deportistas, entrenadores y dirigentes, es claro que el Secretario de Planeación debe atender los compromisos de su cartera y, debido a esta situación, las oficinas de la Secretaría Departamental del Deporte están solas la mayor parte del tiempo.
“En el tema del deporte del Cesar encontramos que hay una orfandad, lo que vemos es que al deporte del Cesar lo tienen relegado, y al final los deportistas se quieren ir para otros departamentos en donde los tratan mejor”, dice Yimis Núñez Hurtado, presidente de Acord Cesar, el gremio de los periodistas deportivos que está preocupado porque el apoyo para este sector no se ve.