Luego que la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocersar, hiciera un seguimiento exhaustivo a las actividades que se venían practicando en la finca Distráeme, propiedad de Edwar Mattos, y en el que apoyados de la Policía Nacional tomaran medidas para evitar mayores afectaciones ambientales, la señora Alba Luz Luque, propietaria de la finca Río de Janeiro, pidió corroborar la información dada por la corporación.

En una carta enviada a EL PILÓN, Luque aseguró que “no fueron dos acequias desviadas como lo dijo Corpocesar, porque a un arroyo y a un río les cambiaron el cauce. El delito ambiental es enorme”.

Así mismo se refirió a que no detuvieron al infractor Edward Mattos Barrero, y que solo capturaron a dos hombres trabajadores de esa finca, quienes no son los dueños de la maquinaria incautada, ni de la finca Distráeme. “No hay derecho a confundir a la opinión pública en esa forma, la institución debe responsabilizarse de destruir la represa que por omisión permitió construir, porque las quejas las tenían mucho antes de comenzar las excavaciones”, dice el documento.

Alba Luz Luque aseguró que “Corpocesar debe realizar los trabajos para conducir las fuentes de agua nuevamente a sus cauces naturales, tal cual como reza en la Resolución Sancionatoria y sobre todo que no debe acusar de un delito ambiental a dos hombres que ganan el sustento de sus familias en labores agrícolas, trabajando en la finca Distráeme. Ellos son simplemente asalariados y no son propietarios de la finca o de las máquinas”, así está escrito en la carta.

Ante esto, el subdirector de la corporación, Leuger Cortez, expresó que la entidad no captura, pues solo les corresponde hacer el acompañamiento a la Policía frente al delito ambiental que se presente.

En cuanto a la recuperación de los afluentes dijo que son acciones que cuestan mucho dinero. “Volver un ecosistema a su estado natural no cuesta dos o cuatro pesos, lo que proponemos nosotros es la regulación y como presupuestalmente nosotros no estamos preparados porque somos una entidad del Estado que tiene que planificar los gastos con proyectos a largo o mediano plazo en aras de proteger los recursos naturales.

Ante este suceso, hay que planificar para el próximo plan de acción en el cuál hay que ingresar todas las inquietudes de acuerdo al impacto que generen”, indicó el funcionario.

Andreina Bandera / EL PILÓN
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