Este 15 de mayo Colombia conmemora el Día del Maestro para reconocer el trabajo, entrega y esfuerzos de una labor que a diario inspira a estudiantes, futuro del país.
Este 15 de mayo Colombia conmemora el Día del Maestro para reconocer el trabajo, entrega y esfuerzos de una labor que a diario inspira a estudiantes, futuro del país.
El Día del Maestro empezó a celebrarse en nuestro país el 15 de mayo de 1950 cuando el papa Pío XII nombró al sacerdote y docente San Juan Bautista de la Salle como patrono especial de los educadores. En ese mismo año, el presidente de Colombia, Mariano Ospina Pérez, declaró la fecha oficial.
En este día son varios los reconocimientos que obtienen de parte de sus alumnos y de las directivas de los colegios, universidades e instituciones donde cada día se esmeran para aportar su “granito de arena y contribuir al cambio de la sociedad” como lo define Angie Salazar, docente de inglés del Sena.
“Escogí ser docente porque es la única forma de cambiar y mejorar la sociedad en que vivimos. Para nadie es un secreto que hay bastantes problemas producto de personas sin el criterio y la ética bien formada y establecida. Es por esto que decidí ser docente, porque la clave de mejorar la sociedad es la educación”, mencionó Salazar, quien lleva cinco años ejerciendo esta profesión.
Agregó: “Lo que me motiva a ser mejor cada día son mis alumnos, poder recibir un ‘gracias profesora’ reconforta y motiva. Es por esto que siempre pienso en ellos al levantarme cada día porque sé que en las manos de los docentes está el futuro”.
Por su parte, Nubia Yohana Sánchez Gélvez, docente de tercer grado de primaria de la Institución Educativa San Alberto, sede Luis Felipe en el municipio de San Alberto, Cesar, manifestó: “Ser maestro es una profesión hermosa que te lleva a utilizar diferentes herramientas de aprendizaje para que los estudiantes se motiven cada día a aprender, a tenerle amor al estudio, y sobre todo a transformar actitudes negativas de comportamientos para que lleguen a ser unas personas de bien y productivas a la sociedad”.
Nubia recordó que descubrió su vocación cuando estaba cursado undécimo grado de bachillerato en el colegio Reyes Araque de La Vega, Norte de Santander, en el momento en el que desarrollaba su trabajo social en la jornada nocturna de esa institución educativa.
“En mi trabajo social en el colegio dicté clases a adultos mayores de la jornada nocturna descubrí que quería ser docente. Resalto el trabajo de maestros que marcan vida, dan ejemplos y una transformación en los estudiantes”, puntualizó Sánchez Gélvez, magíster en Gestión de la Tecnología Educativa de la Udes.
En el país hay más de 126 mil docentes, que inician en su mayoría una jornada laboral a las 6:00 de la mañana y retornan a sus casas en horas de la tarde o noche con la satisfacción del deber cumplido a pesar de no contar en algunos casos con las herramientas tecnológicas, físicas y humanas para el desarrollo de su profesión.
“A pesar de que en los colegios hay tantas necesidades, no se cuenta con buena infraestructura, con material didáctico, nosotros hacemos el empeño y el esfuerzo por brindar una buena educación a los estudiantes”, agregó Nubia Sánchez.
Por: Carmen Lucía Mendoza Cuello.
Este 15 de mayo Colombia conmemora el Día del Maestro para reconocer el trabajo, entrega y esfuerzos de una labor que a diario inspira a estudiantes, futuro del país.
Este 15 de mayo Colombia conmemora el Día del Maestro para reconocer el trabajo, entrega y esfuerzos de una labor que a diario inspira a estudiantes, futuro del país.
El Día del Maestro empezó a celebrarse en nuestro país el 15 de mayo de 1950 cuando el papa Pío XII nombró al sacerdote y docente San Juan Bautista de la Salle como patrono especial de los educadores. En ese mismo año, el presidente de Colombia, Mariano Ospina Pérez, declaró la fecha oficial.
En este día son varios los reconocimientos que obtienen de parte de sus alumnos y de las directivas de los colegios, universidades e instituciones donde cada día se esmeran para aportar su “granito de arena y contribuir al cambio de la sociedad” como lo define Angie Salazar, docente de inglés del Sena.
“Escogí ser docente porque es la única forma de cambiar y mejorar la sociedad en que vivimos. Para nadie es un secreto que hay bastantes problemas producto de personas sin el criterio y la ética bien formada y establecida. Es por esto que decidí ser docente, porque la clave de mejorar la sociedad es la educación”, mencionó Salazar, quien lleva cinco años ejerciendo esta profesión.
Agregó: “Lo que me motiva a ser mejor cada día son mis alumnos, poder recibir un ‘gracias profesora’ reconforta y motiva. Es por esto que siempre pienso en ellos al levantarme cada día porque sé que en las manos de los docentes está el futuro”.
Por su parte, Nubia Yohana Sánchez Gélvez, docente de tercer grado de primaria de la Institución Educativa San Alberto, sede Luis Felipe en el municipio de San Alberto, Cesar, manifestó: “Ser maestro es una profesión hermosa que te lleva a utilizar diferentes herramientas de aprendizaje para que los estudiantes se motiven cada día a aprender, a tenerle amor al estudio, y sobre todo a transformar actitudes negativas de comportamientos para que lleguen a ser unas personas de bien y productivas a la sociedad”.
Nubia recordó que descubrió su vocación cuando estaba cursado undécimo grado de bachillerato en el colegio Reyes Araque de La Vega, Norte de Santander, en el momento en el que desarrollaba su trabajo social en la jornada nocturna de esa institución educativa.
“En mi trabajo social en el colegio dicté clases a adultos mayores de la jornada nocturna descubrí que quería ser docente. Resalto el trabajo de maestros que marcan vida, dan ejemplos y una transformación en los estudiantes”, puntualizó Sánchez Gélvez, magíster en Gestión de la Tecnología Educativa de la Udes.
En el país hay más de 126 mil docentes, que inician en su mayoría una jornada laboral a las 6:00 de la mañana y retornan a sus casas en horas de la tarde o noche con la satisfacción del deber cumplido a pesar de no contar en algunos casos con las herramientas tecnológicas, físicas y humanas para el desarrollo de su profesión.
“A pesar de que en los colegios hay tantas necesidades, no se cuenta con buena infraestructura, con material didáctico, nosotros hacemos el empeño y el esfuerzo por brindar una buena educación a los estudiantes”, agregó Nubia Sánchez.
Por: Carmen Lucía Mendoza Cuello.