Tras visitar Colombia la pasada semana, el máximo órgano de decisión de Naciones Unidas aprobó hoy una declaración en la que quiso rendir “homenaje a la valentía de los colombianos por emprender el camino de la paz” y en la que confía en que Colombia sea “un ejemplo positivo para el resto del mundo”.

El texto recoge de forma oficial el mensaje de apoyo al proceso que los representantes de los quince países llevaron a Colombia y hace una evaluación positiva de lo que vieron sobre el terreno.

“El Consejo de Seguridad reconoce las importantes dificultades que plantea la implementación del Acuerdo Final de Paz y acoge con beneplácito los progresos realizados por el Gobierno de Colombia y las FARC-EP en la implementación del Acuerdo y su empeño por lograr una transición hacia la paz que beneficie a todos los colombianos”, señala la declaración.

Entre otras cosas, el Consejo celebra la llegada pacífica de casi 7.000 miembros de la guerrilla a las zonas acordadas para la desmovilización y el inicio del proceso de dejación de las armas.

Además, “acoge con beneplácito la constante determinación de las partes” para lograr que las FARC puedan dejar sus armas individuales antes de que venza el plazo de 180 días acordado.

El Consejo de Seguridad recuerda, por otra parte, que además el abandono de las armas será “vital” para la pronta adopción de las medidas pactadas para la “reincorporación y reconciliación”, con la plena participación de las mujeres.

También expresa su preocupación por “las recientes matanzas” de algunos miembros de las comunidades más afectadas por el conflicto, incluidos líderes comunitarios, y acoge con beneplácito los esfuerzos del Gobierno para garantizar la protección de esas comunidades.

Los embajadores del Consejo de Seguridad llevaron a cabo la semana pasada una visita de dos días a Colombia, la primera que el órgano realiza a un país de América Latina.

Entre otras cosas, los representantes de los quince países se reunieron con el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y con miembros de su gabinete, así como con representantes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y de la sociedad civil.

También visitaron la zona veredal transitoria de normalización (ZVTN) de La Reforma, dentro del municipio de Vistahermosa, en el departamento del Meta, donde 337 miembros de las FARC ya iniciaron su proceso de dejación de armas para volver a la vida en sociedad.

Naciones Unidas apoya este proceso a través de una misión aprobada el pasado año por el Consejo de Seguridad.

EFE