El Juzgado Segundo Penal Municipal de Valledupar con funciones de conocimiento, ayer, impuso una condena de 10 meses y 15 días de prisión a Álvaro José Maestre Carrillo, de 37 años de edad, por haber irrespetado a una dama, agarrándole los glúteos.

Según el juez del caso, más que un castigo, es una sanción moral para un acto reprochado por la sociedad actual que avanza en la erradicación de todo tipo de violencia contra las mujeres.

Maestre Carrillo incurrió en el delito de injuria por vía de hecho al agarrarle la nalga a una mujer que caminaba sola por una calle del norte de la capital del Cesar.

El hecho se presentó a las 11:00 de la mañana del 28 de mayo de 2014, en la carrera 6 con calle 11 del barrio Novalito, cuando la mujer de 26 años fue abordada por este sujeto que se desplazaba en una bicicleta.

“Yo me puse nerviosa cuando lo vi y aceleré el paso, apreté mi bolso, sentí que el señor me metió la mano en la cola, y me apretó duro las nalgas”, contó la víctima en la denuncia que instauró ante la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía.

“Mamacita rica, sabrosa, como me gustan, blanditas”, recuerda que le dijo el abusador en el momento que ella le reclamaba por haberla manoseado.

Aunque Álvaro José Maestre Carrillo se fue del lugar, la mujer buscó ayuda de un motociclista que transitaba por el sector y llamó a la Policía que lo capturó cuadras más adelante.

Fue así como al día siguiente, 29 de mayo, este albañil fue presentado ante el Juzgado Tercero Penal Municipal de Valledupar con funciones de control de garantías y en la audiencia de imputación de cargos se declaró culpable.

Según el abogado defensor, la condena se pudo haber evitado, pero el procesado insistió en afrontar las consecuencias por su comportamiento.

“El usuario de la defensoría dijo que él la había agarrado porque le había provocado y que eran situaciones que él asumía, ante eso la Defensoría no podría hacer otra cosa diferente que hacer el acompañamiento como lo hizo”, manifestó el abogado de la Defensoría del Pueblo, William Mejía Musa.

Álvaro José Maestre Carrillo no asistió a la audiencia de lectura de fallo realizada este viernes en el cuarto piso del Palacio de Justicia, diligencia en la que el juez Hernando Valderde le concedió el subrogado de la suspensión de la ejecución de la pena, por lo que no irá a prisión y solo deberá pagar una fianza de 50 mil pesos para seguir en libertad.

El hecho se presentó a las 11:00 de la mañana del 28 de mayo de 2014, en la carrera 6 con calle 11 del barrio Novalito, cuando la mujer de 26 años fue abordada por Álvaro José Maestre Carrillo, que se desplazaba en una bicicleta.