El director del DNP, Simón Gaviria Muñoz, instó a los sectores productivos y comerciales, así como a los hogares colombianos a adoptar medidas para reducir las pérdidas y desperdicios de alimentos.
Según un estudio realizado por el Departamento Nacional de Planeación DNP, en Colombia se pierden o desperdician 9,76 millones de toneladas de comida al año. Dicha cifra es alarmante puesto que representa el 34 por ciento del total de los alimentos que el país podría consumir durante un año, es decir que por cada 3 toneladas de comida disponible en Colombia, una tonelada va a la basura.
Los cálculos, que se realizaron con base en una metodología de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y de la Cruzada Nacional contra el Hambre de México, tuvo en cuenta cinco etapas de la cadena de los alimentos: la producción agropecuaria, la poscosecha y almacenamiento, el procesamiento industrial, la distribución y retail y la etapa de consumo en los hogares.
Esta metodología agrupa a su vez estas cinco etapas en dos conceptos que son pérdida y desperdicio y los cuales corresponden a dos momentos diferentes de la cadena alimentaria.
La pérdida se refiere a los alimentos que se dañan en las etapas de producción agropecuaria, poscosecha y almacenamiento y procesamiento industrial. Por otro lado, los desperdicios son los alimentos que se dañan en las etapas de distribución y retail y consumo.
De acuerdo con los resultados, de las 9,76 millones de toneladas que se pierden o desperdician en el país, el 40,5% (3,95 millones toneladas) lo hacen en la etapa de producción agropecuaria, el 19,8% (1,93 millones de toneladas) se pierde en el proceso de poscosecha y almacenamiento, el 3,5% (342 mil toneladas) en los procesos de procesamiento industrial.
El director del Departamento Nacional de Planeación, Simón Gaviria Muñoz, instó a mejorar, sobre todo, las etapas de producción, almacenamiento y procesamiento industrial, pues de cada 100 kilos de comida que se daña, 64 kilos lo hacen en esas etapas, lo cual genera, entre otras cosas, que los productores obtengan menos rentabilidad.
Sin embargo, Gaviria Muñoz indicó que no se pueden descuidar las etapas de los alimentos en los supermercados y en los hogares, pues por cada 100 kilos de comida dañada, 21 kilos se dañan en los supermercados, tiendas de barrio y plazas de mercado, y alrededor de 16 kilos se desperdician en los hogares.
Frutas y vegetales: se pierde y desperdicia el 58%
El caso más grave es el de las frutas y vegetales, pues por cada 10.434.327 toneladas disponibles al año, se pierden o desperdician 6.081.134 toneladas, lo que equivale al 58 por ciento.
Raíces y tubérculos: se pierde y desperdicia el 49%
Después de la frutas y vegetales, los productos que más se pierden son las raíces y tubérculos. En promedio, por cada dos kilos que llega a los hogares colombianos, un kilo se va a la basura. En el país, la cantidad de raíces y tubérculos disponible asciende a 4.938.546 toneladas de las cuales se pierden y desperdician 2.406.764 toneladas, el 49 por ciento.
Al igual que en las frutas y verduras, la gran parte de estos alimentos que va a la basura lo hace en la etapa de producción, almacenamiento y procesamiento industrial. De cada 100 kilos que se pierden 61 se desechan en ese proceso. Los otros 39 se desperdician, es decir, se botan en las etapas de distribución y retail y consumo.
Lácteos: se pierde y desperdicia el 23%
Pescados: se pierde y desperdicia el 15%
Granos: se pierde y desperdicia el 13%
Cárnicos: se pierde y desperdicia el 12%
Cereales: se pierde y desperdicia el 8%
• La región Centro Oriente, conformada por los departamentos de Santander, Norte de Santander, Cundinamarca y Boyacá es la que aparece de primera en cantidad de comida que se pierde, es decir, la que va a la basura en las etapas de producción, almacenamiento y procesamiento industrial. En esta región se pierde 1.725.095 (27,7%) toneladas de comida.
• En segundo lugar se encuentra la región Caribe (Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, La Guajira, Magdalena, San Andrés y Sucre). En esta región se pierden 1.131.099 (18,2%) toneladas de comida al año.
• En tercer lugar está la región Eje Cafetero (Antioquia, Risaralda, Caldas y Quindío) con 1.066.965 (17,1%) toneladas de comida perdida.
• En cuarto lugar se encuentra la región Pacífico (Chocó, Nariño, Cauca, Valle del Cauca), con 1.063.159 (17,1%) toneladas de comida perdida.
• En quinto lugar está la región Llanos (Arauca, Casanare, Guainía, Guaviare, Meta, Vaupés y Vichada) con 678.383 (10,9%) toneladas de comida perdida.
• Por último se encuentra la región Centro Sur (Tolima, Huila, Caquetá, Putumayo y Amazonas) en la que se pierden 557.023 (9.0%) toneladas al año.
Regiones de Colombia con más desperdicio
• La región Centro Oriente, conformada por los departamentos de Santander, Norte de Santander, Cundinamarca y Boyacá también aparece de primera en cantidad de comida que se desperdicia, es decir, la que va a la basura en las etapas de consumo y retail. En esta región se desperdician 1.708.919 (48,3%) toneladas de comida.
• En segundo lugar está la región Eje Cafetero (Antioquia, Risaralda, Caldas y Quindío) con 646.654 (18,3) toneladas de comida desperdiciada.
• En tercer lugar se encuentra la región Pacífico (Chocó, Nariño, Cauca, Valle del Cauca), con 488.539 (13,8%) toneladas de comida desperdiciada.
• En cuarto lugar se encuentra la región Caribe (Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, La Guajira, Magdalena, San Andrés y Sucre). En esta región se desperdician 472.844 (13,4%) toneladas de comida al año.
• En quinto lugar se encuentra la región Centro Sur (Tolima, Huila, Caquetá, Putumayo y Amazonas) en la que se desperdician 146.724 (4,2%) toneladas al año.
Por último está la región Llanos (Arauca, Casanare, Guainía, Guaviare, Meta, Vaupés y Vichada) con 71.031 (2,0%) toneladas de comida desperdiciada.
Recomendaciones a los consumidores
Antes de hacer las compras:
• Planear las comidas que van a cocinar antes de comprarlas teniendo en cuenta número de personas y momento en el que se esperan consumir.
• Revisar los inventarios de comida existente en la alacena, el refrigerador y el congelador.
• Elaborar una lista con las necesidades específicas de alimentos en el hogar.
Al momento de hacer las compras:
• Usar la lista de alimentos mientras se hace mercado para evitar la compra de alimentos no planeados.
• Tener en cuenta el momento en el cual serán consumidos los alimentos. Revisar fechas de vencimiento y procesos de maduración de perecederos
• No comprar una mayor cantidad de productos únicamente porque estos se encuentran en promoción (Por ejemplo, 2×1).
Después de realizadas las compras:
• Leer las condiciones de refrigeración y almacenamiento de los alimentos empacados para garantizar su conservación.
• Refrigerar las frutas, los huevos y el pan, y congelar las carnes y el pescado.
• Organizar los productos en la nevera y alacena para que estos sean vistos constantemente y así evitar o su vencimiento.
• Cocinar teniendo en cuenta las porciones que serán consumidas (no cocinar de más).
• Aprovechar la comida que sobra, no desecharla inmediatamente, idear formas de reutilizarla.
El director del DNP, Simón Gaviria Muñoz, instó a los sectores productivos y comerciales, así como a los hogares colombianos a adoptar medidas para reducir las pérdidas y desperdicios de alimentos.
Según un estudio realizado por el Departamento Nacional de Planeación DNP, en Colombia se pierden o desperdician 9,76 millones de toneladas de comida al año. Dicha cifra es alarmante puesto que representa el 34 por ciento del total de los alimentos que el país podría consumir durante un año, es decir que por cada 3 toneladas de comida disponible en Colombia, una tonelada va a la basura.
Los cálculos, que se realizaron con base en una metodología de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y de la Cruzada Nacional contra el Hambre de México, tuvo en cuenta cinco etapas de la cadena de los alimentos: la producción agropecuaria, la poscosecha y almacenamiento, el procesamiento industrial, la distribución y retail y la etapa de consumo en los hogares.
Esta metodología agrupa a su vez estas cinco etapas en dos conceptos que son pérdida y desperdicio y los cuales corresponden a dos momentos diferentes de la cadena alimentaria.
La pérdida se refiere a los alimentos que se dañan en las etapas de producción agropecuaria, poscosecha y almacenamiento y procesamiento industrial. Por otro lado, los desperdicios son los alimentos que se dañan en las etapas de distribución y retail y consumo.
De acuerdo con los resultados, de las 9,76 millones de toneladas que se pierden o desperdician en el país, el 40,5% (3,95 millones toneladas) lo hacen en la etapa de producción agropecuaria, el 19,8% (1,93 millones de toneladas) se pierde en el proceso de poscosecha y almacenamiento, el 3,5% (342 mil toneladas) en los procesos de procesamiento industrial.
El director del Departamento Nacional de Planeación, Simón Gaviria Muñoz, instó a mejorar, sobre todo, las etapas de producción, almacenamiento y procesamiento industrial, pues de cada 100 kilos de comida que se daña, 64 kilos lo hacen en esas etapas, lo cual genera, entre otras cosas, que los productores obtengan menos rentabilidad.
Sin embargo, Gaviria Muñoz indicó que no se pueden descuidar las etapas de los alimentos en los supermercados y en los hogares, pues por cada 100 kilos de comida dañada, 21 kilos se dañan en los supermercados, tiendas de barrio y plazas de mercado, y alrededor de 16 kilos se desperdician en los hogares.
Frutas y vegetales: se pierde y desperdicia el 58%
El caso más grave es el de las frutas y vegetales, pues por cada 10.434.327 toneladas disponibles al año, se pierden o desperdician 6.081.134 toneladas, lo que equivale al 58 por ciento.
Raíces y tubérculos: se pierde y desperdicia el 49%
Después de la frutas y vegetales, los productos que más se pierden son las raíces y tubérculos. En promedio, por cada dos kilos que llega a los hogares colombianos, un kilo se va a la basura. En el país, la cantidad de raíces y tubérculos disponible asciende a 4.938.546 toneladas de las cuales se pierden y desperdician 2.406.764 toneladas, el 49 por ciento.
Al igual que en las frutas y verduras, la gran parte de estos alimentos que va a la basura lo hace en la etapa de producción, almacenamiento y procesamiento industrial. De cada 100 kilos que se pierden 61 se desechan en ese proceso. Los otros 39 se desperdician, es decir, se botan en las etapas de distribución y retail y consumo.
Lácteos: se pierde y desperdicia el 23%
Pescados: se pierde y desperdicia el 15%
Granos: se pierde y desperdicia el 13%
Cárnicos: se pierde y desperdicia el 12%
Cereales: se pierde y desperdicia el 8%
• La región Centro Oriente, conformada por los departamentos de Santander, Norte de Santander, Cundinamarca y Boyacá es la que aparece de primera en cantidad de comida que se pierde, es decir, la que va a la basura en las etapas de producción, almacenamiento y procesamiento industrial. En esta región se pierde 1.725.095 (27,7%) toneladas de comida.
• En segundo lugar se encuentra la región Caribe (Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, La Guajira, Magdalena, San Andrés y Sucre). En esta región se pierden 1.131.099 (18,2%) toneladas de comida al año.
• En tercer lugar está la región Eje Cafetero (Antioquia, Risaralda, Caldas y Quindío) con 1.066.965 (17,1%) toneladas de comida perdida.
• En cuarto lugar se encuentra la región Pacífico (Chocó, Nariño, Cauca, Valle del Cauca), con 1.063.159 (17,1%) toneladas de comida perdida.
• En quinto lugar está la región Llanos (Arauca, Casanare, Guainía, Guaviare, Meta, Vaupés y Vichada) con 678.383 (10,9%) toneladas de comida perdida.
• Por último se encuentra la región Centro Sur (Tolima, Huila, Caquetá, Putumayo y Amazonas) en la que se pierden 557.023 (9.0%) toneladas al año.
Regiones de Colombia con más desperdicio
• La región Centro Oriente, conformada por los departamentos de Santander, Norte de Santander, Cundinamarca y Boyacá también aparece de primera en cantidad de comida que se desperdicia, es decir, la que va a la basura en las etapas de consumo y retail. En esta región se desperdician 1.708.919 (48,3%) toneladas de comida.
• En segundo lugar está la región Eje Cafetero (Antioquia, Risaralda, Caldas y Quindío) con 646.654 (18,3) toneladas de comida desperdiciada.
• En tercer lugar se encuentra la región Pacífico (Chocó, Nariño, Cauca, Valle del Cauca), con 488.539 (13,8%) toneladas de comida desperdiciada.
• En cuarto lugar se encuentra la región Caribe (Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, La Guajira, Magdalena, San Andrés y Sucre). En esta región se desperdician 472.844 (13,4%) toneladas de comida al año.
• En quinto lugar se encuentra la región Centro Sur (Tolima, Huila, Caquetá, Putumayo y Amazonas) en la que se desperdician 146.724 (4,2%) toneladas al año.
Por último está la región Llanos (Arauca, Casanare, Guainía, Guaviare, Meta, Vaupés y Vichada) con 71.031 (2,0%) toneladas de comida desperdiciada.
Recomendaciones a los consumidores
Antes de hacer las compras:
• Planear las comidas que van a cocinar antes de comprarlas teniendo en cuenta número de personas y momento en el que se esperan consumir.
• Revisar los inventarios de comida existente en la alacena, el refrigerador y el congelador.
• Elaborar una lista con las necesidades específicas de alimentos en el hogar.
Al momento de hacer las compras:
• Usar la lista de alimentos mientras se hace mercado para evitar la compra de alimentos no planeados.
• Tener en cuenta el momento en el cual serán consumidos los alimentos. Revisar fechas de vencimiento y procesos de maduración de perecederos
• No comprar una mayor cantidad de productos únicamente porque estos se encuentran en promoción (Por ejemplo, 2×1).
Después de realizadas las compras:
• Leer las condiciones de refrigeración y almacenamiento de los alimentos empacados para garantizar su conservación.
• Refrigerar las frutas, los huevos y el pan, y congelar las carnes y el pescado.
• Organizar los productos en la nevera y alacena para que estos sean vistos constantemente y así evitar o su vencimiento.
• Cocinar teniendo en cuenta las porciones que serán consumidas (no cocinar de más).
• Aprovechar la comida que sobra, no desecharla inmediatamente, idear formas de reutilizarla.