Como una manifestación de la grandeza de la fe de los habitantes de Valledupar definió el monseñor Luis José Rueda Aparicio, presidente de la Conferencia Episcopal Colombiana, a la Catedral Santo Ecce Homo que cumplió este miércoles el tercer año de su consagración.

Monseñor Rueda, quien presidió la ceremonia de aniversario, calificó de “hermosísima y moderna”, la iglesia que es la más grande y la de mayor capacidad para acoger feligreses en Colombia.

“Una iglesia que tiene un sentido de acogida en su arquitectura, que es moderna, que la merecía Valledupar y que ha sido fruto del liderazgo espiritual del señor obispo Óscar José Vélez, pero en comunión con presbíteros y comunidades, él solo no hubiera podido, la catedral, en medio de su belleza, de su magnitud tan grande, expresa también la grandeza de la fe de los habitantes de Valledupar y de toda la Diócesis en estas regiones, porque expresa cada ladrillo un acto de fe”, indicó el arzobispo de Bogotá.  

Rueda Aparicio aseguró que la he hecho seguimiento a la Diócesis de Valledupar desde hace mucho tiempo y destacó cómo ha crecido esta iglesia a la par del desarrollo urbanístico y civil de la ciudad.  “Tenemos muchas parroquias, tenemos muchos seminaristas, tenemos muchas pequeñas comunidades y comunidades de parejas, tenemos una iglesia viva realmente en esta zona de Colombia”, señaló.

Finalmente, el máximo jerarca de la Iglesia católica en el país, resaltó “la alegría y la manifestación abierta de la fe” como algo propio de la Diócesis de Valledupar, Cesar y La Guajira.

“Si bien, la iglesia es una santa católica y apostólica en todos los continentes, la fe se expresa de diferentes maneras en cada región.  Algo propio de la fe de la Diócesis de Valledupar es la alegría, una fe con alegría, que la expresan con gozo, que la manifiestan, que no la ocultan, es un catolicismo que no se esconde, que se expresa y la magnitud de la catedral lo manifiesta así, no queremos tener una iglesia escondida”, puntualizó.

La obra de la Catedral Ecce Homo fue consagrada en 2019, cuando la Diócesis de Valledupar cumplía 50 años de existencia.

POR JOSÉ ALEJANDRO MARTÍNEZ VEGA / EL PILÓN